Un Amor Desde La Infancia [COMPLETA]

Capítulo 11

—Qué es lo que me quieres decir? —le pregunté ignorando la pregunta que me hizo.

—Si —al parecer salió de su trance —le haremos una fiesta de cumpleaños a Juan, pero solo nosotros por que... a nadie le cae bien Ana —levantó los hombros cuando menciono lo ultimo.

—De nosotros te refieres a, Katia, Ricardo, Cesar, obviamente Juan, tu y yo? —levanté una ceja.

—Correcto Kimberly —me sonrió —entonces.... aceptas? —me preguntó haciendo ojitos.

—No iríamos el viernes cierto? —le pregunté caminando a nuestra aula.

—Si, te parece si nos reunimos en la casa de Katia y de ahí nos ponemos de acuerdo —alguien lo interrumpió.

—Hola chicos —Juan se nos había acercado.

—Yo tengo que hablar contigo —lo mire seria.

—Nos vemos —Francisco se fue rápido, dejándonos solos.

—Qué pasa? —nos fuimos am aula de arte.

—Por que rayos aceptaste volver con Ana? —cerré la puerta con llave.

—Me enteré que andas con Mark —me miro serio.

—Responde primero a mi pregunta —me cruce de brazos.

—No lo entenderías, ahora responde tu —suspiro.

—Tampoco lo entenderlos —contra ataque con lo mismo que el me dijo — no entiendo —suspire —tú me dices que yo no puedo andar con Mark y yo te digo lo mismo con Ana, en nuestros encuentros siempre terminamos peleando —lo mire.

—Yo se la respuesta —él agarró mi mano y la entrelazo con la de él —yo te gusto, y tu me gustas a mi Kimberly —me sonrió.

—Que —solté una risa —si eso fuera cierto, tu y yo no tendríamos pareja —limpie una lágrima que había pasado por mi mejilla, por culpa de la risa.

—Quoen esta ahi? —escuchamos que el director estaba tocando la puerta.

—Escondete —ambos nos escondimos debajo del escritorio.

—Quien encuentre aquí sera expulsado —empezó a buscar por todos lados, menos en el escritorio —fue mi imaginación —se fue del salón.

—Estuvo cerca —susurró Juan.

—Por tu culpa casi nos expulsan y ya para terminar el año —antes del salir del aula nos fijamos que no había nadie afuera.

—Pero yo no cerré la puerta con llave —me miro de reojo.

—Kim —se nos acerco Katia —tengo que decirte algo —me miraba preocupada.

—Nos vemos Juan —me fui con Katia, y no se por que presentía algo malo —qué pasa? —nos fuimos a la cancha.

—No hagas ruido —nos metimos debajo de las gradas de la cancha —mira —me susurró señalando a una pareja que había en dicho lugar.

—Ese es Mark? —pregunté en susurro.

—Lo lamento amiga —ella puso su mano en mi hombro, por que?.

Mark se estaba besando con otra chica, que parece que se van a comer, me sentía mal, si, pero no quería llorar. Él no es el chico que me gusta.

—Vámonos —salimos de dicho lugar sin hacer mucho ruido.

—Te sientes bien? —Katia me preguntó.

—Katia, me siento rara —suspire por que ella me miro confundida —me refiero a que Mark no es el chico que me gusta —la mire.

—Entonces, por que andabas con él? —nos sentamos en una banca.

—No se en lo que pensaba —puse mi mochila a un lado.

—Amiga, esto se va a salir de control —miro asustada detrás de mi.

Atrás de mi venia Juan, y a tras de Katia venia Mark. Hervi de enojo y me le acerque al último mencionado.

—Qué es lo que te pasa?! —no quería alterarme.

—De qué hablas amor? —Mark me miraba confundido.

—No me vuelvas a llamar así —le pegué una cachetada —te vi besandote con otra en la cancha —lo mire seria —creías que no me iba a dar cuenta? —me cruce de brazos.

—Amor, déjame explicarte —Mark iba a agarrar mus manos, pero yo le volví a pegar una cachetada, pero en la misma mejilla.

—Tu y yo ya no andamos —fui a agarrar mi mochila.

Yo voltee a ver a Juan, él no hacia nada, solo me miraba, yo aparte la vista y me fui con Katia.

—Que hijo de.... —suspiro Katia —mejor cambiemos de tema —miro mi mano —Kimberly —agarro mi mano asustada —vamos a la enfermeria —nod fuimos a dicho lugar.

—En que las puedo ayudar jovencitas —una enfermera se nos acerco.

—Me cai y me duele la mano —se la mostré.

—No es nada malo —fue a buscar unas cremas y me las aplicó en mi mano —ya está Kimberly —me sonrió.

Luego de eso me fui a la siguiente clase con Katia. Yo no podía dejar de pensar en el que acaba de pasar, y el por que lo hice enfrente a Juan

(....)

Ya habían acabado las clases, yo iba caminando a la salida, metida en mis pensamientos.

—Kimberly —alguien paso una mano frente a mi, sacandome de mis pensamientos.

—Qué quieres?? —voltee a ver a Juan.

—Ya llegaron tus padres? —empezamos a caminar a su casa.

—Si, ire a traer mis cosas y también le voy a agradecer a tu mamá —sonreí de lado.

—Yo te ire a dejar —se acomodó su mochila.

—Y eso que no estas con Ana? —no pude evitar y rodee los ojos.

—Me tiene harto pero no le puedo terminar —suspiro —solo en mi casa puedo descansar de ella —bufo.

—Se nota desde lejos que ella no te gusta —suspire —y espero ser yo quien te guste —esperen.... yo dije eso?.

—Créeme que si —paso su brazo por mis hombros y me beso la mejilla.

—Olvidemos lo que dije —no pude evitar ponerme nerviosa —llegamos —señale la casa de él.

—Nunca cambies Kim —me sonrió.

Yo le sonreí de vuelta y entramos a su casa, sentí que ya estaba tranquila, sin presiones.

—Ya llegamos mamá —aviso Juan —Cesar? —preguntó, pero nadie le respondió.

—A dónde crees que fueron? —ahora yo le pregunté.

—Creo que donde mi tía —levantó los hombros —ve por tus cosas, yo te espero aquí abajo —se fue a la cocina.

Fui al cuarto en el que me quedaba, guarde todas mis cosas, y antes de salir me aseguré de que no dejaba nada. Baje a la sala nuevamente, pero Juan seguía en la cocina.

—Provecho —él estaba comiendo.

—Gracias —se limpió su boca con una servilleta —lista? —me preguntó.

—Si —señalé mi maleta.

—Por cierto —se levantó —el viernes es mi cumpleaños por lo cual ire a hacerme un piercing, quieres acompañarme? —nos fuimos al garage.

—Claro —le sonreí —y a dónde te lo vas a poner? —él subió mi maleta a la cajuela.

—En mi labio inferior, lado derecho —nos subimos a su auto y nos fuimos a mi casa.

—Nos vemos Juan, gracias —él abrió la cajuela y yo baje mi maleta.

Hasta que yo entré a mi casa el se pudo ir, entre y había un total silencio que no duro mucho.

—Hola hija —mi padre se me acercó.

—Hola padre —lo abrace y él con gusto lo acepto.

(....)