̶M̶̶í̶̶o̶ (JayWon)

7

-Te pareces a papá-(Le mencionó Shim a un lado suyo, ambos mirando a la misma dirección)
-Ni me lo digas-(Respondió en un murmuro, suspirando y frotandose los ojos junto a la frente)

Ambos estaban en la habitación donde habían dejado a SungHoon, JungWon estaba desmayado sobre la cama mientras el doctor de la aldea lo revisaba en busca de que todo estuviera bien, el Park menor seguía arrodillado a un lado de su hermano con una de sus manos entrelazadas al contrario, su expresión era triste mientras veía las marcas moradas de su cuello.

Una ves el chequeo terminado, el doctor (también Alfa por cierto) se acercó a ambos familiares, comenzando a hablar.
-El está bien, tal ves cuando despierte le duela el cuello por unos días, pero para suerte no fue nada grave-(Susurró mientras suspiraba y miraba a los Omegas)-Reposo, chicos, necesita reposo, aparte de que se ve que no ha comido nada-(Les encargó, mirando a ambos con reproche, los otros dos rápidamente asintiendo)-Dale estas pastillas para que la inflamación baje en cuanto despierte-(Jay tomó el frasco, agradeciéndole al doctor y este saliendo)

SungHoon solo se mantenía con la cabeza apoyada en el colchón, sus piernas seguían igual mientras dejaba caricias en la mano del menor, preocupado de como estuviera en cuanto despertara.

-Buscaré comida-(Le murmuró Jake, saliendo de la habitación mientras el se encaminaba a la mesa de luz y dejaba las pastillas en ella)
El azabache menor ni si quiera volteó la mirada en cuanto pasó por detrás, más concentrado en dejarle caricias al menor de la habitación.

Se tomó un momento para mirar a JungWon, el chico era bonito, tenía ojos grandes aunque estuvieran cerrados, labios tiernos, una nariz pequeña y unos oyuelos que había visto cuando le sonreía de manera burlona o divertida, aún así su sonrisa y oyuelos eran hermosos, muchos tenían debilidad por ello.
Era bajito, un cuerpo delgado pero aunque no se notara poseía bastante fuerza. Las curvas del cuerpo estaban bien marcadas, dándole un cuerpo como si hubiera sido esculpido a medida y perfección.

No iba a negarlo, era lindo.

-Por favor...-(La voz de Park lo sacó de sus pensamientos, mirándolo)-Se que JungWon tiene mucho carácter pero... Solo... Podrías usar la voz de mando en ves de lastimarlo?-(La pregunta salió temblorosa, como si tuviera miedo de hablarle, y es que lo tenía, y mucho)
Aspiró aire, pero no respondió, volviendo a mirar al castaño claro con atención.
Sin pensarlo dos veces, salió de la habitación, trayendo una crema que también podría ayudar con la inflamación y las marcas, extendiendoselo a SungHoon.
-Ponsela, lo ayudará más-(Dijo, viendo como rápidamente la crema desaparecía de sus manos y no tardaba en llegar al cuello de Yang, esparciendolo con cuidado)
La noche ya estaba ahí, lo único que los alumbraba era la luz de la Luna que se colaba por la ventana y el velador prendido sobre la mesa de noche.

Minutos después Jake llegó con una bandeja de comida para el azabache menor, dejándola sobre la mesa de luz también y mirando a su propio hermano.
-Vamonos-(Susurró hacia el, JongSeong asintiendo mientras ambos salían)

Por fin solo y con su hermano desmayado en la cama, se permitió llorar con desesperación, envolviendo la mano de su hermano con ambas de las suyas mientras se escondía entre las sábanas, mojandolas con sus lágrimas mientras se aferraba a la mano de Yang.
Con cuidado se sentó junto a el, tomándolo por debajo de los hombros y apoyando la cabeza contraria sobre su pecho con delicadeza, comenzando a acariciar su cabello mientras más lágrimas caían silenciosamente de sus ojos.
Estaban encerrados allí quien sabe cuánto e imaginar cómo estaban sus papás no hacía más que angustiarlo más y más, ahora que también su hermano estaba lastimado y desmayado.

Se abrazó al cuerpo contrario, apoyando su cabeza sobre la pared y cerró los ojos lentamente, sintiéndose pesado de un momento a otro.
No sé molestó en comer, no tenía hambre.

-No, sus celulares están aquí-(Suspiró Han, tomando el celular de JungWon el cual estaba en el cajón de la mesa de luz y el de SungHoon lo encontraron entre las sábanas de su cama)
Minho estaba como loco, caminaba de aquí para allí y Jisung juraba que en todos aquellos años nunca lo vió tan asustado y desesperado como estaba ahora.
-Cariño-(Se acercó al Alfa, tomando su brazo suavemente y abrazándose a el, escondiéndose en su pecho mientras cerraba los ojos, sentía lentamente como esto se aguaban)

Intentaba mantenerse, pero eso ya era inusual, los chicos no habían vuelto en toda la tarde y noche, ya estaban desesperados.

-Sung-(Los brazos de su esposo rodearon su cintura con firmeza, dándole algo de confort pero su tristeza era más grande)