☠One☠

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Capítulo 1
Tu nombre será Kiyoko

Capítulo 1Tu nombre será Kiyoko

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Rimuru suspiró aliviado una vez que miró a la mujer tener algo de "ropa" -si es que se le podía llamar ropa a hilos pegajosos que cubrían todo su cuerpo desnudo-. El pequeño Slime realmente no supo cómo reaccionar cuando apenas salir de la cueva en donde estaba su amigo Veldora, se encontró -unos cuantos pasos, en su caso saltos- más adelante a una mujer desnuda la cual le miró con un rostro de impresión y luego se agachó, dubitativamente a pincharlo.

Digamos que la interacción con la albina no fue la mejor, ¡Fue muy grosero de parte de ella pincharlo con su dedo! Pero luego de analizar levemente la situación en la que se encontraba, decidió que era mejor asegurarse de que tuviera ropa alguna antes de siquiera empezar una conversación estable.

Primero que nada, ajustó su voz lo que hizo que la pobre chica se escondiera detrás de un árbol temblando mientras estaba en una posición de ovillo, su pequeño corazón se rompió al ver el susto en el rostro de la pequeña mujer y decidió que debería bajar el tono de su voz para que fuera más fácil de comunicarse.

Cuando pudieron hablar tranquilamente, tampoco es como si hubiera podido averiguar mucho de la chica. Al parecer, pertenecía a la tribu de híbridos de conejo, no tenía nombre y no sabía nada del mundo porque tenía amnesia.

Y si, la pobre chica tenía una cicatriz en el centro de su frente la cual cubría con su flequillo.

Rimuru fue bastante comprensivo con ella, ¿Quizás también se sentía identificado un poco? Ella no sabía nada de este mundo y era como si la hubieran tirado directamente de la nada y él estaba en las mismas, solo que en mejores condiciones.

Básicamente podría decirse que se compadecía de ella.

Mientras más miraba a la mujer, el pequeño Slime pensaba en un nombre para ella. Aquella mujer tenía una cabellera blanca tan pura como la nieve en las montañas inexploradas, que caían como cascadas de nubes suaves y cálidas. Su piel era tan blanca como la porcelana, era lechosa, suave y sin ninguna imperfección aparte de la tierra que no podía ocultar su belleza.

Ojos celestes puros como el cielo, tan transparentes como un hielo azulado y profundos cubiertos de una desbordante pureza e ingenuidad, tan grandes como su curiosidad por el mundo que le rodeaba. Su rostro cual muñequita de cristal, una naricita pequeñita como un diminuto botón, mejillas suaves las cuales daban ganas de pellizcar deliciosamente, labios pequeños y regordetes, de un suave rosado humedecido por aquella dulce lengua que se asomaba de vez en cuando por su boquita de dientes blancos aperlados.

Rimuru la siguió mirando mientras ella miraba felizmente a una mariposa y cerró sus ojos cuando el pequeño insecto se posó en la punta de su nariz. Aparte del rostro de inocencia pura, su cuello largo y delgado, fino y elegante desembocaba en pequeños hombros levemente rosados por los besos del sol, desencadenando en brazos largos y delgados con pequeñas manos delicadas de largos dedos con pequeñas uñas rosáceas.

Si se iba al centro del cuerpo femenino, había dos tentadoras clavículas que incitaban a mirar hacia abajo para encontrarse con esos esponjosos pechos, grandes y jugosos como dos melones. Bajando por una estrecha cintura con caderas amplias, deslizándose por esos deliciosos muslos gruesos, pantorrillas firmes, con sus pequeños tobillos que daban inicio a sus piececitos pálidos.

Mirándola por detrás, tenía una hermosa espalda fina y recta, que unía sus delicados hombros con el tronco de su cuerpo, dejando a la vista la excepcional figura de reloj de arena que desembocaba en dos glúteos redondos y elásticos en forma de corazón.

Y, encima de sus glúteos, había una pequeña colita esponjosa tan blanca como su lacio pelo o las orejitas de conejo que estaban en su cabeza, las cuales tenían un aterciopelado pelaje níveo y por dentro, eran rosa pálido.

Tenía un rostro inocente y un cuerpo pecaminoso.

¡Espera un momento! ¡Él no debería estar viéndola de esa manera tan indecente! ¡Se supone que la observaba más en detalle para buscar un nombre apropiado! ¡OOOh dios! ¡¿Qué tan pervertido podía llegar a ser?! Ejem... Ejem... bien, volviendo al nombre...

—Mientras recuerdas tu nombre, te llamaré "Kiyoko" —habló el Slime haciendo que la conejita le mirara con sus grandes ojos azules aún con la mariposa en su nariz—. Tu nombre significa "niña de gran pureza" y, por otro lado, "Claridad".

—¡Ah! ¡Muchas gracias, Rimuru-kun! —exclamó la chica antes de lanzarse a abrazarlo y el Slime se sonrojó levemente al estar entre los pechos de la mujer.

«Lo siento absolutamente todo.» pensó atontado el Slime sin darse cuenta de cómo la conejita estaba brillando de color dorado apenas segundos después de darle un nombre.

Rimuru habló de distintas cosas con la albina la cual le prestaba mucha atención a sus palabras, casi interrumpiéndolo constantemente para saber que significaban muchas de las palabras que él decía, por lo que le tuvo mucha paciencia y se divirtió con las expresiones de la mujer albina la cual soltaba pequeñas risitas de vez en cuando o le miraba con rostros de sorpresa, emoción, tristeza, felicidad y mucho más.

Era como una cajita de sorpresas, nunca encontraba la misma expresión en la chica mientras aumentaba la conversación.

Kiyoko pensó que su amigo era «Genial», ¡Él era tan «Confiable» y «Amable»! ¡Se «Alegraba» tanto de haberlo conocido! Él también era una persona muy «inteligente» el cual le estaba «enseñando» muchas palabras nuevas con ejemplos «sencillos».

Ella reamente estaba feliz, por lo que siempre tenía una sonrisa en su rostro y sus mejillas estaban levemente sonrojadas ante toda la nueva información que le decía su «nuevo amigo», ¡Quería ser siempre «amiga» de Rimuru! ¡Él la hacía tan feliz! Y tampoco se «aburria» de estar con él, ya que siempre salía con una cosa nueva que le sorprendía.

¡Ella reamente le «Quería»! Su nuevo amigo era lo mejor que le había pasado en su vida... aunque no recordase mucho de esta antes de conocer al pequeño Slime.

Solo recordaba que comía ciertas plantas y si venían lobos o animales peligrosos, siempre se ocultaba en agujeros en el suelo, ocultando su aroma y cubriéndose de tierra para que no la pillaran, porque ellos le daban mucho miedo y se sentía «amenazada» por esos individuos tan fuertes y poderosos.

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Primer capítulo y ya quiero volver al fandom de One Piece xD

Yaya esta historia creo que va a ser corta, o sea, no les voy a hacer leer todo el anime de Tensei Shitara Slime Datta Ken, sino que voy a nombrar levemente los sucesos y me voy a enfocar más en la interacción de los personajes jsjsjs

Toxic [Yandere! TSSDK x reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora