Capítulo IV

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POV Mariana

Al día siguiente

Desperté como cualquier otro día. Mi padre a mi lado esperando a que abriera los ojos, con la medicación lista, un vaso de agua y programando la silla de ruedas.

Esta vez todo era igual, solo que mi padre estaba sentando, con expresión de enojo mirándome fijamente.

Mariana: Porque me miras asi? - odiaba cuando hacia eso, y bueno, era siempre por mi comportamiento

Papá: Te dije que debías cambiar tu actitud - rodé los ojos, aun seguía con lo mismo

Mariana: Sigues con lo de anoche? - reí - Pfff, que pesado

Papá: Tu no sabes nada sobre Fernanda - su seriedad era demasiada, sabía que lo que diría a continuación sería para "reflexionar"

Mariana: Tu si? - desafíe

Papá: Quien crees que es Fernanda Pacheco? - se acomodo en el asiento

Mariana: Una especialista en personas especiales - respondí como una simple pregunta de exámen

Papá: Y? - preguntó

Mariana: Y? - repeti - Hay más? - dije burlona

Papá: Sabias que perdió a sus padres y hermanas hace algún tiempo y por eso trabaja desde entonces, en lo que le apasiona? - mi actitud de idiota sin importancia de la vida de los demás, cambió

Mariana: De que hablas? - puse atención a todo lo que salía de su boca

Papá: Su padre quedó en estado vegetal, en el accidente donde perdio a toda su familia, y bueno, eso es algo muy parecido a tu estado, pero no igual a lo que tienes. Y por eso ella ayuda a las personas con discapacidad - explicó a detalle

Mariana: Pero... - me interrumpió y siguió con lo suyo

Papá: Tu empatia ha sido pésima con ella - su rostro reflejaba decepción - Antes de juzgarla debes conocer y profundizar un poco sobre ella y su vida. Todos pasamos por momentos difíciles Mariana y te haz comportado como una adolescente

Mariana: Siento que ella haya pasado por algo similar, de verdad - me mostré poco empatica - pero no me interesa

Papá: Porque eres tan cruel? - colocó sus brazos sobre sus rodillas - Eres mi hija y por eso te amo, pero si llegas a amar a alguien no hagas lo que con la mayoría haces con las personas; causarles dolor con tu forma de evadir su vida provocandoles desesperación - diciendo esto salió de la habitación muy enfadado y con clara desilusión

A decir verdad nunca me había preocupado por saber tanto sobre mis asistentes, creía que ellas eran las unicas que debían saber todo sobre mi y ya está. Ahora entendía que nunca me había preocupado por su vida cotidiana o pasada y solo juzgaba por todo.

Después de unos minutos, volvió a entrar para darme la medicación, preparó la tina para cuando volviera Fercha, pudiese darme una ducha, y dejó todo listo para poder cambiarme de prendas.

Papá: Ella vendrá en unos minutos - revisó todo antes de salir - Debo irme - se paró frente a mi

Mariana: Lo siento - dije sin verle a los ojos, de cualquier forma, debía ser más amigable

Papá: No es conmigo - negó - Ya sabes con quien hacerlo - se acercó a mi frente y la besó - Te quiero

Mariana: Te quiero más - y asi salió de la habitación

AMOR PARALÍTICO  (Fercha y Mariana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora