Octava carta:
Hola, Alex.
Me da gusto que mis cartas te pongan de mejor humor, igual las tuyas a mi. Cada vez que veo al doctor Walter entrar por la puerta de mi habitación, me emociona saber que viene a dejarme alguna de tus cartas; pero aún tengo una duda, ¿Por qué te expresas así de él?, también es mi doctor y siempre me ha tratado muy bien, no veo que tenga malas intenciones; de hecho, cada vez que termina alguno de mis chequeos, me regala una paleta, (si, como niña pequeña), y sé que no debería pero me causo gracia lo que te dijo sobre nosotros, en especial porque ni somos pareja, ni tendremos un final.
Y sobre lo de tú siendo arquitecto... no te rindas, sea cual sea tu enfermedad sé que saldrás de ella, porque eres poderoso ¿lo recuerdas?, no necesitas ver todas las noches las estrellas para poder sentirte así, sin importar cuantas veces las nubes cubran tu cielo, siéntete poderoso y feliz.
De: Alex
Para: Alex
Dirección: Habitación 567 del quinto piso.
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De Alex, para Alex.
Short StoryTodo inició con la casualidad de nuestros nombres, continuó con nuestras cartas, y termino con nuestro final.
