narra Helen.
Hoy será mi primer día en la nueva universidad, ya estoy nerviosa, puesto que es la primera vez, que yo recuerde, que me mude habiendo empezado las clases, la verdad, es que no recuerdo casi nada de lo que he vivido, hasta hace dos meses, y eso que intento recordar todo lo posible pero no me viene nada y mi madre no me cuenta absolutamente nada.
Al llegar a aquel majestuoso lugar, la verdad es que me quedé anonadara al deslumbrar tres enormes y bellos edificios, una pista de deportes grandísima, y hacia el fondo de todo esto, se podía ver un hermoso prado atravesado por un río...
Asombrada, entre en el edificio central dirigiéndome hacia secretaria, para informarme donde se imparten las clases de biología. Llegue a un mostrador y me encontré con una chica de mas o menos mi edad, no era mas alta que yo, pero su pelo rubio largo hasta la cintura y sus ojos verdes, dejaba mucho que envidiar. Aquella muchacha se dio cuenta de mi presencia y se dirigió hacia mi
-Hola, usted debe ser la señorita Castillo ¿verdad?- su voz era seria, pero muy dulce para ser la secretaria, esto me des concentra demasiado, puesto que no sabia si hablarle de "tu" o de "usted" pero decidí ser educada y hablarle de "usted"
-Hola,si soy yo, me podrías decir Helen y ¿usted es?- la muchacha se rió un poco por mi contestación y al instante respondió con una amable sonrisa.
-No hace falta que me hables de usted, yo lo tengo que hacer, puesto que estoy como becaria y he de hablar de ese modo, bueno, me llamo señorita Márquez, aunque usted me puede llamar Odiel- me respondió mostrándome sus dientes blancos, enserio, cualquier chica le gustaría ser como Odiel y si, yo soy una de esas... Se giro removiendo unos papeles y me volvió ha hablar
-Helen, sígame, le mostrare su aula- tras estas palabras, nos dirigimos a unas escaleras magnificas y gigantescas
-wauh, es como las de Hogwarts- pensé, pero al segundo tras una carcajada de mi acompañante, me di cuenta que lo dije en voz alta y los colores se subieron a mis mejillas.
-pe...perdón yo... yo no quería...- Dios, pensara que soy una tonta o algo, ¡Tierra trágame!
-Ey, Helen, no te tienes que disculpar o avergonzar, ¡yo también lo creí!- y soltó otra carcajada, aunque muy distinta a la anterior, esta era como de nostalgia. Tras subir las escaleras, nos paramos en el según piso y como era de imaginar, tenia unos pasillos larguísimos con muchas clases, Nos dirigimos a la izquierda y paramos en la primera puerta a la derecha y llamó. Al segundo se escucho un "Adelante" común de toda la clase y Odiel abrió mientras que decía
-Disculpe las molestias pero debo decirte señor...- se quedó un momento observando a la persona que estaba en la mesa del profesor ¡Dios ese es el profe yo muero, esta buenísimo! si, era un joven de unos años mayor y muy lindo...¡pero que estas pensando Helen! ¡ el es tu profe!
-¡GARCÍA!- gritó alado mía Odiel, casi me deja sorda, me fije en ella y tenia el ceño fruncido, parecía muy enojada y de repente, una voz celestial
-Hola señorita Márquez... ¿Quien es la linda jovencita que hay detrás de usted?- contestó con una sonrisa de coqueteo
-A usted no se lo tengo que decir, señorito García, ¿Donde se encuentra el señor Trujillo?- Dijo observando la clase. El joven se rió al mas no poder y esto hizo que mi nueva amiga (la podría llamar así ¿no?) le echase una mirada, que si estas matasen, el ya lo estaba.
-no, no, no... así no señorita Márquez, si sigues arrugando la frente, te saldrán arrugas- durante esta conversación, note una presencia tras de mi, pero le reste importancia, hasta que el joven de adelante, se dirigió rápido a un asiento y quien estaba detrás tosió muy falsamente y me gire con todo el pánico en mi cara y me encontré con un señor de unos cincuenta y pico, con barba y gafas. ¡parecía un violador! Odiel se giro y en cuanto lo reconoció, miro en dirección de aquel chico que aun no sabia su nombre...
-muy buenas señor Trujillo ¿Podría hablar con usted?- el señor Trujillo, que por lo que tenia entendido, es mi profesor, asintió
-si señorita Marquez. Clase, estados todos, pero todos en sus sitios y sin hablar.- y cerro la puerta, que anteriormente, me había separado de ella.
-Bueno, dígame por que tanto jaleo en mi clase y de su visita. ¿No le habrá mandado el señor directo no?- dijo con seriedad pero a la vez con tono preocupado.
-No tranquilo, ninguno de tus chicos se han metido en problemas, la cosa es que vas a tener una nueva alumna, ella se llama Helen Castillo- y el profesor que anteriormente pensé que era un violador. Me miro como analizándome de arriba a bajo, literalmente, eso si me dio mas miedo que lo pensado anteriormente. Pero después ne sonrió y me extendió la mano.
-Buenas señorita Castillo, espero que se sienta cómoda en tu nuevo hogar.- yo asentí y tras esto, Odiel se fue y nosotros dos entramos en clase.
-Queridos chicos, ella es la señorita Castillo, a partir de ahora vuestra nueva hermana de esta familia. Lo siento pero se va tener que sentar con el señorito García, lo siento por usted, se ve una gran estudiante, espero que sea así y no se deje llevar por su compañero...- Mierda, Mierda y Mas Mierda. ¡NO QUERÍA ESTA CON EL!
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shh! es un secreto
Teen FictionTrata de una chica de 17 años, que entra nueva en una universidad, pero a mitad del primer curso y alli le sucede distintas cosas y conoce a alguien especial. Mientras que vive con el algunas historias y secretos de su nueva vida, ella va recordando...