la leyenda

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- (Reino?!.... de que mierda está hablando?! Estamos en Japón, es imposible que haya un reino aquí y quien es ella?, donde estoy?... ahhh tengo mucha preguntas)-

Estos y otros miles de pensamientos cruzaban mi cabeza, tenía tanta preguntas y tanta información que procesar que me dolía la cabeza por lo que me recoste en la cama para seguir durmiendo

- Que crees que haces?! Tienes a una doncella enfrente de vuestras narices y no saluda como es adecuado

- Mucho gusto soy Keigo Takami, nombre de héroe Hawks ahora deje de molestar y déjeme dormir un rato-

- Que desagrado que es usted... no tiene nada de clase-

- Nada de clase?... quien fue la persona que me quito la ropa y me dejó completamente desnudo?-

La chica al escuchar esa palabras un gran sonrojo apareció en ella produciendo que se enfade un poco y me patee de la cama

- Oye que te pasa?!, me rescatas y ahora me pateas? Como es la cosa?-

- Sus palabras no son de mi agrado, será mejor que me trates de una mejor manera-

*me levanto del suelo y me cubro nuevamente con la sábana para luego acorralar contra la pared a aquella chica de pieles blancas produciendo que está se sonroje y parezca un tomate*

Será mejor que dejes de hablar de esa forma, si quieres que te respeten debes demostrar respeto antes las otras personas

Arwen: e-esta bien... lamento mi comportamiento

Luego de eso sonreí de manera amable para alejarme de ella y salir al pequeño balcón donde se encontraba mi pantalón el cual me puse para así recostarme sobre la cama y dormir

- Este chico si que me va a traer problemas-

Luego de eso ella se quedo a mi lado mientras me veía dormir con una leve sonrisa sobre su rostro
Las horas habían pasado y unos pocos rayos de sol atravesaban el gran ventanal los cuales se reposaban sobre mi rostro provocando que mis ojos lentamente se abrieran, al abrir mis ojos vi a aquella chica donde mis ojos se perdían en el vasto horizonte de sus ojos de color azul como el mar

- Veo que has despertado... vamos levantaré, tengo cosas que mostrarte-

Dijo joven para luego levantarse de su lugar he irse de la habitación, al momento en el que ella se fue me levanté rápidamente para terminar de vestirme y salir de la habitación para encontrarme con ella

- Ya estoy listo, a donde vamos?-

- Hay un lugar que debo mostrarle-

Comenzó a caminar por un largo pasillo el cual comencé a recorrer detrás de ella mientras veía los alrededores, al parecer no era una pequeña casa sino que era un gran castillo del cual no podía creer que estaba dentro

- (Esto se empieza a ver como un reino... espera! Eso es imposible)-

- Oye arwen... por que aquí hay un reino?, es que estamos en Japón pero nunca he visto un lugar como este-

- Eso se debe porque no estamos en el mundo mortal... tu acabas de descubrir el pasaje ocultó hacia el reino celestial, los que han pasado por ese camino no han vuelto para contarlo... pero tu eres distinto-

Decía para finalmente entrar a una habitación repleta de estantes de diferentes tamaños en los cuales se encontraban diversos libros, arwen de un estante saca un gran y antiguo libro, al abrirlo el mismo estaba escrito en una lengua la cual no entendía. Mientras ella ojeaba las hojas estas desprendía polvo ya que no había sido abierto hace tiempo

Que estas buscando en ese lib...

- Aquí está!, escucha... "cuenta la leyenda que dentro de algunos años un joven el cual no será proveniente de estas tierras y con una apariencia un tanto partículas entrará a este lugar desde un antiguo camino que tan sólo la realeza conoce...-

- Espera espera, que quieres decir con todo esto?-

- Espera espera, que quieres decir con todo esto?-

- Ya cállate y déjame terminar! "Que sólo la realeza conoce. El joven se encontrará con la princesa para así gobernar, pero algo los separará"-

Cada palabra que decía me intrigaba cada vez más pero al ver que se detiene quedo un poco confundido mientras esas últimas palabras quedaban retumbando sobre mi cabeza

- Y que pasa después?-

- Es que faltan las últimas hojas y no puedo terminar de leer la leyenda-

- Eso es raro... espera!, la cosa esa está hablando sobre mi!-

- No es una cosa es una antigua leyenda así que ten algo de respeto... y te la estaba leyendo porque sabía que eras tú, es que no eres de aquí y tienes alas lo cual nadie de aquí las tiene para colmo entraste por el viejo camino... no queda otra opción tu eres el de la leyenda-

Yo no entendía nada, era mucha información que procesar por lo que hago una pequeña reverencia y salgo del lugar para tomar algo de aire mi mente trabajaba demasiado rápido por lo que me acerqué a una ventana para luego abrirla y dejar que aquel fresco aire llenará mis pulmones

- Que es todo esto? A que se refiere con todo lo que dijo... ahhh es mucho en lo que estoy pensando-

Mientras me quedaba junto a la ventana un anciano salía de una habitación y al no reconocerme decide acercarce a mi

- Quien eres tu joven alado?... espera, acaso eres el de la leyenda-

Al escuchar aquella voz un tanto apagada gire mi cabeza viendo a aquel anciano con blancas vestiduras, parecía un sacerdote por la manera en la que vestía

- Según lo que me dijo arwen puede ser... pero yo no creo en ese tipo de cosas así que no molestes con eso por favor-

- Pero eres igual que el joven de aquella antigua pintura... ven sigueme un momento que debo mostrartelo-

Decía mientras sujetaba mi brazo y nos adentrabamos a las catacumbas del castillo donde se guardaban las reliquias más antigua y más valiosas, al llegar el anciano destapa un gran cuadro donde se dejaría ver un joven con unas grandes alas rojas

- E-esto no puede ser posible... es idéntico a mi, pero yo nunca he estado aquí ni nada parecido-

El anciano me miraba ilusionado mientras sujetaba una guitarra y se sentaba en un pequeño banco para luego comenzar a cantar una antigua canción

- "Aquí me pongo a cantaral compás de la vigüela,que el hombre que lo desvelauna pena estraordinaria,como la ave solitaria con el cantar se consuela. Pido a los Santos del Cielo que ayuden mi pensamiento, les pido en este momentoque voy a cantar la gran historia me, quiero refresquen la memoria,y aclaren mi entendimiento. Vengan Santos milagrosos,vengan todos en mi ayuda,que la lengua se me añuda y se me turba la vista; pido a mi Dios que me asistaen esta ocasión tan ruda. La gran historia hace mucho tiempo fue, un noble joven de aquella tierras lejanas de orígenes desconocidos e inexploradas por nuestra gente... ese joven nos ayudará en esta gran guerra de miles de años, gracias a el seremos salvados o por culpa de el seremos exterminados"-

Cantaba el anciano con gran fulgor mientras tocaba diversas notas en aquella empolvada guitarra, yo no entendía muy bien la historia que narraba ¿una guerra? ¿perdición? ¿salvación? A que se refería con todo eso, necesitaba buscar respuestas pero lo único que encontraba eran más y más preguntas a las cuales no les podía encontrar una respuesta o tan sólo me seguían aún más dudas

Almas de otro mundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora