𝐓𝐀𝐊𝐄 𝐌𝐄 𝐓𝐎 𝐂𝐇𝐔𝐑𝐂𝐇; Jameson Klars

𝐽𝑎𝑐𝑘

C A P Í T U L O  I I I

    —Soy el obispo José, Jason, ven a mi oficina.

Jason sabe de qué se trata, mira a su amigo con miedo.

—Disculpe no puedo ahora, estoy haciendo la tarea y..y es muy importante. ¿Para qué me necesita?— cuestionó confundido.

—Jack quería escaparse, solo queríamos hacerte una entrevista sobre cosas que sabías o si te llegó a contar algo.— Jason asiente.

Sale de la habitación y acompaña al obispo hasta su oficina.

Jack era un chico bastante triste, Jason solía platicar con él de vez en cuando y trataba de subir sus ánimos que estaban por los suelos. Él decía que prefería que todos se alejaran para que no sufrieran ni se preocuparan por lo que pasaba en su vida, solo quería estar con su pequeña hermana que es maltratada por su padre. Detestaba que su madre no pudiera estar sola y dependiera de un mal hombre que si quiera pude ver por si mismo. Muchas veces fue testigo de las golpizas que le da a su madre, y hace unos días se enteró de que habían golpeado a su hermana; supo quién lo hizo y justo quería hacer justicia por su familia.

Todo iba tan bien hasta que uno de los padres por accidente cerró la puerta de salida sin darse cuenta que él estaba ahí, aunque él deseaba morir pero también quería salvar a su hermana. Aunque bueno, eso es lo que le han dicho a Jason, que fue un accidente.

—...solo sé que quería salvar a su hermana, pero nunca me comentó que quería escaparse del internado.— contesta entre lágrimas mirando al obispo que parece no tener si quiera un poco de empatía por el castaño —Su meta era tener un trabajo y sacar a su madre y hermana de ese infierno.

—Pues ya ves. Es todo. Puedes retirarte, gracias.

Jason va de vuelta a la habitación entre lágrimas y sollozos. ¿Cómo podía ser que hace unas horas hablo con él en el salón de clases y ahora no está?. Simplemente no lo puede asimilar.

Solo piensa en un...¿Por qué?

Entra a la habitación captando la atención de sus compañeros de habitación. Estos cuestionan que qué ha pasado y el por qué de sus lágrimas.

—Jack está muerto. Esos hijos de puta...— cuenta entre lágrimas abrazando a Kirk, quien claramente le dará el apoyo y comprensiónque necesita en estos momentos.

El danés y el rubio comparten una mirada y su empatía hacia el castaño con sus manos en la espalda del de ojos plata.

「✧✦✧」

Está vez, no hicieron un funeral. Solo lo dejaron pasar, les informaron y nada más.

Kirk no era cercano a Jack pero llegó a charlar con él contadas veces. Ambos parecían compartir traumas familiares. Sentían empatía el uno por el otro pero nada más que eso. Quien realmente pasó más tiempo con Jack fue Jason. Quién se podría decir era su amigo o su confidente. Normalmente hablaban en la biblioteca cuando Kirk estaba ocupado o estaba en aislamiento.

Por otro lado, Lars y James están muy extrañados por lo que pasó y les contó Jason por la madrugada. No pueden creer que alguien tan joven haya muerto, porque ni si quiera fue un suicido, lo quieren dejar como un suicidio diciendo que el no se movió y quería ser aplastado.

—Bien, como ya todos saben...Jack falleció el día de ayer. Ya les explicaron las causas y demás. Yo no quiero hablarles de esto, y saben que si se sienten solos pueden contar conmigo. Malamente he notado que entre ustedes no se cuentan las cosas y se tiran odio— comienza a hablar Cliff moviéndose por los pasillos de sillas —, no debería ser así porque al final de cuentas solo se tienen a ustedes. Creen que están aquí porque es un buen internado, aunque la realidad es que no los quieren en sus casas, no tiene el dinero para mantenerlos, son adictos, ladrones, entre otras cosas. Muchos han cambiado otros no, a algunos de ustedes les ha tocado aprenderlo y comprenderlo a la mala. Ustedes tienen historias diferentes, ustedes no comparten esas historias porque piensan que se burlaran de ustedes aunque la verdad, es que todos están igual de jodidos. Ustedes no se dan la oportunidad de conocerse y apoyarse. Ustedes no comprenden nada de esto, agradezco a los que sí. Solo unos cuantos de ustedes han podido formar una relación de hermanos, buenos hermanos amigos y compañeros aquí dentro. Yo le pregunto a todos esos que su ego no les permite acercarse a los demás sin creer que son mejores: ¿Qué crees que te hace mejor que los otros? ¿Qué te hace creer que por ser un arrogante y todos te hacen caso tienes amigos, o mejor dicho: amigos leales?

…ustedes mismos tienen la respuesta, no hace falta que lo digan. No tienen a nadie más que a ustedes, aunque claro que sí quieren estar solos está bien. Tampoco necesitas de los otros. Pero vamos, si estás mal, tienes a montón de chicos rodeandote. Si eres bueno en algo, comparte eso en lo que eres bueno, si quieres que alguien sea una buena persona acércate y trata de ayudarla, intentar no te quitará nada y lo saben. La amistad de Eddie y Chris es algo que yo admiro, la de Rubén y Jhair, la de Daniel y Esteban, la de Ethan y Joel, Kirk y Jason, Chris y Moe. Ustedes saben lo que es importante y saben valorarse, tratarse y quererse como hermanos— algunos comienzan a pensar en lo que han hecho y demás, otros simplemente lo escuchan porque no les queda de otra. Aún hay chicos sin amigos, no se quejan porque es algo que no les interesa. Saben que al final alguien siempre muere...

「✧✦✧」

Kirk mira a su banca sin parar de mover su pierna izquierda con rapidez, sudando frío y moviendo los dedos golpeando la primera mencionada; sopla alejando su flequillo rizado de sus ojos por unos instantes volviendo a caer sobre estos.

Su estómago gruñe por los nervios, se encuentra solo en la biblioteca lamentándose por el chico. ¿Quién sería el siguiente?.

El Obispo Alberto (no tan querido por Kirk y Jason) se adentra a la biblioteca viendo la espalda de su queridísimo alumno. Admira sus rizos acercándose más a él.

—Hola, Kirk. Nos encontramos de nuevo...

Este deja de moverse, gira apenas su rostro viéndolo de reojo. Los nervios del moreno aumentan. Alberto toca su hombro y se agacha hasta quedan cerca de su oído.

—¿Qué hacías?— interroga en un susurró sonando sensual, para Kirk es sucio y asqueroso. Sabe en qué situación está. Siente como Alberto recorre sus piernas con sus largos dedos hasta llegar a su entrepierna desabotonando sus pantalones.

—Dejeme, no me toque más por favor. No me gusta...— pide amable tembloroso y sobre todo nervioso, sus piernas comienzan a temblar por el miedo.

—¡Kirk! Niñato, ¿Dónde estás? Necesito tu ayuda— se escuchan los susurros de James, y después su silueta acercándose desde un par de pasillos. Alberto se aleja, no sin antes amenazar a Kirk. Este se queda con los ojos llorosos y las piernas temblando por el miedo.

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Holii!!! Yo dije que tengo otra cuenta, pero está historia realmente me gusta y no me gustaría pasarla a mi cuenta secundaria (_hhmcca). Así que la terminaré aquí, espero les siga siendo de su agrado. Agradecería leer sus comentarios y ver sus votos, gracias igualmente por leer hasta acá. <3

Les tqm.
–Mcca