Dahyun se sentía en una doble vida.
Durante el día, en sus pausas para el almuerzo, Tzuyu siempre llegaba a hacerle compañía y pasaban buen rato juntas. Decidió no involucrar su trabajo en las conversaciones, pero no sería necesario, escuchar a Tzuyu hablar era suficiente para entender la forma en que veía la vida, y realmente no quería decepcionarla.
Por la noche, Chaeyoung siempre la invitaría al bar a distraerse, y si la pálida mujer se negaba a causa de sus responsabilidades, la contraria era capaz de llevar la diversión hasta su casa. Inclusive si solo iba a la hora de la cena a estar con ella y hacerla reir, era suficiente. Aunque, como con Tzuyu, simplemente evitó mencionar algo más del trabajo, la postura de Chaeyoung es notable.
Pero no es como que no disfrute el cambio que tomó su vida, estar con Tzuyu es sentirse constantemente bajo el riesgo de hacer algo mal y quedar como una mala persona, pero su compañía y ternura durante los almuerzos es algo que necesitaba hace demasiado y no quiere deshechar. Chaeyoung la somete a reducir sus horas de sueño y sentirse muy cansada a la mañana siguiente, pero desde que alguien la espera a la entrada de su casa todos los días, siente que el calor ha vuelto a su hogar.
Sin embargo, el haber vivido en soledad tanto tiempo, la hizo añorar los momentos donde no debe amoldarse a alguien y es solo ella con sus pensamientos. Era fin de semana, salió a dar un paseo por el parque cerca de su casa, para pensar un poco sobre los acontecimientos ocurridos. Se atrapa recordando las visitas de las cuatro ángeles, aún se cuestiona si fue solo un sueño producido por su propia concienia y egoismo, o si fue una experiencia real. El caso tampoco abandona su cabeza, se supone que es su día de descanso, pero el no tener una solución no la deja en paz. Y por último, aquellas dos chicas, ¿Jugaba con ellas? Quiere creer que no, pues mientras ellas no especificaran sus intenciones, seguían siendo amigas ¿No? La realidad es que no quiere perder a ninguna por la otra.
— Ja, que conveniente — Habló con sarcasmo Mina.
— Supongo que esto se extenderá — Jihyo volvió a su trono.
Oh, pero las cosas no serían tan simples para la abogada, cometió el pequeño deacuido de contarle a Tzuyu de su pequeño plan solitario, sin explicar la parte de solitario, conmoviendo el corazón de la más alta quien de inmediato pensó que sería una buena idea darle compañía, después de todo, su vida gira en torno a Dahyun. Y por parte de Chaeyoung, la verdad ni siquiera sabía de aquel plan, solo iría a la casa de la abogada y se forzaría a entrar y pasar tiempo con ella.
Y el destino, que Jihyo y Mina permitieron sea aleatorio, las llevó a reunirse las tres en el lugar.
Pero Chaeyoung era la más impulsiva.
— ¡Hey! ¡Dahyun! — Llamó su atención mientras se acercaba.
Tzuyu, a unos metros y luego de escuchar aquel nombre, volteó para toparse con la tatuada chica acercandose a la abogada; presionó sus puños pues todo su ser rechazó aquella presencia de inmediato, el instinto de protección intensificandose y sus pies se movían por sí solos hasta el lugar.
— H-Hola, Chaeng — Dahyun sonrió incómoda — ¿Qué te trae por aquí?
— Quería sorprenderte — Sonrió de lado.
— Dahyun, hola — Tzuyu hizo presencia.
Y la pobre humana comenzó a sonrojarse producto de los nervios, ambas chicas se veían la una a la otra de manera desafiante, olvidando la presencia de ella por un momento.
Chaeyoung tuvo el mismo sentimiento, su cuerpo rechazó instantaneamente la presencia de Tzuyu y solo quería apartarla de quien le gusta, aunque la alta chica no pensaba muy distinto.
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Shades of Gray - Dahtzu / Dubchaeng
FanfictionLa vida es una escala de grises. Pero la Diosas son incapaces de notarlo, por lo que Dahyun será la escogida para experimentar. Ella solo quiere hacer lo correcto. ▪︎NO se permiten adaptaciones ▪︎Inspirado en la mitología griega y la idiología del y...