capítulo 13.

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mauro monzón.

- ¿Terminaron?. -Pregunté.

- Faltan las ventanas de abajo y la puerta, las ventanas de arriba ya estan. -Dijo Kevin.

Sí, finalmente terminamos volviendo a San Bernardo y estamos poniendo en orden la cabaña. La cual al llegar estaba en las mismas condiciones que cuando nos fuimos; La puerta destrozada y las ventanas todas rayadas a causa de los golpes para intentar salir.

- Otra vez estamos sin señal. -Dijo Thomas.

- ¿No sienten malas vibras?. -Preguntó Ori.

- Vos siempre las sentís, pero esta vez sí concuerdo. -Dijo Joaquín.

- ¿Mau, te fijas si podes poner la ventana del baño? No puedo yo, ya no me dan los brazos. -Dijo Mel y asentí.

Sí, hasta habíamos intentado salir por la ventanita de dos centímetros que hay en el baño. Era buena opción en ese momento.

[ ... ]

- Bueno, ya está. Podemos irnos. -Dijo Nick agarrando su mochila, acción que imitamos todos.

De un segundo al otro, todo se tornó negro y escuchamos el sonido de cerradura.

- Ay, no. Otra vez no. -Dijo Joe.

Ay, si. Efectivamente otra vez sí.

Todos corrimos a alguna ventana y yo hacia la puerta, nuevamente todo estaba cerrado...Y sin señal.

- ¡LA CONCHA DE TU MADRE, YO SOLO QUERÍA IRME DE VACACIONES CON MIS AMIGOS SIN PROBLEMAS!. -Gritó Thomas a la nada, y de repente se escuchó un golpe.

Mel apuntó con su linterna y estaba Thomi desmayado en el sillón.

- Quiero creer que se golpeó solo. -Dije temblando.

- Hora de romper todo nuevamente, y no pienso volver a arreglar nada. -Dijo Joe y todos corrimos a buscar algo para romper las ventanas y la puerta, mientras que Ori corrió a ver a Thomas.

Pasaron unos cuantos minutos y absolutamente nada funcionaba, esta vez no pudimos romper la puerta, por lo que ahora sí que estamos encerrados en la cabaña embrujada.

- ¿Y qué esperaban? Después de leer lo de la cabaña embrujada en internet somos los únicos pelotudos que vuelven. -Dijo Mel.

- Vinimos regalados. -Dijo Kevin.

- ¿Nuestro fin?. -Dije.

El argentino menos dramático.

- Las bolas es nuestro fin, Mauro. -Dijo Joaquín.

- Algo tenemos que hacer. -Dijo Ori.

- No digas patadas, Ori. Ya no tengo piernas de tantas patadas que di. -Dijo Joe y todos reímos.

Hacerle caso a Ori está bueno hasta que te hace pegar tantas patadas que terminas sin piernas.

- Está empezando a refrescar y no trajimos buzos. -Dijo Nick.

- Al frente del baño hay un mueble que tenía frazadas, ahí vengo. -Dijo Joaquín.

- No vayas solo, vamos. -Dijeron Joe y Nick.

- ¿Y Thomas?. -Preguntó Ori ya que Thomas no estaba más en el sillón.

Si yo hoy no me muero del cagazo que tengo, no me muero más.

Pero más importante...¿Y Thomi?.

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