Capitulo 11

1 0 0
                                    


Mamá y papá salieron un momento a la playa junto a mi hermano. Melody yo estamos esperando por Ella y Cesar. La salida de hermanas no se postergó, pero se unieron dos personas más.

Ella sale de su casa junto a Cesar y nos llama para que nos acerquemos y subamos a su auto. Mi hermano quería con toda su alma venir con nosotros y cuando digo con nosotros me refiero a Ella.

- ¿Cómo estás? – pregunta Melody a Cesar después darle un abrazo, sonreí al ver a mi hermana siendo cariñosa con alguien

- Al parecer son muy buenos amigos – agrego – gracias por haber aceptado salir con nosotros

- Para eso están las amigas

- Y los hermanos – dice Cesar pegando un salto

- ¿Nos vamos o nos quedaremos aquí sin hacer nada?

- Okey, ya nos vamos Melody – digo

Llegamos hasta el centro comercial en donde ya habia una fila para comprar los boletos para entrar a un simulador que tanto quiere Cesar. Ella fue a dejar nuestras cosas en unos casilleros junto a los dos angelitos. Ya quisiera poder decir eso de verdad.

- ¿Cuántos boletos vas a querer?

- Cuatro, por favor – digo mientras saco el dinero de mi bolsillo

- Que lo disfrutes

Melody llega sonriendo hasta donde estoy para luego entrar al simulador. Nos coloca a cada uno unas gafas, un chaleco y unos guantes que brillan.

Cuando la voz que controla los juegos nos indica que abramos nuestros ojos, veo distintas opciones de realidad virtual. Veo una que me agrada, relacionada con un mundo de fantasía y la intento seleccionar, pero en su lugar termino seleccionando una de una casa embrujada. Tal vez no esté tan mal.

- Estaba fatal – digo llevando mi botella de agua hasta mis labios

- ¿Por qué la escogiste? – pregunta Cesar

- No lo quise hacer, pero bueno ... ya pasó

- ¿Qué más les gustaría hacer? – pregunta Ella

- Es mi turno elegir – añade mi hermana

- ¿A dónde quieres ir?

- Hay una presentación de ballet en el parque

- ¡Ay no! – grita Cesar

Vamos hasta el parque y tomamos asiento en unas sillas que están en la parte de atrás. No puedo evitar reír con la expresión de Cesar que tiene dibujada en el rostro.

- Azul, tengo que irme ¿Te puedes hacer cargo de Cesar por mí?

- Bueno ... - era mucha responsabilidad

- Por favor

- Está bien

- Gracias, te lo compensaré

Ella se despide y entra en su auto para luego alejarse. Los niños están mirando la presentación mientras comen un poco de algodón de azúcar.

Digamos que no soy muy fanática del ballet, pero por lo menos paso con Melody un tiempo.

- Gracias por todo Azul, adiós Melody – dice Cesar entrando a su casa

- ¿Qué tal te pasaste? – le pregunto a mi hermana

- Excelente, te quiero Azul. Aunque no deberías ver nada de terror, ya sabes cómo te pones

- No estaba tan mal

Antes de que pueda abrir la puerta de casa, Luca se adelanta y la abre regalándome una sonrisa.

- Hasta que llegas – me abraza y le hago una señal para que vea que Melody se encuentra conmigo – tu madre te estaba buscando – miente muy mal

- No tienen que fingir conmigo – Melody entra en casa y sube hasta su habitación

- ¿Qué es lo que haces aquí?

- ¿A caso no te gustó? – hace puchero

- Claro que me gusta, pero me sorprendiste

- Esa era mi intención. Aparte de que te podía esperar aquí y pasar con ustedes hoy porque no están nuestras mamás

- ¿Qué sucedió?

- Nada malo, se encontraron con unas amigas o algo así

- Mejor, supongo – digo poniendo seguro a la puerta - ¿Te quedaras verdad?

- Esa es la idea – me dedica una sonrisa

Eso es lo que hoy necesitaba, una sonrisa para terminar con el día

Ambos estábamos exhaustos por lo que, pasando diez minutos de haber llegado a casa, cada uno fue a su habitación, bueno el a la de mi hermano y yo a la mía. No sé porque de repente cuando pienso en Luca un sentimiento de culpa me envuelve, tal vez por el hecho de que mi hermano pueda salir afectado por todo esto. Si, tal vez estoy dando mucha vuelta al asunto, pero las dos personas en las que más confía lo hemos estado engañando ... ¿Engañando? No, eso no, sin embargo, ocultando algo importante.

Dejando de pensar en eso me puse un momento de pie y camino hasta mi venta para encontrarme con el mar y una silueta en esta.

¿Quién pueda estar nadando a esta hora?

Me pongo una chaqueta y bajo con cuidado hasta la puerta de la terraza. Mientras más me acerco la silueta se hace un poco más visible. Me detengo cuando siento el agua tocando mis pies y fue lo suficiente cerca como para saber que se trataba de Dan.

Doy media vuelta para evitar algún tipo de conversación y sigo caminando

- ¡Hey! – grita y yo en detengo en seco

- Hola – digo – perdón por haber interrumpido, solo quería ver de quien se trataba

- Un poco de compañía no hace mal – sale del agua y empieza a mover el cabello - ¿Qué tal se la pasaron hoy?

- Bien, gracias por preguntar. Seguramente Cesar se los contara mañana

- Seguramente - y un silencio incomodo se presenta

- Bueno, creo que ya voy a entrar – digo de una vez

- Azul ¿Pasa algo?

- No, para nada, solo me tengo que ir

- Está bien, pero solo no quiero que las cosas cambien ya sabes ¿Amigos no?

- Exacto, amigos. Nos vemos en clase

Y nada había cambiado, o bueno eso es lo que quería creer. Me distancie de Dan por todo lo que había ocurrido, sus sentimientos y en especial por Luca. Igual, creo que sería bueno dejar atrás eso y que las cosas ya no estén un poco raras.

Me despido de Dan con un movimiento de mi mano y entro en casa. Paso por un poco de agua hasta cegar a mi habitación y ver a Luca sentado en mi cama

- Hey, ¿Qué haces aquí?

- Vine a ver como estabas porque escuché unos ruidos

- Solo bajé a ver quién era

- Dan Ellis – dice

- No sabía que era el, te lo juro

- No te preocupes, eso no me importa, pero pensé que te había pasado algo – por fin me mira – si te llega a pasar algo, me muero

- Yo no sabría que hacer – digo acercándome y dándole un abrazo – te quiero demasiado Luca

- Yo te quiero mucho más, Azul – me regala un beso en la frente y nos quedamos mirando hacia el cielo

Quiero decirte que te quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora