Capítulo 9: El Hombre de los Ojos Bonitos
La mañana siguiente consistió en una dura despedida de mis padres. Yo era una niña de mami y papi y se me hacía duro irme otra vez. Los iba extrañar tanto. Hasta iba extrañar a Channy tambien. Ya me había encariñado con esa bola de pelos. Me despedí de mis padres y de Channy y me dirijí afuera donde Ana me estaba esperando en un taxi. Mis padres insistieron en llevarnos al aeropuerto pero yo los convencí de lo contrario. No lo veía necesario. Al entrar al taxi Ana me saludó con un beso en la mejilla.
"Lista para regresar a campús?" me preguntó mientras el taxista ya estaba manejando hacía el aeropuerto.
"Si claro. No hay nada que me gusta mas que levantarme temprano, comer comida rápida, quedarme de noche estudiando y escucharte roncar" le respondí, sacasticamente obvio.
" Yo no ronco idiota" se defendió con un color rosado en las mejillas de la verguenza.
"Claro que si. Como caballo y sin mencionar los gases..." no me dejó terminar la oración porque ya tenía su mano sobre mi boca. Digamos que Ana es una diva. Siempre anda elegante, con zapatos altos, bien maquillada. Y para ella es "desagradable" hablar de estas cosas y blah blah blah.
"Eres una desgraciada" me dijo entre risas.
"Pero me amas" le respondí y me golpió en las costillas a puño cerrado, ouch. Podrá ser muy diva pero esta chica puede pegar, y duro.
Despues de unos minutos llegamos al aeropuerto. Eran apenas las 7am y nuestro vuelo salía hasta dentro de una hora. Ana y yo decidimos pasar por seguridad de una vez para ya salir de eso. Ya cuando termnaron de revisar nuestras maletas nos permitieron pasar adelante a la sala. Era como una sala de espera pero era enorme. Mandamos nuestras maletas a donde sea que vallan las maletas despues de colocarlas en esas fajas eléctricas. Hablando encerio, hacia donde irán las maletas despues de ponerlas en las fajas? Quizás si pido permiso me dejen montarme en las fajas y ser transportada como una maleta. Eso sería increible. Sería como en Toy Story. Lo pondre en mi lista de cosas que hacer antes de morir.
"Tierra llamando a Kiara, tierra llamando a Kiara!" y por supuesto que Ana tuvo que interrumpir mis pensamientos. "Pareces idiota viendo hacia la nada" me dijo y me causo que me ríera.
Nos acomodamos en unos asientos en la sala que estaban desocupados. Ana y yo nos pusimos a jugar veo veo.
"Veo veo algoooo.... Azúl" le dije a Ana.
"Por la última vez Kiara, el piso" me dijo ya irritada porque era la quinta vez que le decía lo mismo. Lo hacía solo para verla enojada. Soy mala, lo sé.
"Acompañeme a buscar un baño. Tengo que desocupar el tanque antes de montarme en el avión" me dijo Ana levantandose de su asiento.
Ana era intolerante a los espacios pequeños y los baños de avión son exajeradamente pequeños. Por cierto, cuando uno baja la palanca del servicio, hacia donde va todos los desechos? Será que los liberan en el aire? Significa que tarde o temprano los desechos tienen que caer. Y si le cae a alguien que esté caminando por la calle? Eso seía asqueroso.
Decidí preguntarle ahora en el avión a una azafata para aclarar mis dudas. Caminamos bastante buscando los baños cuando por fin encontramos unos cerca de la salida del edificio donde se veía gente constantemente entrando y saliendo como maniáticos. Los baños estaban llenos entonces dejé que Ana fuera sola hcer fila mientras que yo la esperaba arrecostada a la pared viendo gente pasar. Despues de aburrirme de ver personas, saqué me teléfono a revisar Facebook.
Chismes.
Chismes.
Más chismes.
Uuugh Facebook se ah vuelto un lugar tan dramático.
Levanté la mirada a ver a mi alrededor y ví a un muchacho arrecostado a la pared contraria a la mía. Dejeme decirles que era el hombre mas perfecto que eh visto en mi vida. Era alto, de pelo castaño que le apuntaba a todas direcciones. Usaba una camiseta de tirantes blanca con un chaleco negro por encima. Aún con el chaleco podría ver claramente su abdomen tonificado. Sus brazos eran musculosos y estaban tatuados con diferentes diseños. Usaba jeans apretados y dejeme decirles que sus jeans apretaban en todos los lugares correctos (no hagan como si no supieran a que me refiero). Este hombre fijo viene saliendo de una revista porque no encuentro otra explicación. Estaba solo arrecostado a la pared rodeado de bolsas, perdído en pensamiento. Quizás notó que lo estaba observando porque me volvió a ver y me señaló que fuera hacía donde él con la mano.
"Oye tu, ven acá" gritó. Su voz era melodía para mis oídos. Voltié a mirar hacía atrás a ver quien era era el afortunado a que llamaba pero no ví a nadie mirando a su dirección. Será a mi? me pensé. Como si me leyera el pensamiento volvió a gritar. "Si tu muchacha. Ven acá". Me desplazé hacía donde estaba él un poco intimidada. Quien no lo va estar ante tanta belleza. Ya de cerca pude observar sus características faciales. Su cara desmentía la imagén de chico malo que decía su cuerpo. Su cara se veía suave, pero tenía una barbilla muy bien pronunciada. Se le notaba marcas de estres en la frente. Quizás tiene un trabajo de mucha presión. Sus ojos eran verdes pero oscuros. Cualquiera se podría perder en esos ojos. Sus labios eran el perfecto tono de rosado, y en ese momento todo lo que quería hacer era morder esos labios. Soy tan intensa, lo se lo se. Conrole tus estúpidas hormonas, me pensé.
"Hola. Me llamo Mark. Me estaba preguntando si usted podría ayudarme a cargar estas bolsas. Mi abuela me está esperando en el carro y no quiero hacerla esperar mas" me dijo. Con su voz angelical.
"Eeeeh... si... claro" le respondí torpemente. Voltié a ver hacía los baños y ví que Ana aún no ah salido entonces agarré las 3 bolsas que sobraban mientras Mark llevaba las demás.
"Por cierto, como te llamas?" me preguntó cuando ibamos de camino al estacionamiento.
"Soy Kiara" le respondí.
"Es un nombre muy lindo" me dijo que me causó que me sonrojara. No me culpen no es todo el tiempo que un hombre tan guapo como él te dice un cumplido.
Ya llegamos a un carro que al parecer era el de Mark porque de una vez abrio la parte de atrás. Bueno no era exactamente un carro, era un mini van con vidrios polarizados, de esos que solo tienen ventanas adelante. No es exactamente el carro que yo usaría para transportar a mi abuela, pero bueno quien soy yo para juzgar. Meintras Mark metía las bolsas yo miraba hacía atrás, observando cualqier señal de Ana que ya debe de haber salido de los baños y me debe estar buscando. Cuando voltié de nuevo al carro, noté una figura detrás de las bolsas. Cuando ví mejor, ya la imagén estaba clara. Era una muchacha acostada amarrada de pies y manos. Estaba en shock, y mis piernas no me respondían. Lo único que se me ocurrió en ese mometo fue sacar mi celular y llamar al 911 con cuidado que Mark no me viera. De repente Mark me arrebató el teléfono antes de poder ejecutar la llamada y lo tiró hacía la acera. Lo siguiente pasó demasiado rápido. Mark se colocó atrás mío envolviendo su brazo en mi cuello de manera que no podía moverme. Con el otro brazo trajo un paño blanco cubriendo mi nariz y boca.Traté de inalar aire atravez del paño. Todo lo demás se volvió borroso. Lo último que ví, fue otro hombre acercandose y despues, todo se volvío negro.
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El Secuestro
Teen FictionSu vida era genial. Estaba rodeada por personas que la amaban entre ellos sus papás, su novio y su mejor amiga. Pero su vida cambio dramáticamente cuando fue secuestrada por unos hombres pertenecientes a un grupo peligroso de narco. Su vida se volvi...