☄️🌌Había una vez una chica que lo tenía todo; un hogar cálido, una familia, una sociedad de amigos, un príncipe que amaba con locura...
Pero un día lo perdió todo: su hogar se fue, su familia fue asesinada, sus amigos capturados, su príncipe la tra...
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Narrador
Cuando Teru era un tierno y "alegre" príncipe feliz de cinco años escapó de su casa
No deseaba ser príncipe, quería ser un niño normal y común, esos que jugaban fuera de más murallas de piedra y gritaban, comían golosinas y se raspaban las rodillas
Quería vivir
Así que empaco lo que mejor tenía y salió cuando los guardias cambiaban de rotación
Salto el muro con facilidad (gracias a sus años de entrenamiento a temprana edad) y corrió lejos del castillo
Se adentro cerca de la colinas llenas de árboles grandes y frondosos, se escabulló con facilidad
A dónde ir, no lo sabía a ciencia cierta pero tenía que llegar a algún lado
Pasada la media hora llego a lo que parecían unos cultivos de lechuga, tomates y uvas
Camino maravillado al verlas e incluso probó una llenándolo de un sabor dulce y fresco
Se deleitó al ver cómo algo tan simple le subo a mera libertad
Camino un poco más hasta toparse con un árbol sin frutos o flores, un sauce llorón reconoció
De el colgaba un columpio de una enorme llanta de algún tractor, negro y desgastado que se balanceaba al compás de un agradable aire matutino
Sonrío al verlo con alegría dispuesto a usarlo pero se percato que debajo de él habían dos personas: una de ellas estaba sentada al lado mientras que la otra se encontraba de pie con una enorme libreta cargando en sus brazos
Por lo que veía se encontraba en la zona más alta ya que más abajo estaba la casa de aquellas personas bajo el árbol
-¡Vamos pintame, nee-chan!- pidió la chica sentada, tenía el cabello revuelto de un bonito color castaño claro, Teru dedujo que sonreía por su tono alegre y despreocupado de voz
-Solo pinto cosas que importantes- aclaro la mayor moviéndose un poco para dejar ver a Teru (desde un arbusto llamado arrallana) a una niña de su edad con el cabello atado en dos coletas trenzadas cada una en el costado de su cabeza, tenía el cabello un poco más oscuro (aunque tampoco era tan castaño) y sus ojos azules eran opacados por sus gafas de montura redonda, tenía un lápiz agarrado firmemente a su puño diminuto
