My diary. [Larry Stylinson]

2 "Empezamos de cero hazz"

Harry actualmente tiene 15 años.

Ya pasaron 8 años dé la muerte de Des Styles y harry todavía sentía punsadas en el pecho, seguía con el dolor, seguía sufriendo como ese mismo día en que su padre partió, Había generado una clase de "Trauma" en harry, y no, no se volvió el chico malo que le importa todo una mierda, ahora es un chico silencioso, apartado de todos. Su madre lo llevó a unas sesiones de terapia pero su hijo seguía estando igual de mal, por lo cual no lo mando más.

No se quería dar por vencida, era su bebé y ninguna madre quería que su hijo esté mal.

Un día de esos pensando en qué podía hacer, se le ocurrió la gran idea según ella; mudarse. Iba a costar irse de la casa en la que se criaron sus hijos, en las que pasaron tantas cosas hermosas con su esposo, una casa llena de recuerdos. Pero era todo por el bien de Harry.

Una nueva casa, nueva ciudad, nueva escuela. La antigua casa de su madre en Doncaster era perfecta,

Anne: Harry arma tus maletas, nos vamos de esta casa (Le dijo mirándolo a los ojos).

Harry: ¿Qué? (Es una de las pocas veces que le dirigía la palabra a su mamá)

Anne: Lo que escuchaste. Nos vamos a la casa de tu abuela, cariño.

Harry simplemente asintió y se dirigió escaleras arriba hacia su cuarto, no tenía mucha ropa por lo cual no resultó muy complicado armar su única valija. Cuando bajó, ya su madre se encontraba con gran parte de sus pertenencias, la otra mitad ya estaba en el auto.

Anne: ¿Estás listo harry? (Preguntó con cierta nostalgia)

Harry: ¿Haremos nuestra vida de nuevo? ¿Será todo mucho mejor?

Anne: Si, empezaremos de cero hazz (Mientras ponía el auto en marcha, alejándose de su casa.)

"Todo estara bien, todo estará bien, todo estará bien" Repetía  Harry en su cabeza, estaba demasiado nervioso. Tenía miedo de que le ocurran cosas malas en Doncaster, miedo de que lo molesten en la escuela como lo hacían. Tenía miedo a las personas.

Miedo de que lo abandonen como su padre lo hizo.

No quería encariñarse con nadie porque sabía que de un día a otro se iba a ir.