Dulce venganza

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Royal Woods

En un campamento en medio del bosque, varios sujetos con armas disparaban contra unos estudiantes que en realidad, estaban controlados por los simbiontes que descuartizaban a todo aquel que lo amenazaban.
A los pocos metros un grupo llegó trayendo entre sus manos armas diferentes, estando delante de varios simbiontes estos disparan unas ondas sonicas; haciendo que los demás simbiontes se retorcieran y chillarán para después volverse en un estado de masa líquida, dejando libres a los estudiantes que todavía no comprenden que es lo que a pasado. En eso los sujetos apuntan hacia los chicos para después eliminarlos, en eso llega Gideon acompañado de dos sujetos.

— No quiero que haya evidencia. Asegúrense que todos estén muertos.

Tras esto los demás hombres atrapan a los simbiontes en tubos de contención, llevándolos y puestos en un camión mientras se llevaban los cuerpos de los alumnos y borraban todas las pista y evidencia.
A los pocos minutos llega el Dr doofenshmirtz estando al lado de Gideon que traía una tablet revisando la cantidad de simbiontes.

— Creo que tenemos un problema.

— ¿Ahora cual es el problema?

— Según la tablet donde están todos los simbiontes registrados, hay once de los doce simbiontes que están en el camión.

— Pero entonces... ¿Donde esta el otro?

En las cercanías del bosque, un grupo de chicos se estaban divirtiendo en altas horas de la noche. Estos bebían y fumaban dentro de una cancha de basquetbol. Se podría decir que hasta vieron a un elefante como un jugador profesional.

- Cielos viejo, esto si es ¡alucinante!

- ¡Uuh! Me dan ganas de bailar una buena hermosura.

- Viejo acabo de ver un anciano vestido de monja.

- ¿Sabes que seria alucinante? ¡Ver algo terrorífico! ¡Como un asesino matando unas viejas o un muerto andando en motocicleta saludando!

- Hombre eso no existe. Esas típicas leyendas urbanas pasaron de moda, yo una vez me encontré con un payaso en el parque y resultó ser un viejo empapado de pintura, no lo volví ver jamas después de que lo viole.

- ¿Fue excitante?

— Uff ¡Se sintió tan bien! ¡Que me vine cinco veces dentro!

- Como decía, esa porquería no existe, solo pasa en las películas.

Después de ese comentario, un chico que estaba en un estado de ebriedad en exceso cayo al suelo y, soltando su botella que giró hacia adelante siendo detenido por un zapato negro.
De la oscuridad de la noche se asomó una chica pelinegro con uniforme escolar, quien era en realidad Kat en un estado sucio y desaliñada con algunas hojas en su cabello y una expresión indiferente.
Al verla bien, para los chicos era bellísima. Incluso uno de ellos s le acercó.

— Hey linda, a donde vas con esa carita ¿eh?

— . . .

— Por qué no– ve que la mano de ella penetro su cuello.

— ... Cielos hijo...

Los muchachos vieron como su colega se desangraba en el suelo, voltearon a ver la chica que solo se quedaba ahí quieta esperando.

— Mi turno, ven aquí fantasma del bosque. Te voy a golpear con mi manos de acero.

El chico se dirigió hacia Kat y cuando lanzó su golpe fue interceptado por la mano de Kat, que en su otra mano libre se formó un cuchillo largo y de un corte el cuerpo del aquel chico fue dividido a la mitad.

the loud house:venomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora