Capítulo #5

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Me siento como un animal de circo.

De hecho creo que eso soy.

Cuando el animalito hace un espectáculo, los espectadores aplauden y ovacionan una acción tan simple como saltar sobre un aro, pero cuando se cansa todos lo abuchean y le lanzan cosas para que siga con el acto.

No basta con solo los golpes que recibe del domador, sino que también tiene que aceptar los golpes del público al no realizar un espectáculo.

Cuando subo al escenario solo veo cacahuates a mi alrededor, el público me aplaude y cuando me niego a hacer mi acto, los espectadores me abuchean.


... 


Cuando el programa llegó a su fin, todos los espectadores se preguntaban la razón por la cual no cantaron en el cierre de la entrevista, como lo hubieran hecho hace años.

Pero Louis estaba más que aliviado por eso. Todavía no era el momento de cantar frente a una multitud de personas y esperaba que ese momento no llegará pronto.

Después de la entrevista todos prácticamente corrieron al camerino a cambiarse. Tenían que salir rápido de ahí porque una multitud de fans los esperaba fuera del estudio.

Para su seguridad, los guardias, hicieron un camino cercado a la camioneta. La cerca no era de mucha ayuda, ya que la mitad del cuerpo de sus fans se inclinaba sobre ella, pero algo era algo.

Louis echó un vistazo hacia afuera y se puso nervioso. Había más fans esperándolos afuera del estudio que en la misma entrevista.

Se siente algo asqueado y decaído por los efectos de las anfetaminas que ya había disminuido notablemente.

Se siente alterado y los gritos de las fans lo aturden.

Cuando Josh hizo que se formarán en una fila para salir sus dientes empezaron a temblar, sentía la energía dentro de su cuerpo. Quería temblar y sacar todo, pero no podía, algo retenía a su cuerpo.

Esperaba que este desfile por el infierno, lleno de manos y gritos, pasara pronto.

No lo malentiendan, no odia a sus fans, ni las desprecia en lo más mínimo, solo, simplemente, no saben respetar el espacio personal y aunque él sabe que no es su intención incomodarlo, su cuerpo resiente las consecuencias.

Su cuerpo quiere empujar a la fuerza quien sea que esté invadiendo su espacio y su garganta pide gritar que se aleje.

Cuando empezaron a salir, su cuerpo le dio la orden a su cabeza de agacharla y no mirar a su alrededor. Necesitaba pasar esto rápido.

Los gritos se intensificaron y los flashes lo encandilaron cuando salió completamente. Un escalofrío recorrió su columna vertebral cuando empezaron a gritar su nombre. De cierta forma le asqueaba, no sabía si era por los gritos que retumban en sus oídos o la forma en la que decían su nombre, más bien el significado que tenía su nombre. La imagen del nombre "Louis Tomlinson" le perturba, porque esa persona por la que gritan, a la persona que llaman, es solo un personaje. No existe.

Y si aún quedaba un gramo de ese personaje en él lo sacaría de su organismo a la fuerza. No lo quería consigo.

—¡Louis! —gritó una chica, especialmente fuerte, y logró empujarle el brazo, algo brusco, atrayendo completamente su atención, haciendo que se detenga para mirar quién lo había empujado —¡Jódete, maldito malagradecido! —se lo escupió prácticamente en la cara.

¿Louis? [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora