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Me quedé en blanco. No entendía nada de lo que estaba diciendo. Me alejé un poco de su lado y lo miré interrogante. Estaba comenzando a sentirme incómodo con su presencia.

Kibum solo necesitas calmarte .

— Es algo de lo que me avergüenza. He dejado que mis sentimientos ganen , pero sé que no todo es mi culpa.

No dije ni una sola palabra, solo esperaba que continuara.

—Yo nunca he sabido que es tener a alguien que me quiera en mi vida y cuando lo supe la única persona se alejo de mi lado.

Su mirada estaba absorta en el río. Respiraba de forma irregular  y tenía sus manos apretadas.

—Mi padre  siempre se iba de viaje de negocios y mi madre falleció cuando tenía cinco años.—continuó —Después de eso me fui a vivir a la casa principal. La casa parecía un castillo. A primera vista , para un niño de mi edad fue emocionante. Todo el cuento de hadas que maquineé se fue desmoronando con el tiempo cuando comprendí quien era para toda esas personas.

—Solo diré que las niñeras no son mi mejor recuerdo.

Su rostro se endureció y negó rápidamente.

—Pensaba que estaba solo en esta vida, ya que siempre me recordaban como el bastardo que apareció para malograr la familia .—suspiró — Pero un día en mi escondite apareció una pelota de básquetbol. No entendí en un principio lo que significaba pero después de salir de ahí , vi el rostro de un chico mayor que yo que sonreía grandemente. Me invitó a jugar con él y se presentó como mi hermano mayor.

Tomó un largo suspiro y continuó con su historia

– Éramos muy cercanos, a pesar de no tener la misma madre. Siempre me comentaba todo lo que pasaba en sus diferentes viajes donde iba a junto a mi padre.

Sonrió fuertemente y se tocó el pecho.

Era alguien muy importante para él sin duda.

—En uno de sus viajes , me contó que se enamoró. Claro que mi primera reacción fue alegrarme mucho por él.—me observó esta vez– Siempre le preguntaba cuándo vendría con ella. Además siempre preguntaba cómo era o si era bonita. Se tornó extraño cuando él se reía o cambiaba de tema cuando yo le preguntaba sobre su pareja.

Él se acercó más a mi y tomó mi mano.

—Cuando vinimos en su cumpleaños número 21 a este famoso restaurante. Mi padre mencionaba que le daría como regalo la dirección principal de la empresa y que estaría formando ya las alianzas para su matrimonio de conveniencia. Me sorprendía ver cómo mi hermano negó muchas veces esa opción, pero lo comprendí todo cuando ese día mi hermano vino de la mano con otro chico.

No, puede ser.

—¿Puedes imaginarte la reacción de mi padre al ver a su hijo estrella de la mano con otro chico?

Me miraba expectante de mi respuesta.

— P-Puedo imaginar

—A eso que imaginas. Imagínate la situación mil veces peor. Mi padre empezó  una una rabieta,
había nombrado todos los apodos malsonantes que podría decirle a alguien cuya orientación tenía mi hermano. Solo pude mirar y llorar mientras veía como mi padre soltaba un show en el lugar.  De todo lo que dijo , recuerdo lo último que salió de sus labios.

—"Si decides con esta idea estúpida , solo harás que te desherede. Vamos, elige bien , este chico o tu vida con nosotros"

Ese padre era un tremendo troglodita. No puedo imaginarme cómo pasó todo ese momento.

U&IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora