𝐌𝐞𝐧𝐭𝐢𝐫𝐚 - 𝐋𝐮𝐜𝐚 𝐱 𝐀𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭𝐨.

Capítulo 1 - ¿Por qué?

Luego de mucho tiempo conviviendo con Luca, se dio cuenta de que este empezaba a atraerle. Lo veía de una forma diferente, se mantenía contento y energético cuando se encontraba con Luca, y no podía evitar sonreír o sonrojarse de forma involuntaria cuando el menor lo miraba, o cuando hacían alguna actividad juntos. Alberto consideraba que Luca era esa persona, que al tenerla contigo, jamás podías sentirte mal. Luca había ayudado de una forma muy positiva a Alberto en su vida diaria, le había enseñado a ser menos impulsivo, y a ser él sin importarle ningún tipo de opinión. Alberto consideraba que Luca era ese destello de luz, entre tanta oscuridad.

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Alberto y Luca últimamente eran extremadamente unidos, se veían todos los días, y se pasaban la mayor parte del día jugando, hablando, o aventurando la isla de Portoroso. A veces iban por un helado, o a enseñar a nadar profesionalmente a los jóvenes.

-- ¡Hola Alberto! -- saludó feliz y radiante Luca, dándole la sonrisa más sincera a su querido amigo. -- ¿Qué tal? -- continuo, acercándose al muelle donde Alberto se encontraba sentado, observando el mar. 

-- Hey, Luca, no te veía desde ayer por la mañana, estoy bien, ¿y tú? -- Volteó rápidamente, sonriendo con un brillo en sus ojos.

-- Muy bien, gracias. Oh, y lo siento por no haber estado por aquí, estaba estudiando un libro sobre planetas con Giulia. -- dijo tímidamente, al sentir la mirada de Alberto observarlo fijamente. Acortó la distancia, y se sentó justo al lado del anterior mencionado. -- Adoro la frescura y tranquilidad que emite observar el mar. Me hace sentir muy sereno. ¿Qué sientes tú al ver el mar?. -- dijo cariñosamente y con ese tono tan dulce Luca, mirando a los ojos a Alberto.

-- Siento paz, mucha paz -- sonrió, y juntó su mirada con la de Luca. Ambos se veían fijamente, cada pequeño detalle de sus ojos, cada pequeña luz. Alberto se sonrojo, nunca había tenido contacto visual con Luca durante tanto tiempo. Hubo un pequeño silencio, hasta que Luca habló.

-- ¿Sabes?, el otro día, cuando estaba con Giulia, me habló sobre que unos amigos de una isla un poco lejos de esta, habían empezado a salir, y que hacían muestras desagradables de su amor. Como besarse, abrazarse, y más... ¿Por qué las personas hacen eso? -- Dijo Luca, viendo pensativo el agua azul y resplandeciente. Tenía esa duda desde la noche anterior, cuando Giulia mientras estudiaban, se lo comentó.

-- hmm... La verdad, no sé claramente, pero quizás es porque se aman mucho, y porque están enamorados y quieren demostrárselo el uno al otro -- dijo un poco nervioso Alberto, ya que hablar sobre este tema lo incomodaba (teniendo en cuenta, que estaba enamorado de Luca).

-- ¿Qué sientes al estar enamorado? -- dijo inocente y dulcemente Luca, acercándose más a su amigo. Mientras que jugaba con sus manitas.

-- No sé... Supongo que... -- quería hablar, pero sintió su cara arder. -- Supongo que, se siente un sentimiento muy cálido y bonito cuando ves a esa persona, sientes que, te hace muy feliz, y que siempre quieres estar con el o ella... -- Lo dijo sin más, estaba muy nervioso aunque no lo demostraría con tanta facilidad. Miraba a Luca fijamente, y cada vez su sonrojo era más visible.

-- Wow, al parecer, has estado enamorado alguna vez. Dime, ¿qué tal?, ¿quién es esa persona?, ¿Giulia? -- Dijo alegre y curioso Luca, colocándose al frente de Alberto para poder observar su mirada con más profundidad.

-- Sí, me he enamorado de alguien, y no, claramente no es Giulia. -- Dijo evitando el contacto visual, tomando alguna piedra o flor que se encontrará cerca para disimular.

-- ¡Qué bonito, Alberto!, ¡Estoy tan feliz!, ¿Quién es? -- dijo Luca emocionado abrazando a Alberto, quien se quedó estático, y solamente correspondió el abrazo hundiendo su cabeza en el cuello de Luca. ¿Ahora qué haría?,  ¿qué le diría?, si no se lo dice, Luca pensaría que no confía en el, y si se lo dice, Luca sabrá que está enamorado de él. Su mente estaba en blanco hasta que...

-- Una chica hermosa y amable de por aquí, se llevo mi corazón como si se tratase de un robo -- dijo Alberto, separándose del abrazo. Sí, había elegido mentir. Lo dijo con un aire de grandeza para disimular como se encontraba.

-- ¡Quiero conocerla, vamos! -- dijo Luca levantándose. No quería admitirlo, porque la idea le parecía egoísta, pero se sentía un poco mal. Esa sensación de que algo que hubieras deseado no pudiera ser así, lo carcomia. Y no entendía el porqué, ya que era su mejor amigo, y debía alegrarse de que hubiera conseguido a alguien, pero... ¿Por qué no era así?,  ¿por qué no estaba tan feliz como se esperaba?, ¿por qué sentía que Alberto no lo quería, cuando solamente había dicho que le gustaba una chica?, ¿por qué?, ¿por qué se sentía mal?.

-- Oh, ehm, sí, algún día te la presentaré. Ahora mismo se encuentra un poco mal, esta enferma -- Dijo afirmando, y observando a Luca.

No sabía que esta mentira iría tan lejos.