#ㅤ𝐖𝐇𝐘? | sakuatsu。

Reason 5.

« Porque escapaste de tus compañeros solo para buscarme. »
ㅤㅤ

Sakusa caminaba a un lado de sus compañeros con la mirada en el suelo y el ceño levemente fruncido. Habían terminado de cambiarse hacía un par de minutos y tenían ya todo recogido en sus bolsos de deporte. El torneo para ellos había finalizado tras perder el partido contra Inubushi East, siendo una gran sorpresa para la mayoría de espectadores el ver al equipo de una de las tres grandes estrellas de Japón perder. El azabache sabía cuales eran los motivos de aquel fallo en el juego, y es por eso que no se frustraba tanto por ello. Pero sí era cierto que, a pesar de no molestarse como habrían hecho otros, se sentía mosqueado. Su pequeño enojo venía de otras cosas de las cuales prefería no hablar.

Suspiró tras el cubrebocas, alzando la mirada para centrarse en la puerta de salida que tenía a unos metros de él. Hasta que por el rabillo del ojo visualizó una figura conocida corriendo en su dirección.

ㅤㅤ─────¡ Omi - kun ! ─────Aquel grito llamó la atención de todo el equipo, quienes detuvieron su andar para centrarse en el muchacho. Unos le miraban a él, otros a su compañero, y otros, muy pocos, siguieron su camino.

Kiyoomi cerró sus ojos, pretendiendo que con ello fuera a desaparecer como si de un sueño se tratara. Pero no fue así, el rubio llegó a su lado, con una gran sonrisa en su rostro.

ㅤㅤ─────¿Te vas ya? Pensé que ibas a quedarte un poco más ─────Comentó con su voz suave que ya había tomado por costumbre usar cuando se cruzaba con el de lunares.

ㅤㅤ─────No tenemos nada que hacer aquí si hemos perdido ─────Le respondió en un tono serio, bajo la atenta mirada de todos sus compañeros. Le estaba poniendo nervioso ser el centro de atención justo en aquel momento.

ㅤㅤ─────Ya veo... ¿Nos volveremos a ver pronto? ─────Alzó una cejita, sonriendo de forma ladera mientras cruzaba sus brazos por detrás de su espalda.

Sakusa no le respondió, le miró de arriba abajo y asintió con la cabeza sin más, volviendo a retomar su camino sin despedirse de él. A Atsumu no le molestó aquella acción, con un « sí » indirecto le era suficiente.

ㅤㅤ─────¡ Atsumu ! ─────Se escuchó el grito de su hermano llamándole a lo lejos. Venía acompañado por su capitán y el número diez del equipo. El rubio vio alejarse y salir por aquella puerta al Itachiyama al completo, sonriendo cual niño pequeño antes de girarse hacia sus compañeros y volver con ellos para hacer la misma acción que aquel azabache; marcharse y volver a casa.