Adrianette otra historia

Capitulo 8

Marinette, Nathaniel y Juleka, Luka se había ido a su casa, estaban entrando a la escuela mientras conversaban de forma casual casualmente :v

Todo parecía normal y relajado, estaban a punto de entrar a su salón cuando de repente...

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¡Adrien Salvaje Aparece!

Casi literalmente. El chico había llegado corriendo desde la entrada de la escuela, su cabello estaba alborotado al igual que su ropa, su rostro se veía adormilado y con un hilo de baba en su mejilla, uno de sus zapatos era diferente al otro y su mochila estaba abierta y parecía a punto de vomitar unos cuantos cuadernos.

Además de que había llegado gritando a esconderse detrás de Marinette mientras la sujetaba de los hombros.

—¡Esa cosa quería matarme! —Señalo hacia el frente.

Los presentes voltearon su vista a la dirección señalada y vieron al guardia de la escuela corriendo hacia ellos.

—¿Tan miedoso eres? —Pregunto Marinette con irritación volteando a verlo.

—¡Sí! —Grito Adrien en respuesta— ¡Cuando alguien quiere matarte te da miedo!

—¡Tu!

—¡Wah!

—¡Oye!

—¡Chicos!

El guardia había visto a Adrien y empezaba a dirigirse a el, Adrien, asustado, se agachó más tras la espalda de Marinette aún sujetándola de los hombros haciendo que por consecuencia ella cayera al piso junto al chico.

Juleka y Nathaniel los ayudaron a levantarse y el guardia aprovecho la distracción para jalar a Adrien por detrás de su chaqueta.

—¡No me mate!, ¡Soy muy joven!, ¡Prometo ser una mejor persona si no lo hace!, ¡Cuídate a los animales, me llevaré con papá, dejaré de molestar a las chicas y haré todas esas típicas cosas de hippies! —Exclamo Adrien con los ojos cerrados. Llamando aún más la atención de las personas  a su al rededor.

—¿De que hablas?, No pienso matarte. —Dijo el guardia observándolo confundido.

—Com todo lo bueno que dijo que iba a hacer, yo no le hubiera dicho eso —Murmuro Marinette. Nathaniel a su lado la vio de reojo.

—¿Entonces porque me perseguía? —Pregunto Adrien todo inocente.

—Por la forma en la que estas... ¿Arreglado? —Señalo el cuerpo completo del rubio, desde el despeinado cabello hasta los zapatos, con las trenzas sueltas, de diferente color.

—Mejor entren chicos, díganle a la profesora que Adrien y yo entraremos tarde a clases por... Problemas —Observo la apariencia del chico. Al parecer la mochila había cedido desde hacía un rato abriéndose un poco más y vomitando los pocos cuadernos que tenía adentro.

—¿No quieres ayuda? —Ofrecio Juleka.

—No hace falta, no los puedo retrasar más —Sonrió apenada.

—No es ningún problema Marinette —Le sonrió Nathaniel.

—No te preocupes Naty, de todos modos es mi trabajo.

Ambos adolescentes frente a ella se miraron antes de hacerle caso a la chica y entrar al salón.

—Muy bien —Marinette suspiro y se dió la vuelta— Disculpe, —Interrumpio el regaño que el guardia le estaba dando a Adrien— Yo lo ayudaré a arreglarse, no se volverá a repetir.