En donde T/N es uno de los mejores amigos de Johnny y parte del grupo junto con los cobra kai, hasta la llegada Daniel, con un cambio notorio y distintos enfrentamientos entre ambos chicos.
Podrá T/N solucionar esto? Johnny? Daniel? O alguien más...
Finalmente el día de la cita con Daniel había llegado, me prepare de forma apresurada, ya que solo quedaban algunas horas para que el llegara, me puse algo sencillo que había estado buscando algunas horas antes de ducharme.
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Ya por fin estaba listo, baje las escaleras y fui directo a la puerta, mis padres salieron, así que estaba solo en la casa, tenía que esperar a que llegarán para poder dejar la mansión, lo bueno era que de seguro estaban por llegar, siempre llegaban a estás horas cuando salen a divertirse.
Sin más abrí la puerta para esperar a Daniel o a mis padres afuera, pero me topé con el moreno en la entrada.
- Hola. - Sonreí de la manera más dulce que pude, Daniel se veía un poco distinto a lo habitual, creo que podría admitir que estaba lindo, pero no lo iba a decir en voz alta.
- Hola, como estás?
- Bien...
- Estás bonito. - Me sorprendí un poco ante esas palabras, pero sin más sonreí.
- Gracias.
- Eh, tienes compañía... No sabía... - Observé hacía la dirección que menciono Daniel, simplemente sonreí y negué con la cabeza.
- Son mis padres, ven, ven a conocerlos... - Tomé el brazo del moreno y lo lleve al lado de mis padres, abrace a mi papa y rápidamente presente a Daniel, simplemente se saludaron con la mano sin más.
- A dónde irán cariño? - Mí madre me miraba mientras sonreía, creo que esa costumbre de sonreír casi todo el tiempo la había obtenido luego de ver lo que hace mí madre casi todo el tiempo, sonreír y aparentar ser dulce.
- Ah, no se, a dónde iremos? - Mire a Daniel con la esperanza de que el dijera algún lugar decente y no como esa vez que Jimmy se le ocurrió la brillante idea de mencionar un bar y no un parque o algo parecido.
- No se, dónde tu quieras ir...
- Minigolf?
- De acuerdo, vayamos al Minigolf... - Daniel sin querer pateo uno de los ladrillos que estaba al frente de el y logrando así dejarlo en el suelo.
- Eh, no te preocupes por eso... Pensé que lo habías mandado a reparar...
- Es cierto, lo olvidé, lo hare... - Mis padres hablaban entre ellos, yo sin más veía a Daniel algo preocupado por haber pateado un simple ladrillo.
- Tu, vives en Encino Daniel?- "Aquí vamos de nuevo", dije en mí mente, para luego ver al moreno tratar de explicar de dónde venía.
