Empezando de nuevo

Capítulo 7

Los días pasaron después de la fallida cena con Bankotsu y cómo terminaron las cosas. Aome realmente se sentía culpable por haberlo ilusionado y esperaba que él pudiera superarlo en algún momento y volver a ser su amigo. Tal vez sonaba egoísta, pero no quería perder su amistad. Sabía que se había equivocado al aceptarlo cuando estaba actuando dolida por lo que había escuchado de Inuyasha. Quizás, al regreso, podría darle una oportunidad a Bankotsu. Por ahora, lo más importante era estar con su familia, apoyar a su madre y a su abuelo en la situación actual.

Estaría en Japón, y pensó que podría ofrecerle a Sango su ayuda con la boda. Tendría tiempo, ya que no tenía mucha inspiración para el libro en ese momento. Además, estar con sus amigos en lugares con tantos recuerdos podría ayudarla a encontrar esa chispa de imaginación que le faltaba. ¿Cómo terminaría su libro? Ese era uno de los interrogantes en medio de toda su situación, pero decidió dejar de darle más vueltas al asunto. Ya pensarían cómo arreglar su vida más adelante.

Solo necesitaba dejarle una copia de las llaves a la señora Jones, su vecina. Transferiría dinero a la persona encargada de limpiar su casa y todo estaría organizado para su viaje y el encuentro con su familia. Mientras recogía y dejaba las maletas cerca de la puerta para que la salida del día siguiente fuera más rápida, se dirigió a la cocina para cenar algo. No tenía mucho, ya que como se iba, no había comprado más que lo básico para poder cenar. Desayunarían en el aeropuerto al día siguiente.

De repente, sonó el timbre. Al abrir, se encontró con su amiga de la universidad, Lizzie, quien había estudiado literatura con ella. Se habían vuelto muy cercanas porque a Liz le encantaba la cultura japonesa, y a Aome le divertía enseñarle sobre ello. Liz, a su vez, le enseñaba cosas sobre la sociedad occidental para que Aome cometiera menos errores y dijera cosas más apropiadas para los demás. Fue una época muy buena. Liz había ayudado mucho a Aome a sobrellevar su rompimiento con Inuyasha y la había acompañado durante todo el proceso.

Era una sorpresa ver a Lizzie ahí, considerando que vivía en Londres.

Aome abrió la puerta con sorpresa al encontrarse con Lizzie, su amiga de la universidad.

Lizzie! ¡Qué sorpresa verte!, bienvenida. Pasa, por favor.

Gracias, Ao. ¿Estás acaso mudándote o algo así?

Solo voy a Japón por unos meses. Mi vecina se quedará a cargo del apartamento. Mi abuelo está enfermo y mi mamá me pidió que la acompañara. Además, Sango se casa, así que aprovecharé para ayudarla con los preparativos. Pero, ¿qué haces tú por aquí?

Me alegro por Sango. ¿Se casa con el mismo mujeriego del que siempre me hablaste? ¿Y tu abuelo, está grave? Necesito inspiración para mi próxima historia. Estoy trabajando en una de época, pero he estado bloqueada. Pensé que podría quedarme contigo un tiempo, pero si vas de salida, ya me las arreglaré.

Oh, claro que puedes quedarte. Así no quedará el piso solo, tendrás dónde quedarte y yo estaré tranquila sabiendo que hay alguien aquí. La señora Jones es amable, pero es mayor y me preocupaba dejarle el trabajo de cuidar el lugar. Llegas como mandada del cielo. Lo único es que tendremos que salir a hacer unas compras. No sabía por cuánto tiempo me iba, así que solo dejé lo básico para la cena. Mejor vamos al supermercado a comprar algunas cosas que necesitarás.

Muchas gracias, Ao. Prometo cuidar de todo. Espero que tu abuelo mejore pronto.

Sí, yo también lo espero. Respecto a Sango, sí, se casa con Miroku. Ellos fueron creados para estar juntos. Son muy felices. Miroku le propuso matrimonio aquí, en las Cataratas del Niágara. Según Sango, fue mágico y especial. Seré su dama de honor y madrina —dijo con una sonrisa algo triste—. Espero poder apoyarla ahora que estaré en casa. Cuando organicemos su despedida de soltera, sin duda tendrás que venir para acompañarnos. Aunque no pasaste tanto tiempo con Sango, ustedes se llevaron bien, y sé que disfrutarás de su compañía y me ayudarás a hacerla espectacular.