SANJI
Era una tarde particular, especialmente calurosa y la sal del mar se sentía más allá de molesta cuando se pegaba directo al rostro debido al viento. No era que Sanji no estuviera acostumbrado, era que todo tenía una vibra muy pesada y eso si que estaba cerca de hacerlo querer gritar.
-¿Estás bien Sanji?- preguntó el pequeño Reno que además era doctor de la tripulación con una expresión de preocupación en su rostro.
-Tranquilo Chopper es solo que estoy demasiado acalorado- dije tratando de restarle importancia.
-Está bien, pero si necesitas algo me avisas- dijo con una expresión que decía que no me creía mucho.
Después de esa breve conversación me dirigí a preparar la comida, me quité la corbata y el saco de mi traje porque realmente me estaba sofocando, ¿qué me pasaba? Ni yo mismo podía responderme.
-Oye cocinero ¿dónde está...- escuché que empezó a decir el marimo pero ni siquiera pude entender el resto.
-Em no lo sé Zoro, eh quiero decir marimo- dije tratando de quitar el sudor de mi frente.
- ¿Te encuentras bien?- preguntó con un tono de preocupación, a lo que no pude evitar reírme secamente.
-¿Dije algo gracioso?- Preguntó malhumorado mientras decidía sentarse en la mesa cruzado de brazos
-Es solo que todos parecen preguntar eso el día de hoy- dije recostándome también cruzado de brazos pero sobre el mesón, probablemente era algo negligente de mi parte como el cocinero pero estaba empezando a ver borroso.
-Hmm ya veo- dijo mientras asentía lentamente- ¿Tendrás fiebre? Te ves pálido y estás sudando Sanji
-Ya te he dicho que si- dije mientras le daba la espalda para que no viera mi reacción de sorpresa al escucharlo llamarme por mi nombre y no por apodos estúpidos, pero desde luego eso era algo de nosotros.
-¿Dijiste algo?- preguntó Zoro de nuevo.
Últimamente se sentía extraño estar cerca de él, entre más pasaba el tiempo, más fuerte se hacía mi necesidad de encontrarle respuesta al sentimiento.
-¡SANJI!- escuché que gritó, antes de sostenerme. Me había caido y ni siquiera lo había notado, tenía tanta fatiga y apenas y podía ver el distintivo color verde de su cabello, quería decirle algunas palabras pero todo se volvía más y más borroso hasta que desapareció.
ZORO
-¡CHOPPER!- grité en el momento en que el cocinero perdió la conciencia, se sentía demasiado ligero, frágil y estaba bañado en sudor. Ni siquiera me atrevía a moverlo porque su respiración era demasiado irregular.
- ¿Sanji? ¿Zoro?- escuché decir al reno mientras empezaba a examinar a Sanji- ¿Que sucedió?
-No lo sé, se veía fatal mientras hablamos y de un momento a otro se desplomó- dije lo más tranquilo posible mientras por dentro estaba demasiado desconcertado.
-Hace rato también lucia bastante mal- dijo Chopper antes de sacar inyecciones y otro montón de cosas que no alcanzaba a entender.
En ese momento los demás miembros de la tripulación llegaron y empezaron con el alboroto para saber que le pasaba al cocinero. Realmente yo no sabía que hacer o decir, habían pasado demasiadas cosas en tan poco tiempo, lo sucedido con Big Mom y la familia de Sanji y luego Wano, tantas situaciones que a duras penas había podido hablar con el cocinero y por supuesto de analizar que sucedia conmigo y ahora esto.
Luego del desastre inicial, ya en la tarde estaba Sanji en la enfermería y Chopper había determinado que probablemente fuera alguna enfermedad pescada en Wano pero considerando que ya nos encontrabamos lejos estaba dificil volver y tomar muestras hasta encontrar soluciones.
El cocinero se encontraba mejor pero no teníamos dudas de que la fiebre probablemente regresaría, y había costado casi todo el día bajarsela. Chopper no lo decía pero se notaba la preocupación que esto le ocasionaba, a él y a todos nosotros.
Esa noche le tocaba a Sanji hacer la guardia pero en vista de todo me ofrecí antes que otro lo hiciera y de ese modo podría pasarme por la enfermería de vez en vez.
Eran las tres de la mañana cuando no fui capaz de resistir más y decidí acercarme, Chopper se encontraba colocando compresas frías en su cabeza.
-¿Como sigue?-le pregunté desde la puerta, haciendo que el pequeño reno saltara.
-Tiene fiebre de nuevo- dijo el pequeño doctor con preocupación y agotamiento en el rostro.
-¿Quieres que te releve?- le pregunté acercandome.
-¿Seguro? No lo sé, me gustaría quedarme con él para analizar su progreso-dijo dudoso, hasta que vió mi rostro, sea lo que sea que viera le hizo irse seguro de que Sanji estaría bien.
Me senté junto a él colocando las compresas frías en su frente, tenía que asegurarme de que esa fiebre bajara a toda costa, fueron unas horas muy largas, tanto así que mi mente vagaba nuevamente a todos los acontecimientos previos.
Todas las peleas anteriores, con enemigos y entre nosotros mismos, por lo que me habían contado la pelea para lograr recuperar a Sanji de las garras de su familia había sido más difícil de lo esperado. Me frustraba el pensar ¿por qué a veces me sentía cercano al cocinero y otras veces tan lejos?.
Quería muchas veces romperle el rostro y otras darle las gracias por permanecer aquí, con la tripulación y conmigo.
Empecé a detallar su rostro a medida que pasaba el tiempo, sus cejas extrañas, su cabello, su nariz... sus labios. Tenía una expresión angustiada en el rostro, así que pasé mis dedos sobre su frente húmeda para suavizar su expresión.
Al menos la fiebre había bajado luego de una casi interminable noche, ya casi sería de día. Mis dedos se frotaron un poco más sobre su frente y luego dieron a parar hasta sus labios hasta que estos se movieron.
-A..gua- dijo el cocinero con voz rasposa sin abrir los ojos, así que me levanté rápido a servirle un poco y darle sorbos.
- Cocinero ¿cómo te sientes?- le pregunté, pero no hubo respuesta, volví a tomar asiento mientras esperaba alguna otra reacción.
Me senté y no pude evitar pasar la mano por mi cara, antes de siquiera procesar lo que hacía pasé mi mano por mis labios y luego puse esos mismo dedos sobre los labios del cocinero.
Por un momento al darme cuenta de lo que hice me quedé en total silencio, se sentía como si al moverme o hacer ruido una burbuja explotaría y ese acto se sentía tan secreto que no quería arruinarlo. Se sentía como volar.
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Intuición y Habilidad (ZoSan) (ZoroxSanji)
FanfictionSanji y Zoro, dos nakamas han convivido durante mucho tiempo en su tripulación pero en donde ninguno se atreve a darle nombre a los sentimientos que se están formando entre ellos, paso a paso, avance tras avance ¿Ambos lograrán dar con el punto cla...