‣ MinMin... quero bebé

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Todo había comenzado el día en el que Minnie estaba jugando con Rainbow. Lo cargaba como a un bebé, le daba de comer y lo arropaba mientras le daba un besito para luego tomar la siesta a su lado. 

Una vez que despertó fue hacia su esposo y lo abrazó.

— MinMin... Quero bebé — le dijo haciendo un puchero.

— ¿Un qué? — dijo sorprendido.

— Bebé... — repitió.

— Pero Minnie... Eso no se puede, quiero decir... Tendrías que salir mucho tiempo de tu Little Space y vives la mayor parte del tiempo así — explicó Minho con nerviosismo, nunca había tenido en mente tener un bebé debido a que tener a Minnie de cierta forma satisfacía aquella necesidad.

— Ño impota... Quero... — insistió haciendo pucheros de nuevo.

Pero aún así Minho se negó y desde entonces comenzó el berrinche más grande que su pequeño le había hecho. Se ponía a llorar y patalear diciéndole que no lo estaba tomando en cuenta, no le dirigía la palabra y se negaba a comer lo que le daba viviendo solo así de galletitas y dulces.

— Minnie... Préstame atención — le pidió finalmente después de una semana así. Pero aún así Minnie se volteó como si no lo escuchara con un puchero — Vamos, Minnie... Habla conmigo sobre lo del bebé, lo he estado pensando — admitió Minho haciendo que finalmente su pequeño volteara a verlo.

— ¿Puelo tener bebé? — le preguntó acercándose.

— Ven, pequeño — le dijo acomodándolo en su regazo como era común — Bueno... Tendrías que ser grande durante todo el proceso de adopción... Y la mayor parte del tiempo para cuidarlo, tu tiempo como pequeño se disminuirá... ¿Realmente eso no te molesta? — le preguntó con sinceridad Minho.

Minnie negó con la cabeza.

— Muchos Little también tienen bebés, pero siguen siéndolo... Realmente quiero un bebé, Min... — pidió Seungmin viéndolo a los ojos.

Minho suspiró.

— De acuerdo, bebé. Comenzaremos a ver eso.

El proceso de adopción no fue realmente difícil, después de 6 meses les habían dado a un pequeño de un año al cual nombraron Juyeon. Minho estaba sorprendido con su esposo, desde el primer momento en el que tomó aquel bebé en manos sus ojos habían brillado de inmediato.

Lo cargaba con mucho amor, lo cuidaba, vestía, daba de comer, lo atendía a la perfección e incluso le había heredado al pequeño Rainbow para que él lo abrazara por las noches. Conforme fue creciendo su bebé era más fácil para Seungmin ser Little, entraba en su Little Space para jugar con su pequeño y se entendían a la perfección. Por otro lado cuando ellos se ponían a jugar para Minho se volvía un caos, iba corriendo de aquí para allá.

Si no era Juyeon el que se encontraba corriendo de forma descontrolada, era Minnie y varias veces le jugaban bromas a Minho. Un día normal comenzaba con el pequeño Juyeon subiéndose a la cama de sus padres dándoles pequeños golpecitos para que despertaran. El primero era Seungmin, quien lo abrazaba con mucho cariño y juntos despertaban a Minho. Minho les preparaba a ambos sus vasitos con leche chocolatada y hotcakes pequeños.

Procedían a jugar un poco en la mañana hasta que tenían que preparar a Juyeon para ir a la guardería. Minnie era el que se encargaba de llevarlo, estaba en un estado entre ser grande y pequeño para estar alerta pero aún así iba jugando con su hijo a no pisar las rayas de la acera o ir dando brinquitos. Finalmente lo dejaba en la guardería y él regresaba.

Durante ese tiempo que no estaba Juyeon, hacía que MinMin le diera todo su tiempo, a veces solo veían caricaturas o una película y otras veces coloreaban. Iban por su bebé a la una de la tarde y de camino algunas veces pasaban a comer en algún restaurante. Al regresar a su casa Juyeon y Minnie comenzaban a preparar las locuras que harían ese día y como molestarían a Minho ese día.

Y ahí comenzaba el martirio de Minho, sabía lo que se avecinaba para él así que ya estaba listo. Cuando comenzaban a correr como locos ya tenía un plan para hacerlos calmarse. Era más fácil hacer que Juyeon parara y una vez que lo lograba, lo cargaba y arrullaba hasta dormirlo. Una vez que lograba dormir a su bebé, su otro bebé ya se encontraba bostezando y tallando sus ojos.

Iba también por Minnie y lo acomodaba para dormir. Minho se había convertido en su nuevo peluche para dormir, así que no lo soltaba para nada.

— MinMin... — dijo Minnie entre sueños.

— ¿Sí, bebé? — preguntó.

— Grashias por cuidarnos — dijo con una sonrisita.

— No tienes porqué agradecer... Ustedes son mi vida — dijo Minho dándole un beso en la frente.

Jamás se arrepintió de haber adoptado a Juyeon y tampoco de seguir cuidando a Minnie a pesar de que ya casi tenían 29 años los dos. Lo cuidaría el tiempo que él quisiera.

♥︎

y ahora si, oficialmente esto se acabó /llanto

gracias a todos los que leyeron o leerán este fic, en verdad. recuerden que les amito mucho, ¡cuídense y tomen aguita!

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