Una punzada de dolor

Cap 3...Susurros

Narra Alejandra:

- No... Puedo... Más...

Dice Carmen, que va reduciendo la marcha.

Los creepypastas todavía nos persiguen, pero contamos con unos cuantos metros de ventaja.

- No podemos parar, Guaji, vienen a por nosotras.

Respondo, tirando del brazo de mi amiga.

- Tenemos que separarnos... Yo no puedo correr más, Guaji. De pillar a alguien, mejor a una que a dos.

Dice, soltándose de mi agarre.

- ¿Estás segura?

Pregunto, preocupada.

- Sí. Ahora ¡corre! Yo iré por la derecha, tú ve por la izquierda.

Ordena.

- Si pasa algo, llámame. Da igual lo peligrosos que sean. No dudaré en matarlos si te hacen algo.

Aseguro.

- Vale. Pero, ¡corre!¡Están a punto de alcanzarnos!

Exclama, alarmada.

Miro por detrás de su hombro y veo cómo Jeff y Ben se acercan a pasos agigantados.

- En cuanto logres despistarlos, reúnete conmigo en la plaza del mercado.

Digo, antes de echar a correr.

- Igualmente.

La oigo decir, ya a lo lejos.

Corro como nunca antes había corrido.

Giro mi cabeza y me da un mini-infarto, pero no paro de correr para dirigirme al bosque.

-Tonta, tonta,tonta.

Me digo a mí misma.

Me adentro en el bosque y descanso, no se por que me metí aqui estando el centro comercial a unos metros.

Unas ramas suenan, miro y veo a un anciano .

Me dirigo hacia él. Al menos si muero, muero acompañada.

Alguien me agarra por detrás.

Sabiendo que es Jeff, empiezo a gritar como una loca

- ¡Socorro!¡Que me viola!¡Por favor,ayúdemeee!

El anciano se gira y sonríe.

- Señor, no la haga caso. Es mi novia, solo estamos jugando.

Dice Jeff, cogiéndome en su hombro como un saco de patatas, agarrándome por la cintura.

Le doy patadas y puñetazos sin conseguir nada.

- Qué monos sois... Que os vaya bien, parejita.

Dice el anciano marchándose.

- ¡No!¡Por favor vuelva!Me va a matar... ¡¡¡SOCORROOO!!!

Pero el anciano, ya alejado de nosotros, no me oye.

Me rindo y dejo de patalear, y una risa invade el bosque

El cielo se nubla.

Tengo frío,ya que estoy en pantalones cortos con una camiseta ancha metida por dentro, mi pelo rizo suelto dejando a la vista mis nuevas mechas moradas y a los pies mis amadas plataformas negras.

Se me pone la piel de gallina.

De repente el bosque cambia, y el día se vuelve frio, gris y oscuro.

Mi oído se agudiza hasta que puedo escuchar susurros, como si los árboles hablaran.

- Te llamas Alejandra, ¿no? Llevo espiándote una semana.

Abro los ojos como platos.

- ¿Una semana?¿Pero por qué a mí?Mi vida no tiene nada de interesante...

- Vaya que si es interesante. Tu amiga y tú sois las elegidas. Debéis pasar tres pruebas. Si las pasais, seréis las nuevas proxies. Si no, solo moriréis... Esta es la primera.

De pronto, se forma un silencio ensordecedor, que se rompe por el suave sonido de una extraña melodía, que se mueve entre los árboles, con el viento, envolviéndolo todo.

Miro a Jeff que sonríe intentado relajarme, me suelta el brazo y desaparece, dejándome sola.

Intento moverme, pero no puedo. Imágenes empiezan a aparecer, y sé que son recuerdos.

Yo, desde que era pequeña hasta ahora.

Ese cúmulo de memorias se convierte en una sombra oscura.

Trato de correr, pero esa sombra me grita, paralizándome.

Miro a través de ella y lo veo: todos mis miedos, pesadillas y esperanzas rotas, encerrados en una silueta oscura, que empieza a tomar mi forma.

Grito, y un dolor en mi cabeza aparece.

- Tienes que vencer tus miedos, Alejandra, tú puedes.

Dice una voz desconocida en mi interior.

Me levanto y la miro

Está susurrando. Susurra todo lo malo que me ha pasado, todos mis temores, todo lo peor que se le puede desear a una persona.

Mis ojos se llenan de lágrimas y grito como nunca había gritado.

-Te odio, no sabes cómo te odio.

Le digo a aquella cosa

-Soy tú, querida.

Dice con una voz gélida.

-Ya lo sé... Por eso te odio, siempre te he odiado. La forma de tus piernas, todo; tu forma de ser, débil; de llorar por todo... Pero he cambiado, y ¿sabes qué? Tú ya no existes.

Le doy un puñetazo a aquella criatura y todo se rompe.

Siento un terrible dolor agudo en mi abdomen y caigo al suelo.

Lo unico que recuerdo es escuchar una melodía y ver los pies del creepy de la sonrisa.

- Eres una chica fuerte, Alejandra, más de lo que imaginas.

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HOLA HOLA, ¿les gusta? Aquí está el tercer cap. También quería recomendarles la historia de Carmen, "PROXY", es buenísima.

No se les olvide comentar y dejar su voto.

Los amo.

Besos, Alejandra.