V.

5 2 0
                                    

VERANO DEL 79.

Luke cada día se siente peor, su respiración es tan irregular que no logra evitar llorar, me duele tanto verlo así, me duele tanto no poder hacer nada más que brindarle mi apoyo y decirle todo lo que tenemos que hacer para nuestro día siguiente.
— ¿Tus padres no sospechan nada?
Preguntó, bebiendo algo de café mientras leía la expansión de las empresas en el periódico.
— No, pero supongo que mi madre tiene sus dudas, tranquilo, ella no le dirá nada a mi padre. Amor, quizás ya sea tiempo...
Él negó rotundamente hacía mis palabras, notando cómo una de sus lágrimas caía hacía sus mejillas, notando ésto, me acerqué posando mi mano derecha sobre su rostro, dejando una débil y pequeña caricia sobre su mejilla, secando aquella lágrima caída.
— Nath, quiero, quiero mucho poder besarte frente a mi familia, quiero mucho tomar su mano sin miedo a ser juzgado, y quizás me deje llevar mucho, pero no quiero morir aún, quiero experimentar aún más cosas a tu lado, quiero vivir.
Fue allí cuándo noté que no solo por eso se encontraba decaído, rodeé ambos de mis brazos sobre toda su pequeña anatomía, mientras oía sus sollozos.

La noche no se demoró en hacerse presente, estuvimos toda la noche despiertos jugando con el periódico, haciendo formas y expresiones divertidas. Daría todo por oír siempre aquella risa tan angelical.
Al despertar, me sentí tan perdido, me sentí sin vida, me sentí roto.
— Mis condolencias.
Fue lo único que hizo el doctor al retirarse de nuestra residencia a la cuál nos habíamos mudado para no estar tan aislados por precaución. Mi madre rompió en llanto, dándome un último abrazo para esperarme en el auto.
No quería abandonar la casa, no quería abandonar nuestros periódicos con formas, no quería abandonar aquellas risas, no quería dejar en el olvido nuestras pláticas, no quería olvidar nada de lo que había vivido con Luke. Ni el más mínimo detalle.
Me rehuso a tener que vivir una vida sin mi estrellita.
Al llegar a la casa de mis padres fuí dónde mi habitación, no quería desempacar aún, tomé las fotografías que tenía de Luke notando su gran sonrisa, sonreí por él, sonreí por todos los momentos que tuvimos juntos, sonreí porque recordaba sus palabras cuándo hablábamos de lo que se suponía que algún día sucedería, sonreí porque pudimos tener un final feliz a pesar de todo.

Fuí tan feliz con Luke, que nadie jamás va a poder llenar el vacío que dejó en mí. No estoy pensando en negativo respecto al amor, pero Luke fue, es, y siempre será el amor de mi vida, mi primer y último amor.
Me levanté en medio de la noche, otra vez había soñado con él, nos tomábamos de la mano y me decía que nos vayamos muy lejos.
Me dirigí hacia la cocina con la intención de beber un vaso de agua, mi madre estaba allí sentada sobre el sofá, me acerqué hacía ella y no me dirigió la mirada, pero su voz era tan suave, su mirada tan tranquila.
— Nath, amor, sé lo que viviste junto a Luke, y sé que ésto no es algo que puedas superar con facilidad, pero la vida continúa, quería a Luke cómo si fuera mi propio hijo, pero tú no fuiste bueno ocultando tus sentimientos, los cuáles está bien no ocultarlos, pero entiendo sus motivos. No estoy diciendo que te cierres en el ciclo del amor, y mucho menos que comprendo todo el dolor que estás sintiendo, solo que no te quedes callado, no guardes tanto dolor... No sufras en silencio.
Mis lágrimas habían comenzado a caer, fue también cuándo caí en cuenta de lo que había sucedido, Luke ya no estaba aquí conmigo.

Sólo habían pasado horas, y yo ya extrañaba su risa, su sonrisa, su carisma, su voz, sus palabras, su rostro al despertar, cuándo me llamaba "amor" o incluso "estúpido", cuándo le recitaba poemas y su rostro se tornaba de aquel carmesí, cuándo sonreía por las flores que colocaba sobre su oreja, cuándo despertaba por una pesadilla y me pedía un cuento, cuándo solíamos esperar cada verano, para volver a vernos.
Luke, te amo y siempre así será, cariño. Jamás olvides que tu poeta enamorado no deja de pensar en tí ningún día de su vida.

AQUEL VERANO... ✓ | TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora