Love You Endlessly

Capitulo 7

Harley: 11 años
Daniel&Adrik: 9 años
Olivia: 6 años

Louis estaba de vacaciones, lo que significaba que podría llegar a una casa completamente destrozada, porque cuando su alfa tenía el descanso adecuado y el estado de ánimo idóneo podía ser más niño que su propios hijos

Sabe que no habrá gritos, su alfa es la parte que se encarga de la disciplina, porque les dará mucha manga libre a sus hijos pero en cuanto se pasaban de la línea se ponía firme

"No voy a criar a una panda de salvajes" fueron sus palabras cuando castigo a los mellizos y Harley por algo de lo que realmente no se acuerda, pero por una parte esta agradecido de no tener que ser el policía malo, era horrible cuando se trataba de decirles que no a sus hijos o echarles la bronca, simplemente le salía ser tan maternal, tan dulce con ellos y es que era su mayor naturaleza por ser omega, bueno, depende que omega pero en su caso se cumplía a la perfección

Pero para su sorpresa no había ningún ruido cuando abrió la puerta de casa, no había humo en el aire, ni pies corriendo para saludar, no hubo besos de bienvenida o gritos entusiasmados porque el volviera a casa, cosa que le decepcionó bastante

No había nadie en el salón, tampoco en la cocina o en las habitaciones, ni siquiera estaban haciendo el tonto en el jardín, todo era muy raro, frunció la nariz, tratando de encontrar los aromas de su familia y estaba aún más confuso cuando todo le dirigía al sótano

Bajo sin hacer el menor ruido, escuchando vagos sonidos desde una de las habitaciones, abrió ligeramente la puerta para poder ver lo que su familia estaba haciendo. Su alfa se encontraba sentado en el piano, con Olivia en un muslo derecho y Adrik sentado a su izquierda, los dos con los dedos en las teclas, Harley se apoyaba contra una pared, con el ukelele que le compraron hacia unos años entre los brazos y Daniel estaba de pie con un micrófono y las mejillas rojas

-¿Otra vez, por favor?- pidió con voz pequeña y algo avergonzada, su alfa alzo la mirada con una sonrisa amable

-Tranquilo Dee, contra más nervioso te pongas peor lo vas a hacer, relajate un poco, respira mi pequeño leon- el niño asintio y dio una profunda respiración, su primogénita seguía tocando acordes al azar sin sentido

-Quiero que salga bien papá, todos lo estáis haciendo genial y yo fallo siempre en la misma nota- no podía verle bien pero esta seguro de que ya tiene los ojos cristalizados, su pequeño omega siempre ha sido sensible y solo quiere entrar a consolar a su cachorro

-A mamá le va a encantar aunque desafines cada nota- su primogénita habla tranquila, con los ojos pegados en las cuerdas del ukelele

-No lo entiendes Harls- el niño niega con la cabeza repetidas veces

-Niños- era una advertencia, Louis sabía que su hija respondería y entonces los dos niños seguramente comenzarían una pelea absurda-A veces me pregunto porque os involucró en las cosas si siempre acabáis así

-Papa estas siendo injusto- Harley estaba pasando por una pequeña etapa rebelde en esos momentos y a la mínima contradecia a su padre y digamos que eso de que no le obedezca su propio cachorro no le gustaba ni a Louis ni a Deimos y está casi seguro de que este es el punto de ruptura de su alfa

-¿Crees que soy injusto Harley Ailana Tomlinson?- dejo a la benjamina de la familia en el banco y se levantó, su hija mayor copió sus movimientos, la diferencia de altura era abismal pero su hija seguía firmemente plantada sobre sus pies mirando hacia arriba-¿Quieres que te diga lo que yo considero injusto señorita?

-Adelante, iluminame

-Considero injusto que estés a la defensiva con todos nosotros cuando no te hemos hecho nada, que te pida las cosas amablemente y tu respondas mal, que el otro día le hiciste un desprecio a tu madre y se pasó toda la noche llorando pensando que ya no le querias cerca y diciendo todas esas cosas que no quiero repetir- la cara de Harley cayó, el arrepentimiento filtrandose en su expresión y un olor picante comenzando a llenar la habitación-¿Te crees que te quería meter en esto niña? Esto es un regalo para tu madre y después de ese día no iba a dejarte participar, pero mira, decidí darte una oportunidad ¿Y que has hecho toda la tarde?