Capítulo 11

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No hay palabras para describir la decepción, la depresión o la culpa, son sentimientos tan estrechamente relacionados que uno va seguido del otro en algunos momentos de nuestras vidas.

Momentos de nuestras vidas que parecen no tener algo bueno que darnos, momentos que simplemente pueden desaparecer la sonrisa de nuestro rostro.

Y si, simplemente no pueden definirse, y no porque no tengo un significado lógico o por no hallarle esa perfecta descripción, sino por el simple hecho de como nos hacen sentir, que solo podría llegar a entenderlo alguien que lo viva muchas veces en su vida.

Decepción:
En ocasiones se suelen poner demasiadas expectativas en algo o alguien y ésto lleva a la decepción cuando esas expectativas no se ven satisfechas. ... Cuando alguien pone las expectativas muy altas en relación a cierto proyecto y confía en que todo saldrá perfecto, puede decepcionarse al ver que no resulta o que sale mal.

Eso sucedió cuando ese día A me destruyó mis sueños. Eso de tener una casita lo suficientemente grande para llenar cada rincón de felicidad con nuestros abrazos, nuestros besos o nuestro sexo quedaba en el piso y solo sentía la necesidad de tenerla pero lo suficientemente pequeña para no sentir ese vacío que me estaba dejando con su partida.

Depresión:
Sentimientos de tristeza, ganas de llorar, vacío o desesperanza. Arrebatos de enojo, irritabilidad o frustración, incluso por asuntos de poca importancia. Pérdida de interés o placer por la mayoría de las cosas que solía hacer.

No pensaba expresar lo que me hizo sentir que eligiera precisamente ese día para dejarme y decir que la distancia era más fuerte que ella, pero he tenido que hacerlo, he tenido que liberarme de esas ideas que me llenaban la mente y no me dejaban pensar algo recurrente, daba igual lo que hiciera esa imagen siempre volvería. Fue capaz de dejarlo todo ese día, sería capaz de hacerlo cuando quisiera y sabría que la volvería a perdonar porque era consiente de la debilidad que tenía mi cuerpo ante ella. No quiero pensar que utilizaba eso en mi contra, no quiero tan solo imaginar si alguna vez de esas que me dejó llegó a traicionarme, y solo lo hacía para divertirse un rato, no se que pensar, solo quiero creer que ella nunca fue así y nunca lo será.

Culpa:
Es la sensación interna permanente de haber hecho algo malo, de ser mala persona, de hacer daño a los demás, tanto en situaciones reales como imaginarias,​ produciendo un malestar continuado.

No trataré de justificar sus actos, ni tan siquiera sacarle algo bueno, pero esa extraña sensación que me quedaba era algo. CULPA. Definitivamente tendría que ser eso, yo misma había ocasionado que ella se agobiara, quizás por no buscar otras alternativas y vernos, o quizás tan solo por no recordarle cada día que la quería, no estoy hablando de palabrería, hablo de las acciones que ambas hacíamos cada día, no necesitábamos fechas y bueno pues yo dejé de hacerlas, y luego ella. Suelen decir que cuando la enamoras empiezas a descuidarla y luego terminas perdiendola, y quizás es cierto y por eso sentía que la culpa era mía.

Cuando sea tuya, sigue enamorandola día a día, porque quizás sientas que la perdiste y no porque se fue si no porque tú misma la dejaste ir.

Y eso era todo, así me sentí ese día, tres sentimientos realmente complicados, unidos y tumbado al piso mi estabilidad emocional, al final realmente todo era por mi, por decepcionarme de algo que creía diferente, por deprimirme por alguien que no me quería y sentirme culpable por algo que ni había hecho.

>>Ahora no pienso así, pero realmente, así me sentí<<

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