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Tres Meses, Nuevos Recuerdos
Tres meses pasaron desde que el Señor Tenebroso desapareció y el mundo volvió a la normalidad.
La mayoría de los mortifagos habían sido detenidos y enviados a Azkaban, algunos que otros, como Lucius Malfoy, mintieron para estar cercas de sus familias. Este se había enterado que Regulus y Emmily seguían con vida y en una ocasión se los encontraron, Regulus por un principio pensó que los atacaría, pero en vez de eso solos los ignoro, así como Narcissa, que le dijo que no quería saber nada de él por ser un traidor, algo que a Regulus no le afecto, pues no le importaba perder contacto con ellos.
Todos los magos y brujas se enteraron de cómo Harry Potter, teniendo tan solo un año de edad, había logrado derrotar a el mago tenebroso más poderoso de los tiempos y, no sólo él, sino también sus padres habían sobrevivido a la maldición asesina. Muchos querían conocer en persona a Harry, pero Sirius y Emmily no lo permitían, pues era solo un niño y no querían que estuviera bajo presión a tan corta edad.
En aquellos tres meses, James y Lily no habían despertado, seguían en coma y los medimagos seguían preguntándose como es que habían sobrevivido a aquel ataque, pero nadie tenía una respuesta a eso, nadie más que Emmily quien no dudo en decírselo a los demás.
Aquella amiga que su madre hizo en África le había enseñado una magia diferente que sólo se enseñaba en aquel país, aquel hechizo protegía a la persona a la que se le aplicaba, la madre de Emmily lo había utilizado en la castaña cuando era niña y Emmily había recurrido a ese hechizo para utilizarlo en Regulus, James, Lily, Sirius y hasta Remus, inclusive con sus amigos lo había utilizado, y por supuesto, no dudo en utilizarlo también con Leo, prefería prevenir que lamentar, y ahora agradecía haberlo utilizado en su primo y la pelirroja.
En aquellos tres meses habían pasado muchas cosas.
Primero, Sirius se enteró que Marlene estaba embarazada, el pelinegro no sabía que sentir, si felicidad, si miedo, si preocupación, quizás sentía todo a la vez. Esa acumulación de emociones le había abrumado y, a falta de James y Lily para hablar y lo calmaran, fue con su hermano y cuñada para hablar.
Marlene también había ido junto a Sirius para hablar y calmarse y pasaron toda la tarde hablando. Regulus y Emmily contestaban a las preguntas anticipadas de los futuros padres.
Después de eso, Regulus le había pedido a Sirius que los llevara con Andrómeda, quería disculparse con ella por todo lo que le había dicho y quería ver si podían tener de nuevo aquella relación que tenían antes.
