✿Día 2✿

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Fuck or die
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Kirishima, ya por octava vez desde que despertó de su ensoñación, suspiró.

La frustración y el bochorno son completamente dueños de su expresión facial. Cosa que hacía ver al pelirojo aún peor de lo que había admitido que estaba.

Porque se siente ahogado. Siente que, si se queda allí durante más tiempo, acabará por desmayarse.

Pero tiene que ser un hombre y admitir a Bakugō lo que le está pasando. Lo que, como una broma degenerada de un transeúnte hacia él, está atormentandolo.

Incluso si no es correcto. Porque, en ese momento preciso, siente que, de no ser liberado de aquel intenso calor, acabará por morir.

Si... Es eso. Moriré aquí.

Y de la forma menos masculina posible. Se quejó el pelirojo, apretando sus manos sobre sus muslos, dándose ánimos internos para confesar su verdad a Katsuki, quien estaba frente a él en ese momento

Y que, por supuesto, ya había notado que su novio estaba comportándose de manera extraña.

- ¿Imbécil, por qué tienes esa cara de mierda? -preguntó intrigado, pero también preocupado, Katsuki

Pero mostrando un rostro serio que dió a entender a Kirishima que quería una respuesta sincera y frontal.

Sin rodeos ni palabras bonitas que adornaran la realidad

E iba a darsela. Se la daría en aquel mismo instante, demonios.

Suspiró profundo, reacomodandose en su sitio antes de dedicarse a mirar con profundidad al cenizo.

- Aizawa-sensei dijo... El dijo que fuera más cuidadoso de ahora en adelante -murmuró, jadeando inevitablemente al terminar sus palabras

Hablar le costaba...

- Un hombre... Un hombre me habló cuando venía de camino -agregó, viendo cómo Katsuki, lentamente, asentía ante sus palabras, incitándole con su silencio a que continuara su historia

Pero Kirishima, demorandose en seguir más de lo que Bakugō pudo resistir, se vió interrumpido por la propia observación que el rubio había realizado.

- Llegaste tarde hoy -mencionó - No sueles llegar tarde los lunes -mencionó, elevando una de sus pobladas cejas rubias con curiosidad

Y así era. Ya que el pelirojo, luego de pasar el fin de semana con sus padres, solía ser muy puntual al llegar temprano el primer día de la semana a clases.

Cosa que aquella mañana no había ocurrido.

Eijirō sonrió con amargura- El hombre me reconoció del incidente con el delincuente de las cuchillas -continuó, volviendo a acomodarse en su lugar, abanicando su pecho con el cuello de su polera de manga corta- Entonces comenzó a tocarme mucho al hablar -mencionó, frunciendo sus labios con disgusto, llamando la atención del atento rubio

Hubo silencio entonces. Con un acalorado Kirishima tratando de disimular su malestar y un inquieto Katsuki intentando mantener su boca cerrada en espera del resto de palabras del pelirojo.

- Intenté despedirme para poder irme de allí, pero entonces comenzó a darme mucho calor -agregó el pelirojo, rascando su nuca con su mano libre, viendo a Katsuki frente a él mirándolo con intensidad

- Calor -repitió el cenizo, buscando asegurase de aquello que escuchó

Y Kirishima asintió.

- El me retuvo y dijo que el calor solo iría en aumento y que, a menos que me quedara con él para que "me curara", yo iba a morir -suspiró el teñido, viéndose realmente irritado al mencionar

KiriBaku NSFW Week 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora