Kakasaku: ¡¿Algo diferente?!

Capítulo 5

Mi corazón con ella.

Kakashi no sabia lo que dijo, aun se encontraba apoyado en la puerta y se preguntaba mentalmente ¿Por qué dijo que hablarían? ¿De qué hablarían? ¿De sus recientes y confusos sentimientos hacia su alumna? Sinceramente no sabia en que estaba pensando cuando le dijo a su alumna que hablarían, simplemente dijo lo primero que se le vino a la mente, pues con tal figura que tenía enfrente no podía pensar claramente en lo que le iba a decir, el enojo y el manojo de sentimientos que tenia se esfumo cuando la vio, no sabía por qué, pero siempre que estaba con ella se encontraba en paz, pero a la vez nervioso, alegre pero triste, ¿Por qué sucedía? ¿Por qué con ella sentía todo, pero a la vez nada?

Sus pensamientos se vieron aplacados cuando sintió como la puerta se iba hacia atrás para dejar salir a una pelirrosa un poco apenada por el incidente que había ocurrido minutos antes.

-Entonces, ¿Qué necesitaba que habláramos? - Dijo Sakura nuevamente en un semblante serio.

-Pues veras... - Se detuvo al sentir una nueva presencia, un nuevo chacra que no reconocía – Mejor hablemos en otra parte, las paredes tienen oídos- Concluyó Kakashi tomando de la mano a la pelirrosa para salir de ahí.

Ambos se encontraban caminando unas calles más alejadas del departamento de inteligencia ANBU cuando Kakashi sintió un pequeño jalón por parte de la pelirrosa, dirigió la mirada a sus manos entrelazadas y despues volteo a ver a Sakura la cual dijo - ¿Puede soltarme? Me incomoda. –

- A mi no me incomoda ni me molesta – Dijo Kakashi reafirmando su agarre en la mano de la pelirrosa.

Siguieron caminando agarrados de las manos hasta que escucharon una explosión cerca de donde estaban. El piso tembló ligeramente debido a la ya mencionada, se levantaron unos pequeños trozos de piedra y se escucharon gritos a la lejanía.

Kakashi y Sakura se dirigieron al sonido de la explosión y se encontraron un grupo de gente enmascarada, parecían ser ¿ANBUS?, pero no lo eran, sus mascaras eran un poco distintas a las de la organización.

Sakura y Kakashi entraron a combatir, ambos por su parte, pero Kakashi siempre pendiente de la pelirrosa que estaba a unos cuantos metros de él liderando una batalla contra 3 enemigos.

*Narra Sakura*

Me encontraba luchando contra los enmascarados, liberaba puños de chacra y golpeaba con todas mis fuerzas a cada uno de ellos, todo iba bien hasta que escuche un ligero llanto cerca de los escombros de los edificios caídos, me acerque rápidamente ignorando a los enmascarados y me encontré con una niña temblando en medio de las rocas y agarrada de un osito de peluche, destruí los pedazos de roca sobre ella y la saque de ahí antes de que fuera peor. Ese fue mi error, mi primer error.

- Te olvidaste de nosotros – Dijo uno de los enmascarados detrás de ella.

- ¡Mierda! – Grite mientras ellos me clavaron múltiples kunai en mi espalda, el dolor era insoportable, sentí como uno de ellos me traspasaba y sentía como iba perdiendo poco a poco la fuerza, pero antes de que eso sucediera cogí a la niña, la deje en un lugar seguro y justo ahí todo se volvió negro, completamente negro y lo ultimo que pude escuchar fue un llamado a mi nombre por parte de Kakashi, o eso creo.

*Narra Kakashi*

Todo sucedió muy rápido, pasamos de estar caminando juntos a estar luchando en mitad de la aldea, no entiendo lo que sucedió, lo único que tenia en mente en esos momentos era a Sakura, no quería que nada malo le sucediera, no quería que nada malo le pasará, pero, todo lo que temía se vio reflejado en ese microsegundo en el cual voltee a ver a Sakura y tenia unos 9 kunai en la espalda clavados, no dude ni en segundo en ir a acudirla, pero ella se levantó y cogió a una niña, la cual no había notado hasta entonces y se fue a una calle vacía que estaba alejada de la batalla, yo la seguí y en el momento que ella comenzó a caer inconsciente lo único que logre articular con mis palabras fue su hermoso nombre – ¡Sakura! –

Me acerque a ella, la tome entre mis brazos y no dude ni un segundo, a pesar del miedo que sentía al verla tan débil saque una fuerza inimaginable para salir corriendo al hospital, solo podía dejar a Sakura en manos de Tsunade, solo ella podía ayudarla del estado tan critico en el que estaba.

Llegue al hospital, sangrado, sudado y temblando, grite con todas mis fuerzas el nombre de la única medico en quien confiaba para dejarle a mi cerezo en manos.

- ¡Tsunade! – Grité.

- ¡Tsunade! – Volví a gritar entre el tumulto de gente que se encontraba en el hospital, en eso veo como Tsunade se acerca con un semblante amenazador, quizá por la manera en que la llame sin honoríficos o algo así hizo que se enojara, pero en ese momento no me importaba nada, no me importaba recibir la paliza que me podía dar la Hokage por la falta de respeto, solo me importaba que Sakura, la mujer que tenia en brazos, la mujer que abordaba mis pensamientos mañana y noche estuviera bien, daría lo que fuera por cambiar de lugares, daría todo con tal de que yo fuera el que tenía esos kunai clavados con tal de que ella estuviera bien no me importaba estar muerto o repetir mi pasado, no me importaba nada con tal de que en esos momentos su pelirrosa estuviera a su lado sonriendo.

Tsunade cambio el semblante amenazador que traía hace segundos atrás cuando vio a Sakura en los brazos de Hatake. Se acercó y gritó – ¡UNA MALDITA CAMILLA! ¡YAA! -

Llego la camilla y lo único que pude hacer fue dejar a Sakura en ella y ver como se marchaba inconsciente sobre esta misma, y al momento en que ella se iba en esa camilla, tambien se iba un pedazo de mi corazón en ella. 

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¡Hola! 

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¡Espero les guste, muchas gracias por leer!