Me volví a tirar al abismos
porque no quería otro precipicio
que no fuese el tuyo,
porque no quería otra caída
que no fuese contigo.
Y eso es así.
Aposté por ti
cuando todo estaba en contra—Ahora que ya bailas
Mirarla a los ojos era como si el mundo se detuviera, como si fuera todo pero a la vez nada y que siempre estarían ahí, uno para el otro.—Mírame a los ojos, dime que me amas y que estarás a mi lado— Sus ojos le decían te amo y anhelaban un sentimiento mutuo
—Jug— Lo vio a los ojos y le sonrió— Claro que te amo y estaré a tu lado hasta el día de nuestra muerte
—Ahí esta, creía que ya no podías enamorarme mas, vienes tú y me enamoras más— Jughead le sonrió y le dio un beso, un beso dulce, que en unos segundos se convirtió en algo fogoso, el calor en el búnker incrementaba, sus labios estaban en una danza, que estaban al compás uno con el otro, las manos de Jughead morían por tocar a Betty, pero no podía sin el permiso de su amada y como si fuera acto de magia ella lo dijo
—Jug— dijo su nombre separandose del beso— quiero hacerlo, quiero hacerlo contigo
—Pero Betty no vengo preparado— la rubia subió los hombros
—Me tomaré la pastilla, lo prometo solo quiero hacerlo— Jughead asintió
Sus besos se volvieron a unir pero con más desesperación, deseado, placer y erotismo. Cada parte de ellos lo deseaba, lo necesitaba.
Se querían el uno al otro, siempre seguían las reglas, eran muy cautelosos, pero hoy fue su perdición, el amor les ganó, la pasión gobernó.
Un millón de emociones tenían adentro, electricidad recorriendo su ser, cada beso, cada tacto era como gloría para ellos.
Por ello el decir que resistiría ante tal pecado era casi ilógico, ya que ellos lo requerían.
Las manos de Jughead empezaron a marcar un camino, logrando sentir la suave piel de su amada, tal fina, tan blanca... Tan perfecta. Sus manos iban descendiendo causando que el cuerpo de Betty entrara en un calor interno y externo, que solo 1 cosa podría calmarlo y solo él lo calmaría.
—Betty te deseo— dijo sin más con una mano sosteniendo el elástico del pantalón de Elizabeth
— Jugy— con un movimiento quedó sentada sobre las piernas de Jughead— Te deseo igual— Ella empezó a moverse lentamente pero haciendo que sus sexos se tocaron aún con la ropa puesta. La tentación y exitacion que tenían era única.
Aún con los movimientos constantes de Betty, Jughead empezó a levantar la playera de su amada hasta dejarla en sujetador; él empezó a besarla primero en la boca y después empezó a descender, paso por su cuello donde dejó varios besos y varios jadeos provenientes de Betty, pero su destino de Jughead no era solo eso así que siguió bando hasta llegar a sus pechos aún cubiertos.
—¿Puedo?— Paso sus manos por la espalda de Betty
—Cla-Claro— Su voz entrecortada era evidencia del fuerte vaivén de electricidad. Así como pidió permiso empezó a desabrochar el sostén; termino de hacerlo, dejando sus pecho a su vista, con una mano los tocó y se sintió en el Olimpo, empezó a masajear el pecho de Betty los cuales para ese momento ya estaban duros y dirijo su boca al que estaba libre, el tacto de su lengua con esa superficie era deliciosa, dejando oír un leve gemido proveniente de Elizabeth ante ese acto Betty le saco la playera a Jughead para que estuvieran casi parejos
—Ju-Jug— Decía entrecortado— Te quiero—Su voz era un tanto gruesa
—Esta bien— se separaron, Betty se quitó todo lo que le quedaba al igual que Jughead, él se posicionó entre las piernas de ella y lentamente fue entrando en ella
Estuvieron un buen rato así hasta que ellos dos llegaron al orgasmo juntos.
Lo disfrutaron tanto que no tuvieron la precaución de usar un método anticonceptivo, ni ese día ni al día siguiente... Una semana paso de ese suceso y Betty tenía diferentes síntomas los cuales le preocupaban, tenía muchos antojos dulces, cosas que usualmente no pediría en ese momento los queria
—Jug—Lo vio a los ojos— Quiero una dona— le hizo ojos de perrito triste
—Betty estamos alistando la cama para dormir ¿Y tú quieres una dona?— la rubia asintió
—De chocolate o Moka o o Maple— decía muy entusiasmada y casi sacando baba de su boca
—¿Se te antoja mucho?— Betty asintió— Entonces vuelvo en 15 minutos, solo no te duermas sin mi— la rubia asintió y con eso Jughead bajó las escaleras encontrando a la mejor amiga de su mamá— Hola mamá
Inmediatamente Alice volteo y le sonrió— Oh Jug hola— se llevó la cuchara a la boca— ¿Necesitas algo?
—De hecho si, ¿De causalidad tendrán donas?—Alice negó
—No hemos comprado— le dio una sonrisa— ¿Para que las querías?
—Se que sonara raro pero Betty quería unas— esa noticia se le hizo extraña a Alice
—Si quieres voy por ellas y te las traigo ¿Si?— dijo en tono confundida
—No te preocupes Alice voy y vengo— Alice acepto y así salió Jughead, en menos de lo creído Jughead estaba en la casa, antes de subir para ver a su novia le dejo 3 donas a Alice, para que las repartiera entre ella, Caroline y Hal. Al subir pudo ver a su novia completamente dormida, abarcando la mitad de la cama, le dio una leve sonrisa, la acomodo en su lado de cama, le dio un beso en la frente para quedar en un profundo sueño.
¿Quién diría que esa noche sería la noche tranquila antes de la tormenta?
Holaaaa holaaaa holaaaa ¿Cómo están? Yo muy bien la verdad, solo con hambre pero yo siempre tengo hambre así que no se preocupen.
Cómo les dije actualizaría está primero, después "Damn bitches", le sigue "The Fruit Of Our Past" y para finalizar "Dulce Exitium".
En esta ocasión no haré preguntas ya que creo que el capítulo fue muy claro pero por si a caso
Las dudas me la dejan aquí ➪➪
Ahora sí lx amooooooo
Byeeeee ♡
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Te necesitaba
Fiksi PenggemarJughead Jones se convirtió en padre a los 19 años y como si no fuera poco lo hizo solo; ya que su novia Elizabeth Cooper lo abandono con ese pequeño ser de luz, su princesa, su vida y su único amor. Todo era perfecto hasta... - Hola linda ¿Cómo te...