¿Louis? [L.S]

Capítulo #13

Cuando Louis era apenas un niño escuchó un cuento que, hasta el momento, lo mantiene con claridad en su memoria.

Éste trataba de un pequeño patito que se encontraba triste, pues se había peleado con sus amigos y estos no le querían hablar.

Con los ojos llorosos el pequeño patito regreso a su casa buscando consuelo, pero cuando llegó a ésta, su grande mamá patita no se encontraba. Se había ido en busca de agua y lo había dejado solito sin nadie que lo consolará.

El pequeño patito lloró.

Lloró como nunca antes lo había hecho y su pequeña casita en el campo se inundó, pero aún así siguió llorando día y noche como nunca. Hasta que con sus lágrimas derramadas creó un estanque y su madre lo encontró.

El pequeño patito llorón con sus lágrimas consiguió que su madre lo consolará y sus amigos le hablarán.

Pero cuando Louis lloraba sus lágrimas eran absorbidas y ocultadas.

Cuando Louis lloraba no era llamativo ni dramático, sus lágrimas eran invisibles.

Louis no inundó su casa y sus lágrimas nunca fueron vistas.

Su madre nunca regresó para consolarlo y sus amigos apenas y se dieron cuenta de que se había "ido".

(Finales de verano de 1997)
(pasado)

La cámara antigua se prendió.
La luz roja a un lado del lente se iluminó dando inicio a un vídeo.

En la pantalla de la cámara se lograba apreciar a un pequeño niño sentado en el suelo mirando fijamente al carrito de juguete que tiene a su lado.

—Louis—. dijo una voz femenina en el video, pero el niño de los ojos azules no reaccionó.

—Amor—. volvió a hablar la mujer moviendo la cámara en sus manos. Pero, de nuevo, no hubo reacción alguna por parte del pequeño.

—Mi bebé—. llamó con una voz de súplica —Mírame.

El pequeño niño no se movió. Se reusaba a ver a su madre.

—Una sonrisa—. pidió —Dame una sonrisa, mi bebé—. su voz era dulce, como el de una madre debería de ser.

Johannah ya algo cansada dejó la cámara en una superficie plana y caminó hacia su hijo.

—Amor, se que no te gusta que vaya a trabajar, pero ahora estoy aquí. Mírame—. dijo poniéndose en cuclillas y tocando suavemente la nariz de su hijo —¿Qué te parece si vamos al parque?—. preguntó intentando animar a Louis —Te prometo que hoy y mañana no voy a trabajar y vamos a estar todo el día juntos—. propuso, haciendo que el niño la mirará por primera vez con emoción en sus ojos.