Caos en la cuidad soukoku Odango

CAPÍTULO 8

Dazai decidió probar suerte y decidió leer algunas de las cartas, se moría de curiosidad y pensó que mientras Dai no se diera cuenta nada pasaría, pero entre más leía su mirada se oscurecía y cuando leyó la última carta la guardo con tal delicadeza que sorprendió a los pelirrojos, todos los presentes tenían curiosidad del contenido, pero no se atrevían a preguntar, Dazai tomo la caja y la guardo en el lugar donde estaba y aun con la mirada algo perdida volteo a ver a su ahora novio, Dazai estaba arrepentido, no debió haber leído eso, era algo tan personal que no solo se sintió incomodo sino que extrañamente sintió un leve deja vù sin saber por qué.

Así que sin pensarlo y casi por instinto se dirigió hacia Chuuya y sin impórtale los otros presentes besarlo, pensando que si su suegro aún seguía con vida le rogaría que lo perdonarla por leer aquello que el otro tanto guardaba con recelo.

-chibi creo que deberías ir a descansar porque no sabremos cuando volveremos a tener un lugar lo suficientemente seguro para que duermas-dijo Dazai con voz suave mientras acariciaba el rostro del otro y Chuuya al estar cansado la verdad no pudo negarse ante esa tentativa invitación.

-tengo hambre-dijo Chuuya viendo a su hermano el cual rápidamente salió de aquel raro ambiente en el que estaban sumergidos.

-ve a bañarte por mientras cocinare algo para todos y ver que podemos llevar de comida, Ango si necesitas mi ayuda en algo avísame y tu Dazai podrías buscar algo de ropa para todos y en mi habitación hay un paquete de toallas húmedas nos servirán para poder asearnos-dijo para luego marcharse y cada uno hizo lo que se le indico.

-ahora que lo recuerdo chibi estoy molesto contigo ni una llamada me hiciste ayer, pero si llamaste a Akutagawa-Chuuya se ahogó con su vaso de leche al recordar a su amigo.

-mierda si cierto Ryu-exclamo alarmado y pararse hasta el teléfono que estaba en la pared de la cocina.

-no lo intentes Chuuya-san la señal fue cortada-le dijo Ango mientras comía.

-¿Qué? ¿Por qué? ¿acaso no estamos apenas en el segundo día de infección?-dijo el pelirrojo molesto, Ango suspiro y los miro sin saber si decir o no.

-no estamos en el segundo día, estamos a una semana para cumplir dos meses desde que aprecio el primer infectado-revelo Ango como si estuviera hablando del clima después de todo él había estado viendo eso por durante ese mes y 3 semanas ya hasta se había acostumbrado.

-¿casi dos meses?-pregunto el menor del grupo con incredulidad.

-casi dos meses-le confirmo Ango cruzándose de brazos y asintiendo,

-yo... yo pensé que apenas estábamos empezando-murmuro Oda mirando su plato de comida.

-pues pensaste mal esta situación se ha visto durante dos meses, pero piensa que no es lo suficientemente grave para que el secreto se haya podido mantener en silencio por tanto tiempo-respondió el de lentes para continuar comiendo.

Después de haber comido todos tomaron rumbos diferentes Chuuya decidió ir a dormir ya que se encontraba agotado y también porque era el único del pequeño grupo que no había dormido absolutamente nada, Dazai lo siguió solo porque quería estar a su lado, bueno después de todo el chico se había aguantado por años ya no quería limitarse a solo observar ahora necesitaba cercanía, Oda fue a su habitación solo para darse una ducha y verificar que Dazai había empacado lo que le había pedido y también asegurar que no metiera estupideces en el bolso donde iría la ropa ya que tenía el presentimiento de que no llegarían a Tokio en solo horas y necesitarían ropa cómoda y adecuada y Ango solo quiso inspeccionar la casa y asegurar todas las entras y supervisar si estaban rodeados de zombies ya que si era así eso les podía traer consecuencias cuando se marcharan.