Las Palabras De Long Horse.

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Hay lo tenia frente a él. Balto estaba completamente aterrorizado, casi al borde de sufrir un paro cardíaco, de padecer de un gran susto, por que lo que estaba viendo en ese momento, era el más grande de todos los sustos que había tenido, estaba seguro de que ninguna otra cosa se podría comparar con el miedo y completo terror que le estaba infundiendo...

....aquel ser.

¡¿Pero que demonios era esa cosa?!

Aparte de ser terrorífico, también era fascinante, temblando como nunca lo había hecho en su vida, Balto también pensó que nunca en su vida había visto a otra criatura igual, pero no sabía que era exactamente, aunque ahora al menos sabía quién era el que había estado produciendo esos sonidos a huesos crujiendo y emanando ese fuerte olor a canela, era ese extraño ser, con el Balto se encontraba cara a cara, el ente no se inmutó con la reacción aterrada de Balto, y en cambio se mantuvo observándolo fijamente.

Se podía sentir un claro ambiente de incomodidad, tensión, terror, miedo, Balto juraría que su sangre se estaba congelando toda en ese momento, y los ruidos leves de la noche no ayudaban en lo absoluto, sentía que iba a desmayarse en cualquier momento, pero no podía hacerlo, no si aquel ser pudiera tener malas intenciones, en cambio pensó que tal vez sería una mucho mejor idea salir corriendo, disparado como bala, pero el problema era que sus piernas no le respondían, el miedo había paralizado todo su cuerpo, se maldijo así mismo.

No sabía por qué no podía, pero en verdad quería huir, pero todo su cuerpo se había paralizado y lo único que podía esperar de eso era una muerte segura, porque simple y lógicamente una criatura de ese aspecto no podía tener buenas intenciones en lo absoluto, no de esta forma, por lo que el había aprendido de en todos los relatos de terror, así que ya solo podía esperar lo peor.

Pero para su sorpresa no fue así, el ambiente seguía manteniendose completamente tenso, sin embargo la criatura no atacó a Balto ni trató de hacerle ningún tipo de daño, solo se mantenía viéndolo fijamente y Balto no sabía decir si la criatura era pacífica o agresiva, y sólo tenía una forma de averiguarlo. A la cuenta de tres, Balto arrancaría a correr y si la bestia macabra lo atrapaba, entonces sabría cuál sería su cruel destino.

Pero no pudo hacerlo, aún por más que quiso moverse, sus patas no respondían, de echo, su cuerpo entero no parecía reaccionar a su cerebro, el cual también había entrado en trance.

Balto había sido víctima del poder telepático de él caballo largo.

La criatura empozo a hablar

.. Balto, Balto, Balto!, no tengas miedo, no voy a hacerte daño.

Balto : ¿Pero quien eres tu?

... Mi nombre... Es Long Horse, o al menos, así me han conocido siempre.

Balto : ¿Que eres exactamente?, ¿Y que quieres de mi?

Long Horse : Tranquilo, no pienso lastimarte, no debes temerme, yo no soy tu enemigo.

Balto : Perdón, pero realmente tu apariencia es de temer...

Long Horse : Tienes miedo de mi, y lo comprendo, es cierto que mi aspecto no es para confiar.

Balto : No te quise ofender, lo siento, es que si asustas un poco.

Long Horse : No te culpo, nunca he culpado a nadie antes por temerme, pero lo prometo, yo solo vine a ayudar.

Balto : ¿Ayudar?

Long Horse : Así es, soy un guardian y siempre estoy tratando de proteger a los humanos y todo tipo de seres vivientes de los peligros de la existencia.

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