AQUEL 18 (SAN Y TÚ)

CAPÍTULO 5: MURO DE DECISIONES

Me encuentro con un obstáculo enorme.

Observo a mi alrededor, y no veo más camino en ningún lugar y pienso ¿Me perdí? ¿Será que tomé el camino correcto o simplemente me regreso? Si llegué a perderme; aprendí mucho y me alegra. Si no tomé el camino correcto; me gustó haberlo tomado. Pensé y sentí que este era, y mantengo esa decisión.

No puedo devolver lo que he vivido, no puedo perder más tiempo. Percibo que el inmenso muro tiene muchas huellas, cicatrices y marcas, ya sea un beso, rastros, sonrisas y caras tristes marcadas... Podría pasar dos minutos o más solo contando esas marcas y huellas, pero creo que no tengo tanto tiempo para hacerlo.

Noté claramente dibujado en aquel muro el lago que atravesé. También veo reflejado, con tres colores distintos, los espejos con los cuales me topé en este vasto camino. Me pregunto ¿Este muro será un mapa? ¿Tendría que guiarme de él para hallar la salida? No lo creo, me pregunto ¿Qué seguirá apareciendo en mi camino? Aquellas fechas también están marcadas en el muro:

18/07
18/10
18/05

- El momento perfecto para tomar una decisión, es aquel instante en el que entiendas y aceptes de corazón todo lo que haz pasado - replicó SAN

Pienso: «Si el destino me diera 5 minutos (25 años) en el laberinto, para remediar todo lo que me ha pasado ¿Lo haría?» Pues no, de los errores se aprende. No cambiaría todo lo bueno y malo que me ha pasado; estuve triste cuando lo necesité y feliz cuando quise estarlo.

Esos momentos me han marcado, son mis fortalezas. Lucho y continuo gracias a ellos. Decido seguir avanzando; decido vivir, pienso vivir, necesito vivir, decidí seguir caminando sobre cualquier obstáculo, mantengo mi decisión y la acepto.

Veo y leo lo que aparece escrito en el muro: «Las decisiones nos permiten realizar acciones para nuestra plena felicidad oculta, mantener una decisión triste para tí te hará más fuerte. Si decides abandonar, hazlo. Si decides seguir, continúa. Las decisiones, por malas o buenas que sean, nos hacen encontrar la verdadera fuerza interior, acepta y persevera.»

Logro escuchar a la lejanía un gran sonido.

De repente, aquel muro empieza a colapsar, todo se empieza a poner oscuro.

- SAN, ¿Este será el fin? -