[¡Segunda Temporada!]
El mundo diferente sigue girando con sus habitantes: Omegas, Betas y Alfas.
Aún teniendo conflictos entre si, ¿Qué clase de historia se podría desarrollar?.
Entre hilos y más hilos, el destino sigue teniendo la respuesta.
Nota:...
Advertencia: capítulo con insinuaciones y contenido contenido para mayores de edad, leer con cuidado ó evitar su lectura, gracias por su atención.
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--tres pastillas dentro--
Sou había salido hace unos minutos a sus clases, Mafumafu también quería salir, pero las reglas de la Universidad se lo impide y para evitar más problemas es que las obedecia al igual que los demás.
Cuando tu ciclo de celo iniciaba, debes estar cinco días encerrado.
Lo bueno de tener un compañero de cuarto es que te puede ayudar hasta que el ciclo termine y Sou fue muy amable al aceptar cuidarlo.
--cinco días..--
Se avecinaba días de aburrimiento, eso para él era seguro.
Se envolvió en sus sábanas, apoyo sus brazos en la almohada y empezó a leer.
Era simple, su instinto empezaría a pelear por salir, pero los supresores que había ingerido se lo iban a impedir, su cuerpo se iba a sentir algo cansado con algo de temperatura, sus feromonas saldrían sin control por un rato, después de esto, volverá a su estado normal y podría controlar su cuerpo libremente, sólo era cuestión de soportar.
--uh..--
Su cuerpo se empezó a sentir adormilado, mucho más de lo normal.
--¿Eh?--
Dejo el libro de lado y empezó a tomarse del vientre.
El sentimiento de pelea era mucho más fuerte al igual que el calor corporal.
--¿Q-Que?--
Su cuerpo cayó junto con las sábanas.
"¿Soraru-san?"
Su lobo empezó a aullar en su cabeza.
--e-estas loco, e-el no debe ven- ugh--mascullo.
"Soraru-san.."
--ba-basta--
Estaba siendo mas difícil de lo que era antes.
Abrió su cajón, volvió a tomar dos supresores.
Lo cual era algo riesgoso, el médico le recomendó sólo tres, el subir la cantidad puede causar anomalías en su cuerpo con el tiempo.
De alguna manera, se sintió algo liberado y ya no supo más cuando volvió a su cama a morder la almohada.
Su instinto logró salir mandandolo a dormir inconscientemente.
--Soraru-san..--murmuraba entre mordidas.
Sus feromonas fueron totalmente liberadas.
No se dio cuenta cuando Sou regresó, tampoco puso atención cuando le preguntó algo, sólo se percató cuando la puerta estaba abierta.
