Capítulo 2

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Wren

Wren lindo nombre.

El color de mis mejillas cambio a escuchar sus palabras, este seguía dado vuelta dejándome ver la tan perfecta forma de su espalda.

─ Gracias ─susurre─ Oliver también es un nombre bonito.

Se volteó con una sonrisa en sus labios.

─ ¿Lo crees? ─asentí─ entonces ahora me gustara también a mi.

Se acercó hacia mi a pasos lentos, hace tiempo que no sabía lo que era estar a gusto con una persona pero el era distinto erizaba mi piel, hacia que mi corazón bombeara tan rápido que temía que escapase de mi pecho.

─ eres hermosa ¿Te lo han dicho?

Su mano capturó las mías acariciandolas suavemente, una electrizante corriente tocó cada parte de mi cuerpo ante ese pequeño tacto.

─ Quise arracarte estos short con los dientes cuando te ví caminar ─sus manos tocaron sin descaro alguno mis glúteos─ mi polla quería salir con solo verte.

─ ¿Si? ─susurre─ ¿No querías hacerme nada más?

─ Oh nena, no te das idea las cosas que me imaginé.

Sentí mi cuerpo chocar contra la fría pared cuando sus labios se posaron sobre los míos en un beso tosco y deseoso, su lengua invadió mi boca cuando esta se chocó con la mía una oleada de placer invadió mi cuerpo.

─ Eres jodidamente caliente.

Sonreí. Lo empujé sobre la cama y con prisa me acomodé sobre su ya erecto miembro rozando nuestras intimidades y mierda que se sentía tan placentero.

─ Así ─susurre mientras me movía sobre el─ ¿Me imaginaste así encima tuyo?

─ Carajos si nena ─sus manos apretaron mi cintura tratando de sentir más nuestras intimidades.

Con prisa comencé a desabrochar los botones de su camisa, uno por uno. Sonreí cuando dejo un pequeño mordisco en mi oreja. Tire lejos la camisa cuando ya comenzaba a estorbar, admire su ya desnudo torso y mi vagina comenzó a palpitar con fuerza deseandolo con todas mis ganas.

Deje varios besos sobre su abdomen hasta llegar a su cuello donde comencé a lamer y besar mientras que sus manos se encargaban de guiar mis movimientos sobre su miembro erecto.

─ Mierda ─gruño─ necesito estar dentro de ti nena.

Me alejé de su cuello victoriosa al ver que las marcas notorias que había dejando en el.

De un movimiento ahora el se encontraba sobre mi con una sonrisa en su rostro, se acercó sin esperar segundos uniendo nuestros labios en una danza tan erótica que hacia perder la razón.

Se alejó para hacer un camino de besos desde mi cuello hasta mis senos, daba pequeños mordiscos sobre la tela poniéndome más caliente, con un movimiento ágil desabrochó mi sostén dejando mis pechos libres a su vista.

─ Me encantan tus pechos.

Mientras masajeaba con su mano uno, el otro se encontraba ya en su boca. Chupaba y mordía sobre estos como si fuera un experto, repitió la misma acción sobre el otro pecho, cuando sintió saciarse de ambos fue bajando hasta el borde del short. Tomo los bordes y lentamente lo iba bajando, dejando un beso por el camino.

─ Puedo notar que tan húmeda estas ─susurro abriendo mis piernas─ Y todavía no te he probado.

Retiro mis bragas dejándome completamente desnuda ante sus ojos, este se separó unos centímetros observando mi cuerpo como si de una obra de arte se tratase.

Se volvió a inclinar entre mis piernas besando mis muslos y hablo:─ ¿Quieres que pruebe que tan húmeda estas? Como se sentiría hundir mi lengua en tu vagina ¿Quieres eso? ─Asentí─ pídelo correctamente, dime qué quieres que te haga.

─ Quiero que hunda su lengua en mi vagina.

Este sonrió y sin esperar comenzó a lamer cada parte de mi vagina, su lengua jugaba expertamente sobre mi clitoris, apreté las sábanas cuando pequeños espamos comenzaban a invadir mi cuerpo y en poco tiempo una ola de placer recorrió mi cuerpo, Oliver sonrió tragando todo.

─ Eres exquisita ¿Quieres tenerme dentro de ti ahora nena?

Hablo mientras se quitaba los pantalones y sin demorar un segundo bajo los boxer dejando a  la vista su gran miembro que se paró al ser liberado de los boxer mostrando que tan erecto está.

─ Por que sabes, yo quiero fundirme tan profundo que te haga ver las estrellas ─susurro mientras terminaba de colocarse el condón─ Pidemelo Wren

─ Te necesito dentro mío Oliver.

Y sin esperar de una sola estoscada entró, tire mi cabeza hacia atrás cuando comenzó a moverse rítmicamente y a una velocidad que lograba ponerme loca.

Sujeto mis caderas tratando de profundizar aún más sus embestidas y Joder que bien que se sentía.

─ ¿Lo sientes? ─hablo en mi oído─ sientes como tú vagina aprieta mi polla ¿Uhm?

Asentí sin poder articular palabra alguna.

De un movimiento volteo mi cuerpo quedando en cuatro sobre la cama, moví mis caderas queriendo sentir más de él, pareció entenderlo por que sin esperar comenzó a embestirme rápidamente.

Sentí como todo mi cuerpo comenzaba a estremecerse.

─ Mierda, Oliver me corro.

─ Aguanta un poco más pequeña ─hablo despacio─ carajo..

Tenia el orgasmo tan cerca que hacia que pequeños espamos recorrieran mi cuerpo.

Mas Uhm ─acaricie mi clitoris haciendo unos círculos─ Oliver.. Mas..se siente jodidamente bien.

Sus embestidas comenzaron a ser más rápidas y sentí que no podía aguantar ni un segundo más.

─ Oliver no aguanto..─me interrumpió.

─ Correte mi Wren, mojame por completo.

Y así lo hice, mi cuerpo se sentía tan bien ante la corriente que rrecoría mi cuerpo, Oliver apretó mis nalgas y sentí como su cuerpo se tensaba llegando al orgasmo.

Se dejó caer a mi lado sobre la cama acariciando mi rostro.

─ Fue.. fantástico ─me sonrió─ Tu eres fantástica Wren.

Acariciaba mi mejilla suavemente y por un momento me olvide completamente de toda la mierda que me rodeaba, me deje llevar y sentí una calidez en sus caricias que me hacía sentir tan bien pero como todo lo bueno tiene un fin, unos golpes en la puerta llamaron nuestra atención.

─ ¡Se acabo la hora!

Nos levantamos colocándonos la ropa tan rápido como pudimos, antes de abrir la puerta Oliver se acercó hacia mi dejando un suave y rápido beso sobre mis labios.

Abrí la puerta y Rodrigo nos miraba seriamente.

─ Se acabo el tiempo.

─ Nos volveremos a ver Wren.

Me dedico una sonrisa y salió de la habitación.

Hoy había sido tan diferentes a los otros días, no había sentido repulsión a sus toques o no me sentía una basura cuando estaba con otros tipos pero con el, todo había sido diferente.

Sus caricias erizaban mi piel, sus besos me dejaban con ganas de más, su cuerpo encajaba perfecto con el mío dándome un enorme placer.



...

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