cadenas italianas (Completó)

Capítulo 29: Te odio

Emilia

Mis manos y piernas tiemblan por una mezcla de frio y nervios, voy en camino al orfanato santa Olga, voy sentada entre Dorian y Elissa la hermosa vista del bosque de Florencia me relaja un poco pero siento que la presión cae en mis hombros necesito demostrar y demostrare que soy capaz de esto y más, mi familia siempre ha destacado en absolutamente todo lo que hacen y debo de seguir con el legado

Llegamos los primeros en salir son Elissa y Damián antes de poder bajar Dorian toma mi muñeca unos minutos se queda viéndome fijamente pero después habla

-ten cuidado sargento y sigue las ordenes que te indique-me dice con un tono de voz frio

-si capitán-dijo tratando de zafarme de su agarre

-una cosa más Sargento-lo voltee a ver- no quiero verte que te acerques más de lo necesario a Damián o a los chicos de aquí-lo dijo apretando sus dientes acaso es que esta celoso no creo es Dorian Lombardi

-por qué?-pregunte esto solo me causaba curiosidad

-porque yo lo digo, ¡joder! solo hazme caso- su tono parece oscuro y mientras lo dice sentía como apretaba mi muñeca, pero no iba permitir que otro hombre me diera ordenes yo hago lo que quiero y como lo quiero

-no eres mi dueño Lombardi ahora suelta mi maldita mano-le grite, luche un breve momento con él y logre salir de la camioneta

Respire hondo y camine adonde estaba Elissa, Damián toco la puerta grade de madera de ella sale una señora que trae un traje de mucama

-buenas tardes en que los puedo servir-dice con una voz muy dulce

-buenas si busco a anastasia torres-dice Damián

-tiene sita ¿señor?

-señor Hidalgo y si tengo cita-ella al escuchar el nombre abre la puerta y no le quita los ojos de encima

-pasen por aquí síganme- Damián nos gala de las manos como dos niñas pequeñas guiándonos por los pasillos enormes y muy oscuros hasta que llegamos a la última puertas del pasillo la señora abre unas las puertas dejado mostrar una oficina muy limpia y ordenada y una mujer no más de 40 años sale de una puerta arreglándose la blusa que llevaba puesta, cuando nos mira analiza a Damián y le tendió la mano

-o señor Hidalgo pensé que llegaría más tarde-se estrellaron las manos y se sientan en el escritorio que está en medio de la habitación nosotras seguíamos paradas como dos niñitas asustadas

-al grano Anastasia entre más rápido me deshaga de estas mocosas mejor para mí-dice con voz cansada

-como aviamos quedado hidalgo mi dinero y yo me encargo de estas dos lindas niñas-nos voltea a ver analizando cada detalle de nosotras- como sabes hidalgo una vez que estén dentro no las volverá a ver hasta que cumplan la mayoría de edad

-para mi mejor-Anastasia se acerca a Damián seductoramente-no quiero volver a ver estas mojigatas por un largo tiempo

-bien cerremos el trato como quedamos lindo-se sienta en las piernas de Damián y solo veo como lissa la asesinaba con la mirada tome su mano tranquilamente para que se controle

Anastasia empezó a besarlo con lujuria mientras nosotros los veíamos hasta que la mucama llama la atención de los dos hace una seña con la cabeza hacia nosotras anastasia suelta un bufido bajándose de Damián y caminando para nosotras

-que niñas tan lindas-se acercó a mi tomando mi cara en sus manos analizándome-cuantos años tienes linda

-10, señorita-contesto con la voz más inocente que pude