Cuando Minho salió de cambiarse encontró a Seungmin en un par de botas, pantalones entubados negros y una blusa blanca holgada con un cinturón que acentuaba su pequeña cintura.
— ¿Listo? — preguntó Seungmin con emoción.
Minho simplemente asintió con la cabeza y salieron del departamento. Había cosas que se dio cuenta que no cambiaban entre su edad normal y su Little Space, ya que tomó su mano y las balanceó como siempre de manera juguetona.
Su primer parada fue un restaurante convencional para almorzar, si bien Seungmin tenía más cuidado al comer, sus gustos tampoco cambiaban. Había pedido una hamburguesa y una malteada de galleta oreo. Después de aquello Seungmin había sugerido ir a patinar.
— Pero no sé patinar — había dicho Minho.
Su novio había sonreído y mirándolo a los ojos dijo:
— No te preocupes, yo te enseño — Llegaron a un lugar grande, en el centro se encontraba la pista de patinaje circular y a los lados un lugar donde rentar los patines, fueron a allí para poder prepararse para entrar a la pista.
Seungmin era nato, en cuanto había puesto un pie el la pista había comenzado a patinar como si de caminar se tratase, dio un par de vueltas e incluso patinó hacia atrás.
Mientras tanto Minho intentaba entrar a la pista sin caerse, en cuanto puso un pie dentro sintió cómo se resbalaba. Utilizó todas sus fuerzas para poder mantener el equilibrio riendo de nervios. Sintió que una mano lo tomaba.
— Tranquilo, no manotees ni te asustes por moverte. Ve conmigo — dijo Seungmin. Comenzó a patinar hacia atrás guiando a Minho, quién intentaba encontrar el ritmo torpemente.
— Trata de ir como si estuvieras caminando, despacio, no tengas miedo de caerte. Recuerda que te estoy sosteniendo — explicó Seungmin sonriendo. Minho lo intentó nuevamente confiando más en su novio y pudo hacerlo mejor. Seungmin comenzó a reír un poco.
— Oye... No te rías de mí — dijo Minho apenado.
— No me río de ti, solo se me hace curioso. Normalmente tú me cuidas pero esta vez es mi turno — contestó volviendo a sonreír.
Después de unos minutos Seungmin soltó una de las manos de Minho a ver si podía controlar mejor su equilibrio pero fue un desastre y tuvo que volver a sostenerlo.
Después de un par de horas divirtiéndose decidieron irse, pasaron al centro comercial a ver un par de cosas. Seungmin se había puesto a jugar con ropa probándosela por diversión y mostrándole a Minho como le quedaba, así como también accesorios e incluso un poco de maquillaje.
Había sido bastante divertido pero el estómago de ambos reclamó ya entrada la tarde. Esta vez decidieron comer algo más tradicional de la comida coreana en un pequeño lugar. Al salir de ahí la noche ya estaba comenzando a caer por lo que Minho tuvo una idea, lo llevó a un lugar que parecía un pequeño bosque.
— La noche se ve muy hermosa aquí... Eres la primera persona que traigo a este lugar, es mi pequeño secreto — le explicó a Seungmin. Se acostaron en el pasto viendo las estrellas.
— ¿Cómo es que sabes patinar tan bien? — comenzó preguntado Minho. Seungmin rió.
— Bailo danza contemporánea, me es muy parecido a patinar así que me es muy fácil — explicó.
— Ok, tiene sentido — siguió Minho riendo un poco — Nunca me habías contado eso.
— Es que lo dejé hace tiempo... No me gusta hablar de ello, creo que no me gusta hablar de mí — admitió Seungmin.
— Ni a mí, aunque siento que para ti soy un libro abierto — se quejó su novio.
— Soy observador — declaró Seungmin y esta vez ambos rieron.
Se quedaron un rato platicando de nimiedades hasta que encontraron la fuerza para ir a casa. La sorpresa de ambos fue enorme al ver a aquel chico rubio esperando en la puerta, llevaba una playera verde militar y unas botas. Aquello no sonaba bien así que Minho se puso delante de Seungmin de manera protectora.
— ¿Qué haces aquí, Hyunjin? — espetó Minho enojado. El rubio nada más lo volteó a ver con una media sonrisa burlona.
— No vine a hablar contigo, pero también me sirves de ayuda... — comenzó a decir, alargaba algunas palabras de forma extraña y fue entonces que se dieron cuenta que estaba borracho — Necesito la ayuda de ambos... — insistía.
— ¿Y por qué debería yo de ayudarte? — preguntó Seungmin finalmente poniéndose frente a él.
— Porque... Conocen mejor a Jeongin que yo... — dijo Hyunjin intentando caminar pero cayendo en el camino. Instintivamente Seungmin evitó aquella caída.
— Ayúdame a meterlo... — dijo un poco molesto.
Minho le hizo caso de mala gana, no sabía por qué tenía que ayudarlo después de todo. Lo pusieron en el sofá de Seungmin.
— Necesito... Innie... — murmuraba Hyunjin.
— Cállate y duerme — le espetó Minho poniendo los ojos en blanco.
— Lo siento... No puedo dejarlo así — se disculpó Seungmin.
Su novio solo suspiró.
— Eres demasiado bueno, amor... — se quejó pero lo abrazó — Durmamos... Mañana lidiaremos con él... — Y así fue, hicieron como si Hyunjin no estuviera desmayado en el sofá y se metieron a la cama. Seungmin veía fijamente a Minho sin poder dormir.
— Solo cierra tus ojitos, bebé — le dijo Minho acercándolo más a él.
— Tengo miedo... — admitió Seungmin.
— No dejaré que te pase nada malo, bebé. Nunca, así que por favor... Confía en mí y cierra tus ojitos — Siguió las instrucciones de Minho y al poco tiempo cayó rendido.
Ya lidiaría con Hyunjin mañana.
♥︎
uhm, ¿creen poder perdonarlo después de todo?
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٬٬ 🍒 ꒱ 𝗰𝘂𝗶𝗱𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗮𝗹 𝗽𝗲𝗾𝘂𝗲𝗻̃𝗼 𝗺𝗶𝗻𝗻𝗶𝗲 ᦒ knowmin ゛
Short Story𝗮𝗱𝗮𝗽𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻. ૮ / / / ⍝ა ❝ Cuando Minho se presentó a aquella casa para tomar el puesto de niñero lo último que pensó fue encontrarse a un chico de su edad en mameluco sentado en el piso haciendo pucheros. ❞ ›› Minho, top / Seungmin, botto...