La vida de una chica cristiana[✔]

Capítulo 06:"El chico raro de cabello azul'

Eran alrededor de las diez de la noche y estaba sentada en el mueble junto al peliazul. Llevábamos unas dos horas viendo algunas películas . La mesita delante de nosotros se encontraba llena de platos ya vacíos que habíamos devorado minutos antes ,mientras comentábamos detalles de la película . Mi madre había ido a visitar a Alice junto a Samuel ,antes de que Rei llegara. Centré mi vista en la pantalla y después de un buen rato todo se volvió oscuro.

Rei Brooklyn:
Sentí un peso sobre mi hombro y giré mi cabeza un poco. Sam se había quedado totalmente dormida. La arropé bien con la manta que yacía sobre sus piernas y una sonrisa tonta escapó de mis labios. Bajé un poco el volúmen de la televisión y seguí viéndola. Pasó aproximadamente una hora y la película acabó. Sam se removió un poco ocasionando que algunos mechones de su cabello cayeran sobre su rostro. Con sumo cuidado levanté mi mano y los aparté suavemente de su rostro. Un impulso me hizo querer tocar su cara pero justo cuando estuve a centímetros, la puerta se abrió y me puse de pie rápidamente provocando que ella despertara y me mirara confundida.

-¿Que hace el aquí? -preguntó Samuel con la mirada fija en su hermana.

Miré a Sam y ella frunció el ceño ligeramente sin entender la actitud de su hermano.

-Es mi amigo y ha venido a... -la interrumpió de golpe.

-¿Amigo? ¿Mamá sabe de esto? -Subió un poco la voz.

-Será mejor que me valla -dije agarrando mi chaqueta.

-No, espera -aguantó mi muñeca-¿Se puede saber que te pasa? -Miró a su hermano.

-Aléjate de el -demandó y yo me solté del agarre de Sam para caminar hacia la puerta.

Salí de la casa y sentí los pasos de ella detrás de mi.

-Rei espera -me giré -Lamento eso la verdad no se que le sucede -habló apenada y negué con la cabeza.

-Si fueras mi hermana también te querría lejos de alguien como yo -fijé mi vista en en un punto vacío del suelo .

Ella frunció el ceño y me incline para darle un beso en la mejilla y susurrarle un :hasta luego .Noté como sus mejillas se tiñeron de rojo al instante y sonreí ante eso.Caminé hasta subir a mi auto para ir directo a casa. Apenas llegué caminé a mi habitación dejándome caer en mi cama. Sentí mi móvil vibrar en el bolsillo de mi pantalón y lo saqué . Era una llamada de Estephanie, mi prima.

-¿Que quieres? -pregunté de mala gana.

-Que maneras de recibirme son esas primito -rodé los ojos y ella volvió a hablar -Tengo una cositas y necesito que te encargues de ellas.

Pensé en negarme rápidamente pero no pude.

-De acuerdo mañana hablamos -suspiré y deje caer el móvil a mi lado.

Estuve un rato con la vista fija en el blanco techo de mi habitación hasta que me quedé totalmente dormido.

Samantha Wesley :
Estaba tomando una ducha mientras pensaba en mi conversación con Samuel luego de que el peliazul se hubiese marchado.

-No te entiendo ¿Porque lo has tratado así? -me crucé de brazos y el se pasó una mano por el pelo frustrado.

-Solo no te acerques a él Samantha-habló completamente serio y eso me hizo preocuparme.

-Pero... -me interrumpió.

-Nada de peros, solo aléjate de él o hablaré con mamá -me dió la espalda y salió a lo que supongo halla sido la casa de Alice.

Suspiré y recogí las cosas que habíamos utilizado y se encontraban esparcidas en la mesita delante de la televisión . Apagué la misma y subí a darme una buena ducha.

Salí de mis pensamientos y me coloqué el pijama. Tomé mi teléfono y marqué el número de Alice , la cual me respondió casi enseguida.

-Sam ¿porqué no has venido? -preguntó con tono triste.

-Lo siento había hecho planes con un amigo -me disculpé un poco apenada.

-¿Que amigo? -se escuchó confundida y yo suspiré.

-Rei-murmuré.

-¿Quien es ese? -reí un poco.

-El chico raro de cabello azul-aclaré y la escuche decir un simple :Ah.

-Sam no es por nada pero... -sabía lo que venía así que la interrumpí rápidamente.

-No es como piensan, él es.... es un buen chico -me deje caer en la cama jugueteando con Somi,que estaba sobre mi.

-Si tú lo dices -suspiró y la pequeña gatita maulló.

Estuvimos hablando de cosas triviales un buen rato y luego me fui a dormir.

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Había pasado gran parte de la mañana distraída en clases. Mi mente divagaba en aquella conversación con Samuel y su afán por alejarme del peliazul. Solté un largo suspiró al escuchar el sonido del timbre, indicando el comienzo del recreo. Me puse de pie y caminé hacia el árbol donde suelo sentarme en los días como hoy, cuando Alice no viene a la escuela porque debe asistir al hospital para sus chequeos semanales. Caminé con la vista fija en mis pies hasta el gran roble para luego dejarme caer en el suelo y apoyar la espalda en la madera. Abrí el libro que llevaba en las manos y me dispuse a leerlo, cosa que no pude. Me rendí y levante la vista encontrándome una cabellera azul que captó toda mi intención.

-¡Rei!-grité agitando mi mano en un impulso y el se giró a verme.

Varios ojos se pasaron sobre mi y bajé la mano un tanto avergonzada.

-Hola-saludó y asentí indicándole que podía sentarse.

-Creo que tenemos que hablar-sonó más serio de lo que pretendía y lo escuché suspirar.

-Esta bien si después de esto te quieres alejar completamente de mi -incliné mi cabeza un poco en señal de que podía comenzar a hablar.