FLAMES ² | Liam Dunbar

Capítulo 2

2. El reencuentro.

La fría celda, o más bien jaula, ya se había hecho un lugar recurrente para Olivia. Como era costumbre, ya había perdido el sentido del tiempo, era algo frustrante.

Al menos tenía la "suerte" de perder la cabeza por un rato, puesto que cuando lo hacía, su cabeza pasaba a estar en blanco totalmente y lo único que conocía era ira; las paredes del lugar donde ahora mismo yacía, podían ser un claro ejemplo. Llena de rasguños por sus garras y partes rotas por fuertes puños.

Le daba miedo pensar en lo que se había convertido. En lo que la habían convertido. No sabía cuándo perdería la cabeza, podía llegar a ser impredecible.

El sonido de una sirena de seguridad, interrumpió sus pensamientos volviendo a la realidad. Frunció el ceño, muy confundida. Había escuchado una sola vez esa sirena, y fue cuando trató de escapar a las dos semanas de haber ingresado. La misma, continuó sonando un buen rato.

Escuchó la puerta abrirse al final del pasillo, la venían a sacar de ahí. Olivia se enderezó y esperó. Pero lo único que escuchó fue el sonido de huesos romperse y un corazón latiendo muy rápido.

¿Qué está pasando? Pensó. Se alarmó al instante, cuando un hombre vestido totalmente de negro se paró frente a su jaula. Olivia lo miró alerta.

Enseguida que el hombre se sacó la máscara de gas que tenía en la cara, Olivia supo de quien se trataba.

—Viniste.

Lo dijo casi con alivio.

—Te lo prometí.

Logan intentó romper el candado con sus manos, pero este tenía acónito, haciendo que él su mano ardiera apenas tocarlo. Pero entonces, sacó de un bolso que traía en su espalda, una chicana y de un golpe seco, el candado se quebró. Olivia abrió la puerta enseguida y casi cae, de no ser porque su hermano la sostuvo.

—Lo siento tanto, Olivia, créeme que pensé que sería lo mejor para ti.

Olivia lo miró fijamente unos segundos, pero seguía sin poder perdonarlo.

—Sácame de este lugar.

Logan suspiró decepcionado, pero se recompuso y le tendió una máscara de gas igual a la que llevaba. Ambos se la colocaron y Logan tiró de su mano para luego salir corriendo. Los pasillos apenas se podían ver tras todo el gas que, al parecer, Logan había tirado.

—Tenemos que apurarnos, esto no dura nada —dijo aumentando su velocidad y tirando otra bomba lacrimógena al ver que unos guardias ya mejor, se acercaban a ellos.

Salieron afuera y la luz de la luna iluminaba la noche.

—¿Recuerdas el truco que te enseñé hace un tiempo? ¿Lo de transformarnos completamente? Hay un hoyo en el alambrado, crucemos y no paramos hasta que yo lo indique.

Como no hacerlo, la obligaban a transformarse de forma animal y quedarse el tiempo más largo posible, era una tortura tratar de quedarse por mucho tiempo así.

Sin embargo, Olivia no dudó y lo hizo. Ambos se transformaron y corrieron como nunca lo hicieron en su vida. Olivia, como era de esperarse, tuvo que concentrarse al máximo para no perder la cabeza y actuar como un lobo lo haría. Solo se limitó a seguir a Logan.

Él se detuvo al adentrarse a un bosque. Detrás de un árbol, volvió a su forma humana y se cambió.

—Toma —arrojó una mochila frente a la loba blanca y le dio la espalda para darle privacidad.