Friday

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luvitylxv  (creo que eres la personita que me da más amor y me pones soft love u) y tthesunn (Me pongo a llorar por cada voto de ustedes, gracias 😭)

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Un nuevo día iniciaba por lo que los pájaros cantaban y empezaban a sobrevolar la ciudad, chillando de aquí a allá, el característico color azulado de la noche se iba esclareciendo pasando a un tono naranja al gran astro lleno de calidez empezar a hacer su aparición en él, destiñendolo hasta volverlo de un azul pálido decorado por mullidas nubes blancas, el viento barría las calles y refrescaba el ambiente, dándole una fresca sensación a los que iban saliendo de sus hogares dispuestos a comenzar con sus rutinas las cuales podían ser ir a la escuela, abrir negocios o ir a trabajar.

En los últimos días, esa hora de la mañana, se había hecho usual el escuchar los pasos repiqueantes de cierto rubiecillo al teléfono, muy concentrado en algún tipo de llamada que le permitiría el adquirir lujos que lo ayudarían a conquistar el corazón de cierto castañito de cara parecida a la de un cachorro y hermosa sonrisa. Justo en aquel momento se vería sus habilidades para cerrar tratos multimillonarios con rapidez, teniendo el suficiente tiempo para así arreglarse e ir directo hacia aquel minimalista café.

A esa hora de la mañana era usual ver a nuestro inquebrantable y lleno de confianza Park Jay atravesar la puerta principal del famoso Hybe coffee shop con una enorme sonrisa y ojos de enamorado, buscando aquel soñado que sabía algún día sería dicho por JaeYoon, el chico cuyo corazón quería conquistar, cuya oportunidad para enamorarlo buscaba.

Era usual, sin embargo, en aquel despejado día aquella acción no estaba teniendo lugar a pesar del mundo disponer de su belleza para que el gesto fuera prefecto, Jay no se encontraba en camino a su diario encuentro, no se encontraba en el café, tampoco en su lujoso auto, de hecho, nuestro querido rubiecillo, no se encontraba por ningún lado, había desaparecido.

Preocupando de sobremanera a sus dos mejores amigos.

—¡Yah, Park JongSeong! ¡¿Por qué no contestas nuestras....?! ¿Jay? —El tono de voz de HeeSeung pasó de uno enojado a uno confundido puesto que, tras abrir la puerta de zopeton esperó encontrarse con su amigo durmiendo, o hasta incluso deprimido encima de la cama, sin embargo, una habitación oscura y una cama vacía fue su bienvenida.

Detrás de él vino SungHoon con pasos lentos, aunque habían llegado juntos el menor no había corrido escaleras arriba por lo que su entrada fue un poco tardía.

—No está aquí. —Hizó saber el pelirrojo con un tono de voz afligido al momento del pelinegro entrar al enorme cuarto cuyo dueño parecía haber desaparecido de la faz de la tierra.

Ante aquello SungHoon tomó su teléfono, pulsó en la marcación rápida el número del rubio y llamó, mientras, HeeSeung pasó por su lado y fue directo hacia el baño, seguramente veía si el rubio no se encontraba ahí llorando en una esquina o en la ducha.

Los pitidos al otro lado de la línea llegaron a su oído, uno, dos, tres.

—¡No está aquí tampoco!

Cuatro, cinco. La llamada se descolgó.

SungHoon casi se tira a maldecir al chico si no fuera porque, en vez de la voz del rubio, una femenina contestó.

"El número que marcó no puede ser localizado, por favor deje su mensaje al finalizar el tono"

Era la voz de la operadora.

Nøt for sale 💲🚫 2J (Jayke)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora