El un Alfa pero no cualquiera es el Alfa de Alfa un hombre frío y no mostrará sentimientos ante nadie. Perdió lo más preciado para un hombre lobo su LUNA.
Ella una humana o eso es lo que cree, con un pasado que la llevará a convertirse en una mujer...
- Hijos vayan a dormir nosotros nos quedamos aquí – niega Alexa, mirando a Nai – cualquier cosa les aviso - asiento
- Alexa tiene que descansar, mañana hablamos de lo que paso – asiente y sale – tía cualquier cosa me avisas –beso su frente – Buenas noches
- Buenas noches, hijo que descanses
Salgo de la habitación para me dirigirme a la mia me doy una ducha, visto y me acuesto, estoy tan cansado que no tardo en caer en brazo de Morfeo.
…
Me despierto por la luz que se cuela por la ventana miro la hora son las 9am, me doy una ducho, me visto una vez listo salgo para ir a ver a Nai cuando abro la puerta veo como sale de su habitación cerrando la puerta con cuido camina por el pasillo la sigo haciendo el menos ruido posible, bajamos la escalera hasta llegar a la entrada de la casa, pero cuando esta por abrirla le hablo.
NAIARA Abro los ojos encontrándome en una habitación que parece una clínica, veo a las lados y miro a una mujer dormida en un sillón, mi mochila y tenis a su lado quito la sabana viendo en ropa interior y venda en mi hombro izquierdo, me levanto con cuidada para no despertar a la mujer tomo mi mochila, busco algo para curar mi herida.
Abro una puerta encontrando el baño entro me desvisto y quito la gasa del hombro solo dejando las ventas del tobillo, entro a la ducha bañándome con cuidado no mojar mi herida una vez salgo me miro en el espejo que hay, limpio mi herida y coloco la gasa, tomo mi mochila sacando una mudada de ropa
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Una vez lista tomo mi mochila y salgo del baño cogeando por el dolor del tobillo, veo a la mujer todavía duerme tiene el sueño pesado
- Tengo que salir de aquí – pienso
Salgo de la habitación con sigilo camino por un pasillo hasta una escalera, bajo encontrado la salida cuando estaba por abrir escucho una voz.
- Te vas sin despedirte
- Mierda - pegando un brinco por el susto pongo una mano en mi pecho y doy la vuelta encontrándome con un hombre alto, piel blanca, ojos Azul Cielo, cabellos castaños, cejas gruesas, labios carnosos, mis fracciones masculina y viste con un pantalón negro, suéter azul y tenis blanco
Hola Guapo tremendo Dios griego- pienso.
Me doy una cachetada mentalmente por pensar tontería que tal que sea un asesino necesito salir de aquí, pero a la de ya.
- ¿Quién eres tú? – pregunte y nuestros ojos se conectan, pero rápido desvió la mirada – ¿Dónde estoy? ¿Cómo llegue aquí? –
- Primero mi nombre es Daniel, Segundo estas en mi casa y Tercero te trajimos para curar tus herida – Responde y yo intento recordar algo, pero solo son fragmento y borrosos
- Gracias, pero tengo que irme – doy la vuelta abro la puerta
- Nai – me llaman y doy la vuelta es Alexa
- Ale – se tira a mis brazos y me tenso
Odio el contacto físico, si ya se odio muchas cosas, pero pues ni modo
- Como te sientes – pregunta separándose
- Estoy bien, Ale tengo que irme
- No quédate a desayunar, necesitas recuperar fuerza estas muy pálida - suspiro
Hay Dios mío dame una dosis de paciencia con esta mujer que no entiende que me quiero ir.
- Ale recuerda cada una por su lado, ya están a salvo me tengo que ir.
- Por lo menos deja que mi tía te vea las herida
- No se molesten ya la revise y limpie yo misma, muchas gracias por cuidarme
- No tienes que agradecernos más bien nosotros estaremos eternamente agradecidos - dice Daniel
- Si es cierto, ahora vamos al comedor a desayunar y después te vas – no me da tiempo de replicar cuando me arrastra Alexa al comedor
...
Estoy en el comedor sentada porque me atraparan en mi huida y Ale no me dejo ir sin comer, en realidad todo se ve rico, pero no como me da pena no conozco a nadie solo a Alexa y odio comer en silencio con mis hermanos siempre hablamos y bromeamos.
- Nai no es de tu agrado la comida -dice Alexa y niego
Me pongo a comer en silencio solo ruego al cielo que pase rápido el tiempo estoy sumida en mis pensamiento hasta que una voz me llama.
- Nai no es así
- No me llamo Naiara, pero pueden decirme Nai – todos me miran sorprendido
