2. El crimen.

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11: 43 am, practica final de la universidad Grand Canyon.

Arizona, Wickenburg.

Alaska.

Bosque.

Ya estaba aquí debido a la practica casi final en mi carrera, todo parecía tétrico en este lugar.

Un vacío notable se hizo presente en mi pecho, no... no era un vacío, era mas bien un terrible apretón, me sentía asfixiada. Levante mi mirada para visualizar las cintas las cuales rodeaban todo el lugar, una escena del crimen. Una verdadera escena. 

Los crímenes aquí son por riñas o accidentes, por ende que fuese en un bosque dejaba mas que pensar.  Trague saliva y junto a ello mis nervios, no sirve de nada tenerlos Alaska. Baje del autobús mirando solo el rededor, no podía ver mas allá. La voz del instructor nos saco a todos de la duda, dirigí mi mirada a el y este solo daba las instrucciones. Sangre. Ese olor tan característico y profundo inundada mis fosas nasales, podía sentirlo incluso en mi boca, asqueroso, muy asqueroso. 

Tome mi maletín con todos mis instrumentos de protección e implementos de investigación. Mis pies iban viajando hacia la escena del crimen, viendo policías y algunos agentes que impedían que turistas se adentraran al bosque. Cuando finalmente pudimos ver esto, una de las chicas quito su tapabocas y vomito. La entendía.

— Mujer desconocida con notables marcas de tortura, sus partes están regadas en ciertos puntos del bosque. Pensamos que el asesino dejo en ello un mensaje o un punto característico.  Los de fotografía vayan a tomar las posturas de las partes, investigación vienen conmigo. — El hombre mayor nos indico lo básico para iniciar, la prueba es resolver y identificar.

Seguimos al hombre siendo divididos por sectores, así podíamos lograr una mejor recolección de pruebas. Cuando por fin me hallaba en mi parte, vi el torso de la mujer... mas bien la mitad de su torso. Deje mi maletín en el suelo para concentrar mi mente en esa parte. Como ya tenia mi uniforme, toque con cuidado la parte de su seno viendo que tenia algo escrito pero no estaba completo. Debía estar en la otra parte, quizás el mensaje estaba en en las partes desmembradas. 

¿Entonces por que se tomo el descaro de dividirlo colgados en cada árbol? 

El idioma en el que estaba escrito, no podía leerse. O quizás eran símbolos, pero algo en mi me decía que algo quería decirnos. Las interrogantes son importantes, pero solo pienso, ¿Qué tenias en la cabeza, asesino? ¿Odio? ¿Quizás algo de culpa te adorna en estos momentos? 

Una mano toco mi hombro y el susto horrendo que me lleve encima hizo que casi me meara. Me gire de mala gana y  observe quien me había tocado. Respire con intranquilidad viendo a Annibal, ¿Qué hacia el aquí si no estaba en la lista? ¿Esta siguiéndome? No, tiene el uniforme. Quizás lo trajeron de otra sección, si. 

— Conejita blanca, ¿Cómo estas? te ves exaltada. — Dijo finalmente pasándome por el lado y viendo con cuidado la escena del crimen. Se veía concentrado pero tan relajado, la oscuridad en sus ojos una vez mas me hizo tratar de comprenderlos, vacío. 

— Fue cruel. — Quite mi vista de el y mire a la joven que estaba frente a nosotros, había algo inexplicable en esto,

El silencio me hizo volver a mirarlo, buscando una respuesta. Un suspiro salió de el, sacando unas pinzas con un bisturí, si el era estudiante no podía manipular el cadaver o la evidencia. Con cuidado sus grandes manos entrando en el cuerpo de la chica y saco un flor roja, no podía identificar bien cual era y como es que estaba dentro de ella. 

— La cabeza esta arreglada, incluso hay maquillaje sutil. Sus uñas pintadas y las dos partes del torso no tienen órganos, solo dos flores. Había un vestido frente a... la cabeza. El asesino sabia muy bien lo que hacia, es claro que el mensaje es para una mujer. — Abrí los ojos sorprendida, yo no abría sacado conclusiones tan rápidas. 

Una tormentosa oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora