II

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1941

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Los copos de nieve bajaban sin parar, todo lo que se podía ver era blanco en tonalidades variantes desde el cielo al suelo.

El perfecto lienzo albino fue roto unos segundos después por un vehículo Ford llegando hasta la casa del hombre de tierras frías, el punto de planeación acordado para los aliados.

Estacionándose al lado de los otros dos automóviles que se habían vuelto casi invisibles por la capa de nieve que los cubría, un hombre de abrigo verde oscuro y lentes de sol salió de la puerta del conductor.

URSS había vigilado sus movimientos desde la ventana de la sala en donde también se encontraban Francia y UK, contuvo la risa al ver su apariencia, el detalle de los lentes lo hacía ver tan ridículo considerando el clima en el que se encontraban

Las pisadas se escucharon cada vez más próximas, luego pararon hasta dar 3 toques en la puerta de madera. Fue el mismo eslavo el que abrió la puerta e hizo un ademán para que pasará.

—Mon fils, que bueno verte, llegaste sin contratiempos.

La de 3 colores a pesar del contexto en el que se encontraban, no reprimió su alegría al ver a su hijo sano y salvo teniendo en cuenta los peligros en los que se veía envuelto el mundo.

El estadounidense le dio un corto abrazo a su madre, trataba de ser formal aunque al tratarse de su familia y en especial de Francia era complicado.

UK por su parte lo saludo de forma más diplomática con un apretón de manos y procedió a darle un asiento para continuar sin mayores retrasos la reunión.

En frente de los tres, el soviético se sentaba tras su escritorio, observando con detenimiento al reciente miembro.

—Así que ¿Decidiste ser parte de nuestro noble propósito? Que interesante sorpresa.

Su mirada cansada pero sin dejar de ser sombría lo escudriñaba, como si esperara el momento en que dijera algo indebido para sacarlo de ahí sin importar las quejas de sus progenitores. Al ruso no le importaría.

—Deduzco que conoces mis razones, ellos me atacaron.

—¿El ataque de los japonés a tus naves y aviones?

—Yes, that's the reason— Su tono de voz más fuerte y el puño cayendo al mueble de madera denotaba su aun enojo por lo sucedido.

—Además— habló más calmado esta vez —Considero que es una causa importante para todo el mundo y quiero ayudar.

El hombre de parche movió las manos que habían permanecido en su mentón mientras escuchaba al americano. Se relajo en su asiento y dejó sus brazos en el escritorio descansando.

—Quedar como un héroe para el mundo, ese es tu propósito— Bufo al ver la confusión en su rostro —Tu apoyo no es fundamental para la guerra USA, ni siquiera la de ellos— su ojo recorrió rápidamente a los otros aliados que no se movieron ni parecieron expresar nada, no estaban en posición de refutar lo que decía.

—Pero, supongo que ninguna ayuda de "buena fe" debe ser rechazada, al menos no en la guerra.

Luego de esas palabras y un silencio de segundos, se empezaron a hablar de tácticas militares, apoyos financieros y armamentísticos. Todo lo relacionado para poder acabar con la Alemania Nazi.

(...)

Se hizo de noche cuando ya habían terminado de discutir los acuerdos a tomar. El trío de países, fueron invitados a quedarse en la gran casa del soviético al ser vulnerables al tormentoso clima del exterior y a ataques de animales salvajes.

"La Boda De Mi Mejor Amigo" AlemaniaxRusiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora