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Capítulo 13- James
***Una semana despúes***
Habían pasado 9 días desde el día que nos montamos en el barco. Nos tenían como sirvientas a Samantha y a mi. Todos los días nos pondrían hacer diversas tareas tales como limpiar los pisos, lavar los trastos, servir comida, etc. Nos entregaron 3 camisas blancas y 2 pantalones de tela para que nos estuvieramos cambiando ya que teníamos rato de que no nos bañabamos. Fue hace unos días limpiando los pasillos que me dí cuenta que habían unos 10 hombres abordo. Yo intentaba de evitar a toda costa toparme con ninguno de ellos porque temía por mi vida. A veces en las noches se escuchaba risas y gritos de los hombres, yo pensaba que quizás estaban borrachos.
Ahora despúes de 9 días en el barco estabamos trabajando en la cocina. El chef del barco era simpático. Siempre trataba de hacer conversación con Samantha y yo pero nos limitabamos a hablar solo cuando era necesario. Yo estaba picando olores y Samantha estaba lavando los trastos que se iban ensuciando.
"Chicas algunas puede bajar por unas papas por favor" habló Mario, el Chef.
"Yo voy" dije removiendo el delantal que nos hacían utilizar. Tomé el pequeño balde que había en el piso y bajé hasta el "sótano" que tenía el barco donde guardaban papas, arroz, maiz y diversas comidas. Un día por pura curiosidad revisé unas cajas que también habían allí y encontre que había mucho licor en ellas. Localizé el saco de papas y empecé a hechar papas en el balde. Cuando iba por papa numero 7 pasos acrcandose a mi. Me levanté en un brinco y me voltié hacia el sonido.
"Te asusté princesa?" Habló ua voz. La voz provenía de un hombre grueso, calvo de tal vez unos 25 o 30 años. Tenía una expresión de burla mientras recorría mi cuerpo con los ojos. "Solo venía a buscar un tequila pero al parecer hay algo mejor almacenado".
Decidí agarrar el balde con las 7 papas y dirigirme hacía la salída. Si hacían falta papas regresaría cuando este hombre no esté. Al caminar hacia la puerta sentí una mano jalarme del brazo.
"Oye, no te han enseñado que es de mala educación no presentarse a las personas que recién conoces?" me preguntó. Yo solo me quedé allí aterrada. Intenté liberarme de su agarre pero era inútil, me tenía bien sujetada. "Soy James" volvió hablar. "Ya que tu no quieres hablarme te llamaré princesa. No importa que te diga princesa verdad?" me susurró y pude inhalar un fuerte olor a licor de su aliento.
"Suelteme" le supliqué, mi voz saliendo como el chillido de un ratón.
"Ay mire, la princesa habla. Vamos a ver que mas puedes hacer con esa boca". Sus palabras mandaron escalofrios por todo mi cuerpo.
James se acercó mas a mi, poniendo un brazo en mi espalda para mantenerme quieta. Intenté separarme pero eso solo hizo que él me acercara mas a su cuerpo haciendo que el balde que estaba sosteniendo se cayera al piso. Sin pensarlo contecté mi rodilla derecha con su interpierna lo mas fuerte que me fue posible. Él imediátamente aflojó su agarre en mi espalda y aproveché ese momento para hacer un escape hacia la puerta dejando el hombre atrás que estaba gritando todas las malas palabras existentes.
Ya cuando agarré la manilla de la puerta sentí 2 manos jalarme bruscamente del pelo y fue con tanta fuerza que me jaló que caí para atrás golpiándome fuertemente la cabeza en el proceso. La vista se me volvió nublosa por unos segundos y mi cabeza empezaba dar vueltas. Cuando me recuperé, James estaba parado justo frente de mi. Con la poquita fuerza que me quedaba logré arrastrarme unos centímetros para atrás pero era inútil, James me seguía tomando pequeños pasos hacia mi.
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El Secuestro
Teen FictionSu vida era genial. Estaba rodeada por personas que la amaban entre ellos sus papás, su novio y su mejor amiga. Pero su vida cambio dramáticamente cuando fue secuestrada por unos hombres pertenecientes a un grupo peligroso de narco. Su vida se volvi...