Capítulo 14

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Empiezo a buscar la maleta de mi padre en su closet ya que la mía se rompió en la mudanza. Tomo un par de janes, unos pantalones cortos, faldas, blusas y trajes de baño yaqué estos nunca deben faltar.

Voy hasta la habitación de mis padres para despedirme de ellos antes de ir hasta casa de Ámbar junto a los demás

- Hasta pronto papás – digo acercándome a cada uno de ellos para darles un abrazo y un beso en la mejilla

- Te cuidas mucho cielo – dice mi padre volviendo a abrazarme

- Claro que si

- Chao mi princesa – mi madre me da un beso en la frente - ¿Cuándo se lo dirás a Cameron? – susurra en mi oído

- Aun no lo sé, tengo que pensar en cómo hacerlo, espero que no lo sepa aun

Les dpi un beso más para después despedirme de Melody, la cual no se olvida de recordarme que le traiga un regalo

Son las cinco de la mañana, pero parece que son las doce de la noche. Veo las luces del auto de Luca llegar hasta donde estoy y yo solo puedo sonreír u acercarme a abrir la puerta del copiloto.

- ¿Qué tal está le mejor chico del mundo?

- No te diré hasta que lleguemos al aeropuerto

- Pues bueno, yo no te daré ni un solo beso hasta llegar al destino

- Esto no se vale – dice arrancando el auto

- Claro que si – sonrió maliciosamente y pongo un poco de música

Pasamos primero por Abby y Nicholas para después ir por Cleo y Nate. Tobías y Ámbar nos esperan en casa de mi mejor amiga ya que ellos irán en el auto del padre de Ámbar, para que puedan llevarlo de vuelta al igual que lo hará Connor ocle auto de su hermano.

Insisto a todos mis amigos que me digan a donde iremos, pero todos hacen caso a Lúchalo cual me molesta un poco, sin embargo, sé que me llevarán a algún lugar que me guste, por algo pasaremos cinco días.

El padre de Ámbar toca el claxon de su Mercedes Benz y nos indica que los sigamos hasta el aeropuerto.

Cuando llegamos lo primero que pienso es que tengo que tomar un chocolate para tener energía en el vuelo. Me pregunto si ahora me lo darán

- Luca ... ¿Me lo puedes decir por favor?

- Tanto que insistes ...

Me da mi boleto de avión y veo Perth, Perth me gusta demasiado y mis amigas lo saben por eso se lo dijeron a Luca seguramente.

- ¡Eres el mejor! – digo gritando y dándole un abrazo

- ¿Y mi beso? – hace puchero

- Hasta que lleguemos – digo – soy alguien de palabra

Camino hasta la cafetería y me pido una chocolatada, para mi esta funciona más que el café más cargado del mundo.

Pago mi bebida y empiezo a tomármela de poco a poco.

Anuncian nuestro vuelo y todos caminamos para que vena nuestros papeles y así poder abordar el avión.

Digamos que mi bebida no fue muy efectiva ya que solo duré diez minutos desierta después en el avión lo cual me dio un poco de gracia.

Aún faltan dos horas para que aterricemos así que me la paso conversando con Luca de cualquier tontería.

Quiero decirte que te quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora