❝Verás, tenemos una pequeña apuesta entre nosotros, los profesores. Las reglas son bastante simples y directas; Quién puede cogerte mejor.❞
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En el que surge un juego peligroso entre los profesores, haciendo todo lo posible para g...
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"ESTOY TAN JODIDA."
(T / N) miró sus piernas, viendo los numerosos moretones que se arrastraban a lo largo de sus muslos, un rojo borgoña profundo que se destacaba contra su piel. ¿Y la peor parte? Su falda no podía cubrirlos todos.
Tenía la sensación de que Bokuto sensei había hecho aquello a propósito porque mientras miraba hacia abajo, todo lo que podía ver eran las marcas. Asomándose por debajo de la tela, era casi como si pudiera escuchar a los chupetes riéndose de su desgracia.
"Está bien, mierda, mierda" murmuró, mirando impotente alrededor del baño de chicas, esperando encontrar una solución en algún lugar allí. Nishinoya estaría completamente muerto una vez que le pusiera las manos encima, complacida de poder estrangularlo, ya que fue su idea quitarle la chaqueta escolar porque sabía que ella simplemente se escondería dentro de ella como de costumbre.
(T / N) podría usar su bolso para cubrirse las piernas, pero tenía la sensación de que también podían verse desde atrás. La chica apenas logró pasar por la clase de primer año que estaba esperando fuera del salón de clases de Bokuto por lo que dudaba que pudiera arreglárselas por el resto del día. "Por favor mátame" gimió en voz baja, golpeando su cabeza contra el cubículo del baño.
Ya iba tarde para Negocios, así que bien podría saltarse el resto de la clase, aunque solo fuera para evitar la vergüenza de enfrentarse a ese hombre de nuevo. Pero sabía que eso no era posible. Tentada, (T / N) pensó en enviarle un mensaje de texto a Nishinoya para que fuera al baño y trajera la chaqueta con él, pero eso tenía un 0,001% de posibilidades de funcionar ya que Tsukishima sensei siempre fue estricto con las pausas para ir al baño.
Mordiéndose el labio, se estrujó los sesos en busca de posibilidades. Era saltarse esta lección y esperar hasta el almuerzo, pero eso posiblemente podría terminar metiéndola en problemas si la atrapaban saltándose la clase. La muchacha respiró hondo, tal vez podría ir a la oficina y buscar un suéter o chaqueta en la caja de "objetos perdidos". Eso podría funcionar.
No había muchas opciones para elegir, así que decidió intentarlo. Quizás tuviera suerte. Con eso en mente, emprendió su peligroso viaje a la oficina de la escuela, rezando para que la suerte estuviera de su lado. ¿Qué podía salir mal?
Todo aparentemente.
Sosteniendo su bolso frente a sus piernas, se arrastró fuera del baño, revisando con cautela para asegurarse que la costa estaba despejada de estudiantes o maestros. Contando mentalmente hasta tres, (T / N) se escabulló por el pasillo, agachándose un poco mientras corría junto a las clases en curso que tenían ventanas que daban al interior de los salones.
