Agradable

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Cuando Jiang Cheng reaccionó se sentía deshuesado, sus músculos se sentían un poco tensos pero talvez se debía al tiempo que había estado durmiendo. ¿Pero en qué momento se durmió?

No tenía muchos recuerdos más que haber llegado de mal humor a casa, ese día su trabajo habia sido más estresante de lo usual, reuniones absurdas que no lo llevaron a nada, más papeleo, riñas entre empleados, clientes quejumbrosos. En fin, ese día hizo todo lo necesario para ponerlo de mal humor.

Le tomó unos cuantos segundos reaccionar a las suaves caricias en su cabello y al hecho de no estar acostado en su cama sino que estaba afuera en el patio, y su cabeza descansaba en el regazo de su esposa, Wen Qing.

Con un poco de dificultad abrió sus ojos intentando acostumbrarse nuevamente a la luz, lo primero que logró ver fue el bello rostro de su esposa concentrado leyendo un libro, quizás sobre medicina para su próxima clase o simplemente una novela ligera. Bueno ahora entendía un poco cómo se quedó dormido, a pesar de estar concentrada leyendo Wen Qing había estado acariciando sus cabellos de forma constante con su mano derecha, la sensación resultaba agradable y reconfortante.

Soltó un suspiro que nisiquiera él sabia que estaba aguantando captando así la atención de Wen Qing.

- ¿Mejor? - le preguntó Wen Qing mientras dejaba a un lado su libro, las caricias en su cabello no pararon y Jiang Cheng mentiría si dijera que no se alegraba de eso.

- Mejor - Jiang Cheng asintió sin poder evitar sonreír levemente estirando un poco su mano para tocar el rostro de su esposa, temiendo que esa agradable sensación fuera solo un sueño más. Wen Qing agacho su rostro para besarlo, como si hubiera podido leer su mente y quererle comprobar que nada de eso era solo un sueño.
Años casados y Jiang Cheng aún temia que todo podría ser solo un sueño del que pronto despertaría para darse cuenta que estaba solo. Aunque muy en su interior sabia que eso era imposible.

A lo lejos escucharon las pequeñas risas complices de sus hijos, quienes posiblemente los estaban espiando en ese momento. Ambos no pudieron evitar reír avergonzados ante la penosa sensación de haber sido atrapados, aunque después de unos segundos los vieron acercarse para darle una bienvenida a casa a su padre.

Jiang Cheng aún no entendía bien lo que había ocurrido después de llegar del trabajo, quizás con el pasar de las horas su cerebro trabajaría mejor y le daría las respuestas que necesitaba, quizás incluso se sentirá avergonzado y tendrá que dar algunas disculpas, pero en lo que eso pasaba seguiría disfrutando ese agradable momento con su familia.

***
No lo negaré, amanecí muy soft 🤧 y quise hacerle algo a mis niños con esta sensación.

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